viernes, 7 de febrero de 2025

Carta a los militares: ¿En serio, quieren regresar al pasado oscuro? De Paolo Luers

 

"Ya no será como teóricamente funcionaba hasta ahora, que efectivos militares sólo podían acompañar a contingentes policiales y sólo actuar bajo su dirección. Hoy los soldados, aunque no están entrenados para esta tarea, son ‘agentes de autoridad’ por derecho propio." 

En la voz del autor: Autoridad.mp3

Publicado en MAS!  y DIARIO DE HOY, sábado 8 febrero 2025

Posiblemente ustedes no se han dado cuenta que están por cambiar la naturaleza de la Fuerza Armada. De manera casi clandestina, quieren borrar definitivamente los cambios que con los Acuerdos de Paz y las posteriores reformas constitucionales se dieron al rol de su institución en la sociedad.
 

Como ya es costumbre, lo hacen sin discusión pública, con engaño, para que nadie se dé cuenta. ¿O acaso el tema se ha discutido en el Alto Mando militar? Estoy hablando del cambio sustancial de la definición legal del ‘agente de autoridad’. Antes la ley decía “Agente de autoridad, los Agentes de la Policía Nacional Civil” (Código Penal, art. 39.4). En la reforma que esta semana pasó el dictamen de la Comisión de Seguridad Pública y pronto será aprobada por el pleno legislativo, se agrega: “...y los militares, cuando acompañen o realicen funciones de seguridad pública.”

 

Este detallito, que cambia la naturaleza de la Fuerza Armada, retrocediendo a su pasado más oscuro, está escondido entre docenas de reformas a los Códigos Penal y Procesal Penal, que tienen que ver con el aumente de penas para los delitos criminales. El tema de las condenas más duras capta toda la atención de la sociedad, de los medios y de los gremios de abogados. Y nadie se da cuenta que de contrabando están metiendo una reforma de mucho más importancia que las penas para homicidas o violadores. Estoy seguro que ni siquiera los miembros de la Comisión de Seguridad Pública se dieron cuenta lo que estaban aprobando...


En el orden legal de la postguerra, a la Fuerza Armada se le quitó, de manera tajante, su rol en la Seguridad Pública. Fue uno de los cambios claves dentro de los Acuerdos de Paz. Se terminó el capítulo oscuro de la Fuerza Armada, que antes estaba al cargo de la Seguridad Pública – con las nefastas consecuencias que casi le costaron su existencia a la institución armada. Una de las condiciones para seguir existiendo en la postguerra era que la Fuerza Armada se desvinculara de la Seguridad Pública. Y esto de manera radical: Se disolvieron todos los cuerpos de seguridad adscritas a la Fuerza Armada: la Policía Nacional, la Policía de Hacienda y la Guardia Nacional. Se fundó la Policía Nacional Civil, como la única institución encargada de Seguridad Pública.

 

El cuerpo de oficiales que quedó en la Fuerza Armada luego de la depuración desarrolló una nueva doctrina militar, conforme con esta separación de las tareas de Seguridad Pública. Quedaban atrás las pesadillas de los militares arrastrados a la represión y la persecución política. Podían asumir el rol de garante del orden constitucional y de una tropa al servicio de la población. Me recuerdo de las conversaciones que tuve con muchos oficiales contentos de poder dejar el pasado atrás y construir una nueva Fuerza Armada profesional y democrática. 

 

Cuando en los primeros años del nuevo Siglo, debido a la crisis de seguridad relacionada con el surgimiento de las pandillas, surgió la necesidad de que la Fuerza Armada apoyara a la PNC, las decisiones que se tomaron en este contexto fueran estrictamente temporales, amparadas por decretos ejecutivos excepcionales. Nadie quería revertir los Acuerdos de Paz y nuevamente militarizar la Seguridad Pública. La participación de efectivos militares en tareas de Seguridad Pública fue estrictamente bajo la dirección operacional de la PNC.

 

A partir del 2014, irónicamente bajo un gobierno de izquierda, la participación de la Fuerza Armada se hizo sistemática y permanente, incluyendo la aplicación de tácticas y armamentos militares en operativos conjuntos con la policía. Fui testigo que en esta situación hubo mucha preocupación en el seno del cuerpo de oficiales de la Fuerza Armada. Muchos no estaban de acuerdo con este nuevo -más bien viejo- rol de su institución. 

 

El gobierno de Sánchez Cerén emitía los ‘decretos excepcionales’ en secuencia permanente. Pero por lo menos se mantuvo la teoría que la participación militar en la seguridad pública era excepcional y temporal. 

 

Ahora que se institucionaliza una nueva dictadura, esta ficción ya va sobrando. Se borra definitivamente, con esta reforma escondida a la definición de la ‘autoridad de seguridad’. Y fíjense cómo se define: “...y los militares cuando acompañen o realicen funciones de seguridad pública.” Ya no será como teóricamente funcionaba hasta ahora, que efectivos militares sólo podían acompañar a contingentes policiales y sólo actuar bajo su dirección. Hoy los soldados, aunque no están entrenados para esta tarea, son ‘agentes de autoridad’ por derecho propio. La PNC saldrá sobrando. Incluso ya están transfiriendo partes del presupuesto de la PNC al ministerio de Defensa.

 

Se cierra el ciclo histórico casi como como inició: Ustedes los militares son nuevamente ‘agentes de autoridad’. A esta altura, cuando estas cosas ya no se pueden discutir libremente, no tengo idea qué piensan ustedes de este nuevo -viejo- rol. ¿Sienten que han recuperado un privilegio - o sienten que los están metiendo nuevamente en una película en la cual terminarán siendo, otra vez, los malos, los represivos?

Saludos, 

Posdata: 
El 6 de febrero El Diario de Hoy salio en su portada con el titular: "Piden que soldados tengan la misma autoridad que policías". El 7 de febrero El Diario de Hoy publicó en su versión online en el sitio elsalvador.com la "Carta a los militares: ¿En serio, quieren regresar al pasado oscuro?" de Paolo Luers. Este mismo día, en horas de la tarde, la fracción de Nuevas Ideas en la Asamblea recibía órdenes de retractarse de la reforma del art. 39 del Código Penal que daba a los militares la calidad de "agentes de autoridad". 
Casa Presidencial se retractó. Querían aprobar esto a escondidas, pero no pudieron.




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Ahora puede leer el libro, en tres entregas cada semana, en este blog. Disfrútenlo.


El jueves 30 de enero, se terminó la publicación de los 38 capítulos del Libro I: La Guerra. Los pueden buscar en este blog, comenzando con el capítulo 1, publicado el 25 de octubre 2024.

De la misma foma, se publicará el Libro 2: La Tregua, la segunda parte de Doble Cara. Se está preparando la publicación, revisando los archivos fotográficos.

El primer capítulo del Libro 2, sobre La Tregua, saldrá publicado a finales de febrero.




miércoles, 5 de febrero de 2025

Carta sobre la compañía Servicios Carcelarios Internacionales, SA de CV. De Paolo Luers

 

"¿Habrá Bukele realmente pensado que Trump no iba a detectar la trampa en la ‘generosa oferta’? Dar bullshit a un bullshiter mayor no es tan fácil...  

Así la historia de la otra mina de oro que quiere explotar Bukele: convertir en negocio hasta el lado más oscuro de su país, sus cárceles - y la ausencia de un Estado de Derecho."


Publicado en MAS!  y DIARIO DE HOY, jueves 6 febrero 2025

Para competir en el mundo, un país tiene que definir cuáles son sus mejores cualidades y capacidades y cuáles son los servicios que nadie más puede ofrecer. Bueno, lo que el gobierno salvadoreño mejor sabe hacer es manejar cárceles. Ya tiene casi el 2% de su población detrás de las rejas – y todo tranquilo, todo bajo control...


Partiendo de esto, parece lógico el negocio que Nayib Bukele ha ofrecido a Trump. Así la oferta generosa: “Tienes las cárceles llenas y ahora se suman decenas de miles de migrantes que van a detener para deportarlos. Te sale muy caro tener tanta gente encarcelada. Sobre todo porque las leyes de tu país te obligan a garantizar a los presos condiciones dignas, atención médica, tres tiempos de comida, etc. Yo no tengo estos problemas. Así que te puedo resolver esto mucho más barato. No hay leyes que me hacen estorbo, y si las hay, nadie me obliga a cumplirlas. Tengo las cárceles más seguras. Por un costo, que para ustedes es ridículo, puedo hacerme cargo no solo de los migrantes deportados, sino de cualquier criminal, sea extranjero o estadounidense.”

 

El jefe del State Department, Marco Rubio, no podía creer cuando Bukele le hizo esta oferta de negocio. Le iba a pedir que el gobierno salvadoreño se preste para recibir un par de miles de migrantes de diferentes partes, que no sabían como deportarlos a su países de origen. Este deal incluiría a migrantes que habían cometido delitos, incluso a pandilleros venezolanos y haitianos. Pero Bukele no quería entrar en discusiones sobre política de migración, ni mucho menos de Derechos Humanos. De un solo habló de negocios, sabiendo que es el lenguaje que entiende Donald Trump: Un deal.


¿Qué era lo que Bukele esperaba de Estados Unidos en este deal? Podría haber exigido que Trump mantenga válido el TPS para 180 mil salvadoreños. Podría haber exigido que dejen a los compatriotas afuera de las deportaciones masivas. Nada de esto. Lo único que pide es que le manden de regreso a los líderes de la MS 13 detenidos en Estados Unidos. O sea, que se suspendan las investigaciones de la justicia estadounidense contra ellos, antes de que salgan a la luz los detalles sobre el pacto que con ellos había negociado el gobierno de Bukele. 

 

Esta exigencia es una bofetada a la justicia de Estados Unidos, que durante año ha exigido que El Salvador extradite a una docena de líderes de la MS, que tienen juicios pendientes en Estados Unidos. Bukele siempre se negó a estas extradiciones – y ahora quiere invertir la cosa y pide que  extraditen a El Salvador a los jefes pandilleros que ya están formalmente acusados en las cortes de Estados Unidos. 

 

A Nayib Bukele no le preocupan estas complicaciones legales. Ha sabido superarlas en su país – y obviamente piensa que Trump va en la misma dirección.

 

Porque su gran idea de Servicios Carcelarios Internacionales SA de CV encontrará en Estados Unidos cualquier tipo de desafíos legales. A Nayib Bukele le podría parecer normal la idea de que en un país como Estados Unidos los tribunales permitan que personas bajo custodia del Estado cumplan se condena en un país en permanente estado de excepción y sin Estado de Derecho; en un sistema penitenciario administrado por un funcionario -Osiris Luna Mesa- sancionado por Estados Unidos; y en prisiones denunciados como centros de tortura.

 

Mandar a sus reos, aunque sean extranjeros, a este tipo de cárceles sería imposible para las cortes estadounidenses. Ni hablar de la idea de Bukele de recibir incluso a ciudadanos de Estados Unidos condenados de cualquier delito. 

 

Así que, Marco Rubio se fue del Lago de Coatepeque, impresionado de los espectaculares atardeceres y de la generosa oferta de Bukele. Al fin existe un aliado realmente confiable en la región, pensó. Pero ya el día siguiente, su jefe en la Casa Blanca lo obligó a regresar a la realidad: Trump había declarado que la oferta de Bukele era interesante, pero podría enfrentar problemas legales en Estados Unidos. Así que Rubio, ya estando en Costa Rica, comenzó a bajar las expectativas sobre el deal ofrecido por Bukele. 

 

“To good to be true”, habrá pensado Donald Trump, cuando se enteró de la oferta de Bukele. Este hombre, igualmente dado a dispararse con propuestas irreales (como la más reciente de evacuar a toda la población de Gaza y mandarla a países vecinos, para que Estados Unidos tome posesión de esta franja atractiva de real estate y la convierta en ‘la Riviera de Medio Oriente’...), sabe cuando otro le quiere dar paja – y lo pone en su lugar. 

 

¿Habrá Bukele realmente pensado que Trump no iba a detectar la trampa en la ‘generosa oferta’? Dar bullshit a un bullshiter mayor no es tan fácil...

 

Así la historia de la otra mina de oro que quiere explotar Bukele: convertir en negocio hasta el lado más oscuro de su país, sus cárceles - y la ausencia de un Estado de Derecho.


Saludos, 

 




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El jueves 30 de enero, se terminó la publicación de los 38 capítulos del Libro I: La Guerra. Los pueden buscar en este blog, comenzando con el capítulo 1, publicado el 25 de octubre 2024.

De la misma foma, se publicará el Libro 2: La Tregua, la segunda parte de Doble Cara. Se está preparando la publicación, revisando los archivos fotográficos.

El primer capítulo del Libro 2, sobre La Tregua, saldrá publicado a finales de febrero.



lunes, 3 de febrero de 2025

Carta sobre la extorsión como política de Estados Unidos – y los vendepatrias que se dejan. De Paolo Luers

 

"En El Salvador, la segunda escala del nuevo Secretario de Estado Marco Rubio en su gira por Centroamérica, ni siquiera hacen falta ni amenazas ni extorsiones. Nayib Bukele se ofrece voluntariamente como socio de Trump, ofertando nuestro país como receptor de deportados de otros países, específicamente para guardar a criminales deportados. Servicios Carcelarios, SA de CV. De manera que Trump, para deshacerse de extranjeros delincuentes, tendrá dos opciones: la cárcel militar de Guantánamo y El Salvador."

Publicado en MAS!  y DIARIO DE HOY, martes 4 febrero 2025

Los aranceles de Donald Trump no son una política económica, industrial o comercial. Son pura y dura extorsión. 


Poner aranceles a México y Canadá es, desde el punto de vista de política económica, lo más estúpido y contraproducente. Destruye el libre comercio en Norteamérica y toda la red de suministros, que para los tres países es la base de su fortaleza industrial. Las industrias y los consumidores de los tres países sufrirán las consecuencias, incluyendo Estados Unidos. Hasta Donald Trump sabe esto...

 

Los aranceles de Trump son instrumentos de extorsión. Él decreta aranceles, que no corresponden a ninguna lógica económica, simplemente para obligar a otros países a someterse a sus políticas. Luego Trump negocia, segúél desde una posición de ventaja.


Es bien claro en el caso de México: Lo que quiere Trump es que México use sus Fuerzas Armadas para asegurar la frontera Sur de Estados Unidos y a contener, al costo que sea, el flujo de drogas y migrantes hacia Estados Unidos. El sábado anunció que a partir del siguiente martes entrarían en vigencia los aranceles de 25% sobre cualquier producto mexicano. El lunes habla por teléfono con la presidenta mexicana Claudia Sheinbaum. En solo media hora llegan a un acuerdo: México mueve 10 mil efectivos militares a la frontera para sellarla – y Trump suspende los aranceles. Por un mes. O sea, mantiene la amenaza.

 

¿Qué significa este deal? Significa que con la amenaza con aranceles, Trump logró dictar a México una nueva política de seguridad frente a los carteles de narcotráfico. Y de paso, dicta a Sheinbaum una política nueva, mucho más radical, frente al flujo de migrantes. Hay un detalle interesante: Según las posteriores declaraciones del gobierno mexicano, México manda tropas a la frontera para bloquear la entrada de fentanilo y otras drogas a Estados Unidos. Pero, en la versión de Trump, las tropas mexicanas se encargarán de combatir a los carteles y de paso a contener a los migrantes, que buscan entrar a Estados Unidos. Se militariza, por dictado Trump, la política de seguridad a también la política migratoria. 

 

¿Qué significa esto para México? Significa que este país va a regresar a la guerra contra el narco, que causó un baño de sangre bajo el gobierno de Felipe Calderón – por cierto, sin resolver el problema, sino dejando a los carteles más fuertes que nunca, convertidos en ejércitos paramilitares. Como siempre, el mayor costo de esta guerra la pagó la población civil.

 

Veamos la dimensión de este desarrollo: México no regresa a la militarización del conflicto con los carteles en consecuencia del desarrollo de su política de seguridad. No es que el gobierno haya llegado a una nueva forma de desplegar la fuerza militar, con planes de cómo evitar una nueva explosión de violencia en el país. La nueva militarización del conflicto es resultado directo de una imposición por parte de Estados Unidos. Imposición mediante extorsión.

 

Igualmente le funcionó a Trump la extorsión con Colombia, cuyo presidente Gustavo Petro le hizo un berrinche, negándose a recibir a sus compatriotas deportados. Trump le amenazó con aranceles y Petro aceptó incluso asumir los costos de los vuelos de deportación. Frente a Panamá funcionó otro tipo de extorsión -la amenaza directa con una intervención militar- para obligar al país canalero a comprometerse a no reanudar sus acuerdos con China. Ojo: También en el caso de México Trump usó, aparte de los aranceles, la amenaza de intervenir directamente contra los carteles.

 

Difícilmente Trump va a lograr lo mismo con Canadá. Aunque menos dado al discurso nacionalista que México, Canadá es un país menos vulnerable y tiene aliados y socios más confiables que México. Ya se ve un acercamiento entre Canadá, Gran Bretaña y la Unión Europea como resultado de las amenazas de Trump contra todos ellos. 

 

Trump se queja que con muchos países Estados Unidos tiene un gran déficit comercial. No compran productos gringos, mientras Estados Unidos necesita importar grandes cantidades. No es, como él dice, la causa del declive de la industria gringa. Es al revés: es resultado de la mala calidad de la industria estadounidense. Construyen vehículos malos, que nadie quiere importar. En vez de invertir en la competitividad de su industria, Trump arma guerras comerciales sin sentido - y sin ganadores.



En El Salvador, la segunda escala del nuevo Secretario de Estado Marco Rubio en su gira por Centroamérica, ni siquiera hacen falta ni amenazas ni extorsiones. 


Marco Rubio y Nayib Bukele en los jardines de
la mansión presidencial en el Lago de Coatepeque

Encuentro romántico


Nayib Bukele se ofrece voluntariamente como socio de Trump, ofertando nuestro país como receptor de deportados de otros países, específicamente para guardar a criminales deportados. Servicios Carcelarios, SA de CV. De manera que Trump, para deshacerse de extranjeros delincuentes, tendrá dos opciones: la cárcel militar de Guantánamo y El Salvador.

 

Estamos pendientes que más Bukele ofrecerá a Rubio para quedar bien con Trump. Aquí nadie hablará de soberanía ni de dignidad nacional. Se hablará de amistad, como si existiera tal cosa entre un imperio y sus satélites...

 

Saludos, 




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El jueves 30 de enero, se terminó la publicación de los 38 capítulos del Libro I: La Guerra. Los pueden buscar en este blog, comenzando con el capítulo 1, publicado el 25 de octubre 2024.

De la misma foma, se publicará el Libro 2: La Tregua, la segunda parte de Doble Cara. Se está preparando la publicación, revisando los archivos fotográficos.

El primer capítulo del Libro 2, sobre La Tregua, saldrá publicado a finales de febrero.