Estimados amigos:
Dije que no iba a apoyar a ninguno de los tres candidatos a la presidencia de ARENA, pero cambié mi opinión luego de verlos en varios foros (lástima que nadie organizó un verdadero debate, donde hubieran podido interactuar los candidatos) y luego de hablar con un montón de personas (dentro y fuera del partido ARENA). Llegué a la conclusión de que esta decisión es demasiado importante como para dejársela solo a los areneros. Nos tenemos que meter los ciudadanos…
Es cierto que en las tres listas hay gente que creo que debería estar en el COENA pero también, en cada una de las planillas, hay otros que no deberían estar cerca del poder.
Sigo convencido de que lo mejor hubiera sido aplicar de una sola vez el voto cruzado, para poder escoger de las 3 planillas a los mejores. La modalidad de votar por planilla tiene una desventaja: “Winner takes all”, el que gana, gana todo el COENA y todos los demás se quedan fuera.
Sigo convencido también de que nuevamente se hace notar el déficit de debate político en ARENA; con el resultado que será difícil que los 28 mil electores voten por conceptos, por tendencias políticas distinguibles. En ARENA hay pluralismo político, hay diferentes corrientes, pero como no hay una cultura de debate, las opciones no quedan claras. Conociendo la trayectoria de cada uno de los candidatos y de los miembros de su respectiva planilla, habrá que adivinar la esencia política detrás de las tres ofertas.
Hay que aclarar una cosa: hay que criticar el déficit de debate y elaboración teórica en ARENA, pero en todos los demás partidos, incluyendo el FMLN, este déficit es total. En ARENA por lo menos hay debate, aunque le falte profundidad y sinceridad, pero en el FMLN se sanciona la crítica, la disidencia y el debate de ideas. Y en el PCN y GANA simplemente hay un hoyo negro de cinismo e ignorancia.
Lleguemos al punto: observando a los tres candidatos, sí fue posible ver que Edwin Zamora es el más consistente, el que menos usa retórica vacía, el que mejor comunica con los diferentes sectores y corrientes, no solo del partido, sino del país. La total falta de profundidad de Hugo Barrera y el exceso de retórica de Mauricio contrastan con un Edwin Zamora aterrizado, pero también claro en su compromiso serio y sostenido de renovación y apertura.
No dudo de la vocación renovadora de Mauricio Interiano, pero sí de muchos de los miembros de su planilla y personajes de su entorno. En la planilla y los equipos de apoyo de Edwin también veo personajes cuya vocación liberal y renovadora no me convence. Pero la dupla Edwin/Ana Vilma, juntos con jóvenes libertarios como Marcos Llach y Gerardo Barón, tendrán suficiente fuerza y consistencia política para garantizar que su COENA no se desviará del camino de la renovación, del pluralismo y de la apertura hacía la sociedad civil que son necesarios para construir en el 2018 y 2019 una nueva mayoría sólida.
Quien gane de los dos que predican ‘la renovación’ o el ‘giro nuevo’ inmediatamente tendrá que acercar al otro y la mejor de su gente a la dirección del partido. Espero que sea Edwin Zamora, y espero que Mauricio Interiano, Neto Muyshondt, Claudia de Ávila, Jorge Santacruz y Selim Alabí no duden en incorporarse. Igual que Orli Hellebuyk, de la planilla de don Hugo.
Sobre todo por la composición de su planilla, espero que la candidatura de Hugo Barrera quede en un distante tercero, dejando claro que la gran mayoría de los areneros apuestan a la apertura y no a ideologías desfasadas.
Y espero que luego de terminar este proceso, ARENA comience a cumplir su papel: ejercer una oposición que evite que el gobierno, en los casi 3 años que le quedan, termine hundiéndonos y construir la nueva mayoría para un gobierno que reconstruya al país.
Cumplan el domingo 28. Saludos de
(MAS!/El Diario de Hoy)