Ahora, de los tres restantes, me atrevería a pronosticar que Ana Vilma de Escobar no será la candidata, pues es la otra con fuerza e independencia. Y por favor no salgan con la excusa que no sale bien en las encuestas, porque mejor que Luis Mario Rodriguez está, y no tan lejana de Rodrigo Ávila. Pero lógico lo de las encuestas, también en noviembre del año pasado Hillary Clinton estaba primera en todas las encuestas, mientras no había comenzado la competencia. Ahora cinco meses después Barack Obama parece imparable, creciendo como la espuma y rumbo a ser presidente de los Estados Unidos. Pues igual habría que analizar esas encuestas estáticas en las que han puesto de escusa para elegir la terna actual, y ver que información sirve para tomar una decisión, ¿qué segmentos de la población favorecen a quien?, ¿quién atrae más voto independiente?, etc.
Pero lo que peor me ha sentado de este proceso, es que después de ser eliminados de un proceso que les parece injusto, los exprecandidatos no digan nada, digan todo esta bien, aquí no ha pasado nada, es una maravilla de proceso, cuando por adentro se les nota la frustración, el engaño y la desdicha. Realmente si quieren un partido fuerte y solido, un partido que represente a los salvadoreños, un partido pluralista, incluyente, institucional, no están caminado por la senda correcta. Al dejar pasar todas estas cosas, al avalar un proceso donde no se sienten satisfechos, no le hacen un bien al partido, lo perjudican, lo debilitan, lo hacen ser más victima de las arbitrariedades y los dedazos.
Hugo Barrera escribió un muy buen comunicado llamando a mejorar el proceso, pues tal ves Don Hugo tenga que tomar las riendas del partido, y de verdad establecer el proceso que los convierta en una institución. Pero para eso necesitamos que se siga pronunciando, necesitamos que siga hablando y necesitamos que presione. Sino las quejas serán en privado y ARENA seguirá por el camino que va.
Y es que es importante que tengamos partidos sólidos, institucionales y plurales. No puede ser una consolidación ideológica al estilo del frente, o sea expulsando al que no este de acuerdo con lo que yo pienso. Tiene que ser un proceso abierto, de discusión de ideas y de construcción de país. Donde lo critico sea bienvenido, porque sino no habrá motor del cambio. Así por ejemplo tenemos en Estados Unidas, la bandera de Barack: el cambio, la lucha por la renovación, por la juventud, por estar en contra del establishment. Todo esto ha generado una expectativa y una esperanza en el partido demócrata increíble. Esto los ha fortalecido, esto los ha hecho ser mejor partido, y eso que Barack ha tenido que remar en contra de los Clinton, uno de los apellidos más importantes del partido.
Mientas no veamos esas señales inequívocas de lucha, renovación y critica dentro de ARENA, pues tendremos más de lo mismo y en ese caso Mauricio… ya es presidente.