Era de esperar: en algún momento la
acumulación de tantas políticas fracasadas del gobierno, tantas
mentiras, tanta incapacidad mezclada con arrogancia de poder del Frente,
tenía que expresarse en las encuestas electorales. Ahora La Prensa
Gráfica inauguró la carrera electoral con su encuesta y no puede causar
ninguna sorpresa que el FMLN esté pagando el costo de sus pecados, y de
que ARENA esté arriba en la preferencia de los salvadoreños.
Me imagino que hay caras largas en el
campo del Frente y sus dirigentes, y caras alegres en el campo de ARENA.
Pero cuidadito, falta un año, y veremos muchas encuestas antes de ir a
elecciones en marzo del 2018. El Frente tiene razón de preocuparse, pero
aun tiene tiempo para corregir sus políticas. Ya reconocieron que
tienen que aplicar austeridad a su inflado y lujoso aparato de gobierno.
Y ya estarán pensando en serio si se pueden dar el lujo de seguir
haciendo lo mismo en Seguridad.
Pero ARENA no tiene mucha razón de celebrar. Lo que se refleja en esta encuesta, que ve a la oposición arenera 12 puntos encima del partido de gobierno, es el rechazo al FMLN, no necesariamente simpatía con ARENA. Es rechazo a las políticas del gobierno, pero no puede ser apoyo a las propuestas de ARENA, por una simple razón: Aún no hay propuestas claras de ARENA.
La reacción más fatal por parte de ARENA sería pensar que van bien. Es cierto, el gobierno y el FMLN van mal, y la gente comienza a expresarlo. Si los dirigentes de ARENA sacan las conclusión equivocada que su partido va bien, con el agravante que ya no hace falta más renovación programática y de liderazgo, pueden llevarse sorpresas feas en próximas encuestas.
Lo
único que comprueba el hecho que ARENA ahora sale mejor parada en la
opinión de los votantes es que les gusta el discurso de renovación que
ARENA ha adoptado. Pero a puro discurso no se puede sostener una
ventaja, hay que consolidarla con hechos concretos, con actos de
renovación. Si en las elecciones internas que ARENA tendrá este año para
elegir sus candidatos a diputados y alcaldes, el partido da pasos para
atrás en vez de atreverse a avanzar a más apertura, más democracia, más
meritocracia, la ventaja se puede perder rápido. No hay nada más dañino
que defraudar expectativas despertadas. Si no lo creen, pregunten al
FMLN que entusiasmó a muchos sectores con la idea del cambio, pero
terminó haciendo lo mismo…
No se equivoquen, opositores. Convertir
el descontento con el gobierno en votos por ustedes requiere de muchos
pasos prácticos de honestidad, humildad, audacia y apertura.
Guárdense el champán y comiencen a trabajar. Saludos,
(MAS!/El Diario de Hoy)