sábado, 23 de febrero de 2013

Carta a los que piden más gasto social

Estimados amigos:
Espero que pongan atención a lo que acaba de difundir FUSADES: Desde el 2006 hasta la fecha la pobreza se ha incrementado en más de 10%. Hubo 650 mil pobres menos antes de que asumiera el poder Elías Antonio Saca, en comparación con el país luego de dos años de gobierno del FMLN, en 2011. Los dos gobiernos que orgullosamente dicen haber gastado más en 'lo social' y que han desembolsado más subvenciones (los gobiernos de Saca y de Funes), en vez de reducir la pobreza, la han incrementado. Que ironía.

Si usted es de la gente que no creen en FUSADES, porque según el Frente es una organización de la oligarquía pegada a ARENA, les tengo que decir que se trata de cifras oficiales, recogidas por el gobierno de Funes en 2011. No son cifras de la derecha.

Si todavía no cree en las cifras, les recomiendo que se den una vuelta en las colonias de Soyapango, Mejicanos o en cualquier municipio rural del país. Es evidente que durante estos dos gobiernos hemos retrocedido en la tarea de reducir la pobreza. En 2009, cuando asumió el poder el FMLN, hubo más pobres que cuando asumió Saca. Y ahora, al final del gobierno Funes-FMLN, hay aun más.
Y ahora los dos quieren reengancharse con el poder: Tanto Saca como el FMLN se presentan a las próximas elecciones con la promesa de aumentar aun más el gasto social e incrementar aun más las subvenciones. ¿Cuántos pobres tendremos, entonces, al final de un tercer gobierno populista, en el 2019? ¿Otro millón más?

Y con el agravante que en esta situación, enfrentado con dos candidatos que con tanta elocuencia venden la idea de seguir apostando al gasto social, en vez de apostar a la inversión, ARENA se ahueva y ceda a la tentación de presentar a su candidato como el mejor Santa Claus de todos. Entonces, tendríamos tres propuestas populistas y ninguna que enfoque en sanear las finanzas públicas, aplicar austeridad y focalizar todo el esfuerzo del Estado en fomentar la inversión y el crecimiento.

Si ustedes son de los votantes que presionan a los candidatos a meterse en una loca carrera de promesas sociales, mejor deténganse un momento para reflexionar sobre las cifras de la pobreza: la miseria tiende a aumentar proporcional al gasto social. Y el empleo, que es la única vía sostenible para reducir la pobreza, tiende a aumentar proporcional a la austeridad del estado y a la focalización racional de las subvenciones.

La respuesta a la consigna "un vaso de leche gratis para todos los alumnos" no es "desayuno completo gratis para todos los alumnos", sino "leche y desayuno gratis sólo para los que no la pueden comprar", y "más y mejor empleo para que ninguna madre depende de leche regalada".

Piensen en todas estas cosas y cifras cuando en estos días los candidatos de la derecha populista y de la izquierda populista comiencen sus gira por todo el país ofreciendo subvenciones, regalos, y programas de asistencia.

Saludos,
 
(Más/EDH)

viernes, 22 de febrero de 2013

Entre pusilanimidad y realismo

"No estamos en el proceso como parte esencial del mismo, ni tampoco como mediadores. Nosotros estamos como toda la sociedad, esperando que las cosas caminen bien", dijo el Arzobispo de San Salvador sobre el diálogo entre las pandillas, y la sociedad civil, según La Página. Quisiera otorgar a monseñor el beneficio de la duda... bueno, la duda prudente a este periódico digital.

Sin embargo, me temo que bien pudo haber dicho esto el arzobispo. "Esperando que las cosas caminen bien" - pero no involucrarse, no comprometerse, no arriesgarse. Es la actitud pusilánime de muchos sectores frente a los riesgos y las oportunidades que ha abierto la tregua. La tregua plantea un reto a la sociedad - y muchos se corren o se esconden: los partidos, los ministros, las cúpulas de las gremiales empresariales, la mayoría de los obispos, muchos intelectuales... El presidente de la República da espacio y respaldo político a su ministro de seguridad para que siga facilitando el proceso que se abrió con la tregua entre pandillas y que está desembocando en un proceso de paz en las comunidades y los municipios -- pero no se atreve a apostar su capital político a esta oportunidad. No define sus prioridades, no decide focalizar todo el enorme gasto social del estado en áreas que hacen sostenible e irreversible el proceso de paz.

Por suerte aparecen cada día más actores nuevos, que sí apuestan a esta oportunidad histórica y le ponen el pecho a los riesgos, los obstáculos, las resistencias y las obstrucciones. Algunos apuestan su buen nombre, su prestigio acumulado, pero también su tiempo, como monseñor Fabio Colindres y don Toni Cabrales; otros se juegan hasta su vida, como Raul Mijango y sus colaboradores - y también muchos líderes pandilleros y comunitarios. Otros apuestan valientemente su futuro político, como el general David Munguía Payés, quien al asumir el ministerio de Seguridad hace lo contrario de lo que todos esperaban; pero igualmente los alcaldes quienes asumen liderazgo y negocian pactos comunales de paz con los dirigentes locales de la pandillas, de las iglesias y de la empresa privada. Y otros apuestan incluso su capital real: empresarios que invierten en empresas y proyectos para facilitar la reinserción productiva de los pandilleros y sus familias. Son pocos todos ellos, pero ya están cambiando la realidad del país - y poquito por poquito también la percepción que la gente tiene de esta realidad, o sea la opinión pública.

De repente, y muy a pesar de que los grandes 'liderazgos' del país siguen pasivos y escépticos, "esperando que las cosas caminen bien" (como dijo el arzobispo), el proceso se consolida por otros lados, proyecta liderazgos nuevos, y se institucionaliza - no en las instancias gubernamentales o partidarias, sino en el terreno, en los municipios.

Y se perfila, de manera tácita, un pacto político sobre el tema de la tregua y del proceso de reducción de violencia. No un pacto de apoyo unitario al proceso - para esto no alcanza ni la visión ni el coraje de los liderazgos partidarios, sino un pacto de no agresión (otra tregua, pero entre los partidos): "Aunque no nos atrevemos a apoyar abierta y decididamente al proceso de paz, tampoco lo vamos a torpedear, por lo menos no públicamente."

El carácter pusilánime (o prudente...) de este pacto nace de la situación muy volátil de la opinión pública sobre este punto tan delicado. En este momento todavía son mayoritarias las dudas, los miedos, las resistencias a este proceso de paz, a la mera idea de un entendimiento y una reconciliación con los pandilleros. Sobre todo en la opinión pública publicada: en los medios, en la clase política, en los sectores influyentes de clase media y alta... Hay que decirlo con toda franqueza: Son los sectores que menos han sido afectados por la violencia - y que ahora igualmente son menos afectados por la sensible reducción de la violencia. No vivieron el miedo antes, y no viven la esperanza ahora...

Pero muchos otros sectores sí la viven. Son los que empiezan a sentir el cambio en su diario vivir. Comienzan a sentirse menos amenazados. Comienzan a ver con otros ojos la tregua y la idea de la reinserción de los pandilleros y su entorno comunitario.

Los liderazgos partidarios no quieren arriesgarse a apoyar un proceso que todavía no ha encontrado apoyo y comprensión mayoritaria. Pero tampoco quieren arriesgarse a oponerse abiertamente, porque esto puede cambiar dentro del año que faltan para las elecciones presidenciales. Si la tregua y los pactos municipales se sostienen un año más, ¿quién en su sano criterio va a apoyar en el 2014 a un candidato presidencial que amenaza con abortar este proceso? A la altura de las elecciones la tregua, y la subsiguiente baja sensible de homicidios tendrá casi dos años de duración, y se habrán salvado unas 6 mil vidas. Los pactos municipales de paz tendrán un año de vida y aunque sus resultados no serán absolutos, algo habrán aportado a la convivencia pacífica de sus habitantes.

Claro, piensan nuestros líderes pusilánimes (¿o serán prudentes?), también existe el riesgo que en este siguiente año el tal proceso de paz y que de todos modos no entendemos no dé los resultados esperados. Por tanto, no me conviene ponerme a la cabeza de este proceso, ni identificarme con él. Así que voy a tomar la ruta de ni chicha ni limonada. No me voy a poner en contra, pero tampoco a favor...

Es triste que así sea el liderazgo de este país: incapaz de ver una oportunidad histórica cuando se da; demasiado vacilantes y pusilánimes para apostar a un proceso mientras no haya garantía que al fin sea exitoso y popular. Pero por otra parte, en el año que este proceso dura y está poniendo a prueba a los hombres y las mujeres que se involucran (y también a los que no se involucran), ya se ve que este vacío de visión y coraje está abriendo espacio para liderazgos nuevos. Incluso donde nadie lo esperaba y donde todavía nos cuesta reconocer que puedan existir liderazgo, visión del país y capacidad política: entre los pandilleros, en los penales y en las comunidades. Cuesta digerirlo, pero me atrevo a decir: En estos meses de luchar para hacer funcionar y sostenible la tregua, he perdido el respeto a buena parte de nuestra clase política, y al mismo tiempo conocido en la cárceles y en las comunidades hombres y mujeres que han actuado totalmente diferente que todos pensábamos: con principios y con visión del país. Esto me hace repensar muchas verdades que durante años parecían incuestionables. Quisiera tener la capacidad de transmitir esta experiencia.
(El Diario de Hoy)

jueves, 21 de febrero de 2013

Carta al Cadejo

¡Bienvenido!
No siempre las cosas buenas vienen de afuera. A veces, cuando hay emprendedores con coraje, creatividad, paciencia y terquedad, vienen de aquí mismo. Como la cerveza Cadejo.
Cuando hace más de un año mi colega Mariano, quien sirve tragos y Rock'n Roll en Repúblika, me contó que se había juntado con otros locos para fundar una nueva cervecería nacional, yo pensé: Ya sabíamos que Mariano es loco... Me encantó la idea, pero no le creía que era factible. Le dije: Bueno, cuando ya tenés la cerveza lista, habláme, yo con gusto te la vendo en La Ventana. Pensando que esto nunca iba a pasar.

Pues, está pasando. Anoche despachamos en La Ventana los primeros dos barriles de Cadejo: un Red Ale que me recuerda a la famosa cerveza roja irlandesa Kilkenny. Resulta que 'los locos' se atrevieron a invertir 1 millón de dólares para poner una cervecería donde todo el mundo asumía que existe un monopolio y nadie podía competir. Es más, estos descabellados retaron no sólo toda lógica sino además la idiosincrasia guanaca tirando al mercado unas cervezas totalmente diferentes a las que aquí toma la gente: ¡una Red Ale made in El Salvador! ¡Una cerveza de trigo made in El Salvador, aguantás! Pero precisamente en esta audacia reside su oportunidad de éxito. Yo ya superé mi incredulidad y estoy convencido que a estos emprendedores audaces salvadoreños les va a ir bien con sus cervezas exóticas hechas en El Salvador. Si se hubieran propuesto de competir con la Constancia tratando de hacer otra cerveza tipo Pils, yo no daría ni cinco por esta empresa.

¿Cuál es la receta del Cadejo, que seguramente les va a dar éxito? Buena calidad y atrevimiento para botar el prejuicio que aquí no se puede hacer una cerveza diferente y de alta calidad. Que lo bueno tiene que venir de Alemania... Obviamente, yo voy a seguir vendiendo las hermosas cervezas alemanas de trigo, chelas o negras. Y otras de Bélgica, Holanda, Inglaterra, Irlanda. Los salvadoreños tienen derecho de tomar buena cerveza, incluyendo los que no tienen oportunidad de viajar a Europa. No lo dice la Constitución, pero debería...

Pero igual los salvadoreños tienen derecho de competir con las leyendas de calidad y tradición de los europeos. Hoy con cervezas, mañana con moda, pasado mañana con alta tecnología y software. Me encanta, como Mariano y sus socios expresan esta idea de desafiar las leyendas: tiran su propia leyenda, la del cadejo hecha cerveza... Una idea brillante que no sólo revoluciona el mercado cervecero salvadoreño, sino también la creatividad de como lanzar una marca cuando todos auspician que no hay espacio...

Anoche el cadejo se apoderó de la barra de La Ventana. Por lo nuevo. Por lo atrevido. Luego va a tener que luchar por quedarse, por competir con los grandes.

Te deseo mucha suerte, cadejo. Paolo Lüers, servidor de cervezas y otros tragos amargos.
 
(Más!/EDH)

Columna transversal: "Neles pasteles"

Ya se me van a acercar quienes me darán la "versión oficial" sobre lo que pasó con la más reciente "renovación" del liderazgo de ARENA. Todo tendrá, como siempre su explicación, sus buenas razones, su "contexto para entenderlo". Habrá una versión pública, que se va a manejar en una gira por los sets de todos los canales de televisión. Y habrá una versión más privada, la "de confianza". La última va a incluir frases como "tienes razón, lo ideal habría sido incluir gente nueva y diferente, pero primero hay que crear las condiciones dentro del partido, tú sabes..."

No, no sé. Y no entiendo. Y escribo este comentario antes de que me lleguen a explicar lo inexplicable. Alguien tiene que expresar sin filtro lo que todos percibimos en estos días: La renovación del liderazgo opositor, nuevamente, está terminando en un aborto.

Hablo del liderazgo opositor, porque de esto se trata: un liderazgo mucho más importante que una dirección partidaria. ARENA talvez todavía no lo ha entendido, pero está frente a una batalla contra todos los demás partidos. Porque todos los demás partidos, de derecha, de izquierda y del centro, tienen un pacto "Todos contra ARENA", que también pudiera llamarse "Todos contra la institucionalidad democrática".

En el terreno electoral, le toca a ARENA asumir la defensa contra los peligros que significaría un segundo Gobierno del FMLN, o un segundo Gobierno de Saca, o un segundo del FMLN-Saca-Funes-Gana. Entonces, lo que ARENA está construyendo ahora, no es simplemente una dirección partidaria, es el equipo ganador o perdedor de la oposición.

Ya la designación del candidato presidencial no fue hecha tomando en cuenta esta responsabilidad. De la misma forma deficiente parecen proceder con la designación del candidato a la vicepresidencia. Y de la misma forma, o incluso más torpe, acaban de perder la oportunidad de la renovación del liderazgo.

Desayunamos con la buena noticia que en el nuevo COENA la diputada Ana Vilma de Escobar va a asumir la vocería del partido. Excelente selección. La persona idónea por su capacidad de diseñar estrategias de comunicación. La persona idónea para dar credibilidad a las versiones oficiales de su partido. La persona idónea para crear y coordinar un equipo de voceros para cada área estratégicamente importante: educación, salud, seguridad pública, empleo, finanzas públicas. Y sobre todo, la persona idónea, porque es preparada y blindada para el enfrentamiento principal y decisivo que será con Elías Antonio Saca. Es la mujer que ha mostrado que tuvo el coraje de parársele a Saca, incluso cuando era su jefe, cosa que no se puede decir de muchos de los integrantes del COENA.
Y de repente: "Neles, pasteles". Ana Vilma de Escobar, el arma más probada, más filuda y cargada para enfrentar y vencer a Saca ni siquiera fue integrada al COENA, mucho menos para asumir la dirección de la política comunicacional. Ponen en este cargo a Margarita Escobar, quien seguramente tendrá muchas cualidades, pero no la de ser la voz de una oposición, de un nuevo proyecto político. Mandaron un mensaje claro: No habrá renovación en la manera cómo el partido habla con la ciudadanía. Va a seguir hablando como partido, no como oposición o proyecto político.

Me parece perfecto que Alfredo Cristiani se haya apartado de la dirección ejecutiva del partido, ubicándose en un plano más idóneo para él: el plano de la elaboración estratégica; también me parece bien que el COENA se convierta en una dirección ejecutiva y que esta sea coordinada por un hombre como Jorge Velado, que es precisamente esto: un ejecutivo muy eficiente y responsable. Mejor aún cuando esta función es reforzada por una directora ejecutiva como Celina de Ávila, quien es la cara más fresca dentro del COENA, y la mejor posicionada para simbolizar un nuevo capítulo. ¿Pero habrá capítulo nuevo con un vicepresidente de ideología como Neto Muyshondt y con la permanencia de Hugo Barrera, Donato Vaquerano, Milagro Navas y Oscar Santamaría? Difícil sin la inclusión de nuevos sectores con nuevas ideas. ¿Cuál será el "script" para el siguiente capítulo? Más bien vemos señales que habrá más de lo mismo. Pero con más de lo mismo no se gana esta batalla de uno contra dos. Y dos que tal vez no duermen juntos, pero sin ninguna duda trabajan en el mismo proyecto que se llama: derrotar a ARENA para desmontar el sistema de pesos y contrapesos.

Los que me van a dar la versión oficial me van a decir: Mire, no tiene tanta importancia la inclusión o no de una persona, en este caso Ana Vilma. Tal vez no, pero es un síntoma de una terrible cerrazón, de un inexplicable temor al cambio y la renovación, y de la falta de visión estratégica.

¿Quién pondrá orden en este partido para que pueda asumir su rol histórico? ¿Quién llenará el vacío de visión y liderazgo? Norman Quijano no lo puede hacer, porque ya nadie quiere que el candidato tome el mando del partido. Cristiani tampoco, porque acaba de entregar el timón a otro capitán. Y los nuevos y hambrientos talentos políticos dentro de la oposición no lo pueden hacer, porque no los dejan entrar al COENA, y tampoco irrumpen botando puertas. El problema de ARENA no es que tenga divisiones, sino que no encuentra el valor de proyectar como capital político la pluralidad interna del partido y de la oposición.

Me entra una preocupación. ¿Quién defenderá el sistema de pesos y contrapesos en el país, si nadie está dispuesto de implementarlo en su partido y en su proyecto político?
(El Diario de Hoy)

martes, 19 de febrero de 2013

Carta al candidato presidencial de la oposicion

Estimado Norman:
¡Sorprendénos, por favor! Ahora que dentro de la oposición se agotó la discusión sobre tu candidatura y todos comienzan a apoyarte, incluyendo los que tenían objeciones, dudas u otras preferencias, todo depende de tu valor de sorprendernos con propuestas que nadie espera de tu candidatura y tu partido.
Los que estaban reticentes de abrazar tu candidatura, temían que serás 'más de lo mismo'. O sea, la misma ARENA reciclada. Bueno, con una cuantas decisiones y propuestas audaces puedes desarmar este escepticismo. No muchas, pero tan valientes que sorprenden a todo el mundo.

No creás que esto se resuelve con la elección de tu vice. Ya mostró el Frente que esto es paja: Óscar Ortiz no elevó el techo de votos posibles para Sánchez Cerén, pero ni un milímetro. Le ayudó a llegar más rápido a su techo - pero ahí topan y no avanzan, con o sin Oscar.


En el caso tuyo: Ni que tu vice fuera la mezcla entre madre Teresa y un icono de la sociedad civil como Martin Luther King, no te va a elevar tu techo de potenciales votantes, mientras no cambiás de manera radical las percepciones ya creadas que la gente tiene de tu persona. La gente piensa que sos hombre de la partidocracia, y para quitarte este sello no es suficiente eliminar los colores partidarios de tus anuncios y tu camisa. Requiere de decisiones políticas audaces: anunciar propuestas que ARENA nunca se atrevió a hacer. Como por ejemplo: que El Salvador entre a Petrocaribe, para que el Estado asegure la entrada de gasolina a precios más bajos, en vez de dejar que el FMLN se siga enriqueciendo con las condiciones preferenciales que da Venezuela.

Algunos ejemplos: Audaz sería anunciar que vas a proponerle un pacto al presidente de Guatemala: Yo apoyo tu propuesta de descriminalizar la distribución de drogas - y Guatemala se une a nuestra política exitosa de reinserción de los pandilleros y sus familiares al estado de derecho y la vida productiva. En un liderazgo conjunto enfrentaremos las causas de la violencia en Centroamérica. Ya no pondremos los muertos en ninguna guerra perdida de los gringos...

Audaz sería presentar, junto a tu vice (que obviamente tiene que ser un representante de los movimientos sociales que han luchado por la defensa de la institucionalidad democrática) una media docena de profesionales intachables: "Con estas personas voy a gobernar." Gente que nadie se imaginaba que iban a aparecer al lado tuyo: algunos porque no tienen ningún tufo a camiseta partidaria, otros porque en el proceso de selección de candidato nunca te han apoyado.

Audaz y sorprendente sería escuchar de vos que vas a restaurar dos instancias que mucho han servido al país, pero que han sido desmanteladas por Saca y Funes: la Comisión Nacional de Desarrollo y el Consejo Nacional de Seguridad Pública, pero con autonomía, autoridad y recursos propios.

Audaz sería anunciar que vas a reducir el presupuesto de la presidencia a la mitad y disolver el gobierno paralelo instalado en Casa Presidencial por Mauricio Funes, Vanda Pignato, Alex Segovia y Hato Hasbún.

Audaz sería no sólo hablar de la prioridad que vas a dar a la educación, sino establecer un porcentaje mínimo del presupuesto dedicado a Educación que permita hacer una revolución educativa.

Sólo son ejemplos. No hay liderazgo sin proponer con fuerza y pasión algunas ideas. Pueden ser otras, pero tienen que sorprender y romper la imagen que la gente tiene de Norman Quijano y de ARENA.

Saludos,

(Más!/EDH)