lunes, 14 de abril de 2014

Carta a ENEL, nuestro socio italiano

Cari amici:
Aquí en El Salvador, como en otras partes, hay gente que escucha “transnacional” y automáticamente piensa en “imperialismo”; escucha “transnacional italiana” e inmediatamente entiende “mafia”; escucha “explotación de la energía geotérmica” y escucha “robo de nuestros patrimonio”...
Estos tipo trasnochados los pueden encontrar en todas partes del mundo, no sólo aquí. La diferencia es: aquí llegan a gobernar. Como Mauricio Funes y Alex Segovia. Y se asocian con otros mucho más vivos que usan estos prejuicios ideológicos como cortinas de humo para esconder negocios oscuros y esquemas de corrupción. Trágicamente, a estos vivos les entregaron el control del sector energético: CEL, INE, LaGeo con sus negocios relacionados: seguros, abastecimiento, construcción de plantas, etc.

Bueno, todo esto ustedes ya lo saben mejor que nadie: Esta mezcla de ideólogos y vivos los tienen a ustedes, los socios internacionales en energía geotérmica, durante 10 años en incertidumbre, con litigios internacionales – y ahora con el intento de embargarlos por casi 2 mil millones de dólares.

Benvenuti in El Salvador! Somos el país de la sonrisa falsa...

Pagamos carísima la energía eléctrica, porque la más barata, la geotérmica, no la estamos explotando, porque algunos tienen la creencia casi religiosa que “explotar” es una maña imperialista, y que es mejor no aprovechar la energía en nuestro subsuelo que permitir que unos italianos, que a lo mejor son mafiosos, ganen de su explotación.

Todos nosotros pagamos el precio, cada mes con las facturas de CAESS o SUR, porque detrás de los tontos hay vivos que ganan millones con esta crisis energética. Ellos, lejos de ser italianos, sí son mafia...

A ustedes, que son una de las más grandes transnacionales de energía, este pleito no los va a quebrar. A nosotros sí. Y ahora resulta que esta nuestra alianza de tontos y vivos, a lo mejor sin saberlo, les está haciendo a ustedes un regalo millonario: Dentro de sus confabulaciones y estrategias para mantener el control sin transparencia sobre el complejo energético CEL-INE y la empresa más rentable del país (LaGEO), el gobierno Funes ha manipulado el valúo de la GEO de una manera exagerada, sólo para poner en la cifra astronómica de 2,100 millones de dólares el supuesto daño que el convenio de la CEL con ustedes como socio internacional ha significado para el país.

¿Por qué esto es un regalo millonario a ustedes y un enorme daño al interés nacional salvadoreño? Porque de esta manera el gobierno de El Salvador voluntariamente está inflando el valor de las acciones que ustedes tienen en LaGeo. En el litigio internacional, ustedes como ENEL ya solo tienen decir: Bueno, el mismo gobierno salvadoreño puso un valor de más de 2 mil millones a mis inversiones en El Salvador - ¡gracias, páguenmelo!

Parece que siempre, en una alianza de tontos con vivos, al final se impone la estupidez. Y nosotros seguimos pagando.

Arrividerci! Nos vemos en el arbitraje internacional. Paolo Lüers  
(Más!/EDH)