sábado, 19 de septiembre de 2009

A los diarios les gusta más dar noticias que ser noticia, y si algún día han de ser noticia, lo deseable es serlo por haber dado una gran exclusiva.

A los diarios les gusta más dar noticias que ser noticia, y si algún día han de ser noticia, lo deseable es serlo por haber dado una gran exclusiva. Me perdonarán los lectores esta digresión inicial, que en realidad no es sino una confesión de incomodidad: el tema que voy a tratar incide sobre un debate público-mediático muy enconado en el que no todo es juego limpio y en cuyo epicentro se ha encontrado EL PAÍS de una manera que puede erosionar su credibilidad. La tormenta comenzó el pasado miércoles, con la publicación en portada de un editorial titulado En la pendiente, en el que se criticaba muy duramente la política del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en materia económica. Este artículo editorial y algunas informaciones recientes han sido interpretados como un viraje en la línea editorial del diario y como una ruptura entre los medios del Grupo PRISA y el presidente del Gobierno.

Que un diario critique la política económica del Ejecutivo no debería ser noticia. Es lo normal en una democracia. Pero a raíz de ese editorial se ha propagado la idea de que esta posición no es fruto del convencimiento, de un análisis independiente y libre de sus periodistas, sino de una estrategia empresarial del Grupo PRISA frente a decisiones del Gobierno que considera lesivas. El pasado 13 de agosto, en plenas vacaciones estivales, un Consejo de Ministros extraordinario aprobó, en contra del criterio del Consejo de Estado, la regulación de la Televisión Digital Terrestre de pago mediante un real decreto ley, instrumento que la Constitución reserva para casos de "extraordinaria y urgente necesidad". El consejero delegado de PRISA, Juan Luis Cebrián, publicó el día 21 de agosto un artículo titulado Un desatino en el que afirmaba que ese procedimiento constituía un abuso de poder. Cebrián no se oponía a la regulación de la TDT de pago, sino al procedimiento empleado, por considerar que favorecía a otro operador, Mediapro, con el que PRISA mantiene un largo litigio por los derechos del fútbol.

Que el máximo ejecutivo de un operador privado defienda sus intereses no debería ser tampoco noticia. Tiene todo el derecho a hacerlo. Pero la coincidencia entre la polémica sobre la TDT y la publicación del editorial crítico con el Gobierno ha propiciado que se instale en la opinión pública una sospecha que también ha hecho mella en los lectores. Algunos, como Joaquín Gasca Gil, J. M. Sala Franco, José Luis García Lorenzo o Pablo Requejo, se han dirigido a la Defensora para pedir explicaciones. Otros, como Javier Muñoz Álvarez, Enrique Casanova o Mariano García Pechuan, para comunicar, dolidos, que han dejado de serlo. Se consideran traicionados.

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No forma parte de las atribuciones de la Defensora cuestionar la línea editorial del diario. Pero en la medida en que este editorial ha causado inquietud en algunos lectores y claro enfado en otros, le he pedido al director, Javier Moreno, que responda a sus inquietudes. Lo ha hecho extensamente, cosa que, dada la importancia del asunto, agradezco.

"No es cierto que se haya producido un viraje. La línea editorial de EL PAÍS no ha dado un giro de 180 grados a raíz de la aprobación de la TDT de pago a mediados de agosto. Ése es un relato que no encaja con los datos, que son siempre más tozudos que las opiniones. Y en este caso, los datos están a disposición de todos, en la hemeroteca del periódico, accesible a los lectores en elpais.com. Difícilmente un lector atento, que haya seguido con interés la cobertura de la crisis económica en EL PAÍS, habrá pasado por alto alguno de los titulares y editoriales que no encajan con la polémica que se trata de establecer, en mi opinión artificialmente".

"Sin ánimo de ser exhaustivo, citaré sólo tres: la primera que recuerdo fue el 4 de enero de 2008. Ese día EL PAÍS tituló a cuatro columnas en primera página: La economía acosa a los socialistas a sólo dos meses de las elecciones. El 25 de marzo pasado, también abriendo el periódico y a cinco columnas (lo máximo que permite el diseño), titulamos: El paro desborda al Gobierno a propósito de la cifra de paro conocida el día anterior, que por primera vez superaba los cuatro millones de desempleados; acompañaba a la información un editorial (Estado de alarma) que arrancaba en la primera página y en cuya primera frase se decía que la gestión del Ejecutivo en esta materia era "un rotundo fracaso". El 3 de agosto de 2008, el titular de la portada del suplemento Negocios tenía sólo tres palabras: Suspenso al Gobierno".

"No es ningún secreto que la decisión del Gobierno sobre la TDT ha merecido las críticas de EL PAÍS. También Juan Luis Cebrián, consejero delegado de PRISA, editora del periódico, ha expresado su opinión negativa (y por tanto la de la empresa) en un artículo de opinión el pasado agosto. Así que resulta también difícil de sostener que el diario maneja una agenda oculta a sus lectores. ¿Resultan más duras, por emplear un calificativo usado por algunos de ellos, las informaciones y editoriales sobre Zapatero y la crisis a la vuelta del verano? Sin duda. ¿Responde esto a un deterioro objetivo y cuantificable de la situación económica (paro, déficit, titubeos sobre el alza de impuestos)? Sí, también sin duda. ¿Supone un giro copernicano (donde antes apoyábamos sin fisura ahora atacamos sin fundamento)? Rotundamente no, según los datos a disposición de todos en la hemeroteca. ¿Alguna de las informaciones objeto de la polémica son falsas o utilizan torticeramente los datos en los que se basa la información para engañar al lector? Nadie, ni siquiera los lectores más críticos, utiliza este argumento. EL PAÍS y el Grupo PRISA pueden juzgar con dureza una decisión concreta del Gobierno, pero ello no va a cambiar la cobertura general, ni en un sentido ni en otro. ¿Aceptarían los lectores a partir de ahora una visión más "amable" de la crisis que azota España sólo para evitar suspicacias? ¿Sería esto compatible con la misión y la obligación de un periódico independiente como EL PAÍS?".

"Finalmente, unas palabras en defensa del periodismo y de la dignidad de la Redacción y de todos los profesionales que hacen posible EL PAÍS. Yo soy el director y como tal, responsable último de sus informaciones y de la línea editorial, que se debate ampliamente en los consejos editoriales. Pero en este diario nadie escribe al dictado. Y algunos de los mecanismos de control que aseguran la calidad a los lectores (el Comité Profesional o la Defensora del Lector, que me ha pedido estas explicaciones) aún buscan parangón en el resto de la prensa española". Ésta es la explicación del director. Lo pernicioso de una situación como ésta es que ninguna decisión se libra de las suspicacias. Si un editorial es crítico, será interpretado como una presión o una venganza; si no lo es, como una concesión que espera recompensa. La frase con la que termina Ignacio Carbó del Moral su escrito a la Defensora me ha llevado a una reflexión que requería mucho más espacio. "Lamentablemente", dice, "sus únicos intereses no son mejores que los de cualquier otra empresa cuyo objetivo son las ganancias por encima de otros aspectos. Malos tiempos para el país y para EL PAÍS".

Cuando la sospecha se instaura en el ecosistema mediático, no sólo afecta a la credibilidad del medio que está bajo escrutinio, sino a la del periodismo en general. Y crea desafección. Alimenta un discurso según el cual, parece normal que un Gobierno, del signo que sea, quiera tener medios afines y utilice para ello los resortes del poder; y también, que los operadores respondan a este juego utilizando su influencia para defender sus intereses empresariales. El resultado de este discurso es una idea de efectos letales: la de que todos son iguales, los gobiernos y los medios. Demostrar lo contrario es, pues, un imperativo democrático.

(El País, Madrid. La autora es defensora del lector en El País, una instancia creada para defnder los derechos del lector)

Nacionalizar el fútbol

Dismayed by his country’s World Cup qualifying campaign, Bolivia’s soccer-loving president has suggested nationalising football may be the key to success.

President Evo Morales, an outspoken leftist and close ally of Venezuela’s Hugo Chavez, said state control could help the national team raise its game.

“We’re sorry about the performance of our team in the qualifiers. Until now (soccer) has been (controlled) by private, autonomous entities … but they aren’t getting results,” local newspapers quoted Morales as saying on Friday.

Morales, who often holds impromptu kickabouts with supporters or reporters, said soccer should be “nationalised to dignify (the national team)”.

Bolivia are second from bottom in the 10-team South American qualifying group for the 2010 World Cup in South Africa. They have won only three of 16 games despite their home advantage of playing in the high altitude of La Paz.

Morales has taken over tin smelters, natural gas fields and telecommunications operators but he gave no explanation of how football might be nationalised and the country’s soccer federation is already a non-profit organisation.

(Vea a Evo Morales en video hablando de la estatización del fútbol)

Carta a una futura política

Hola chica:

tenés 23 años, ya te graduaste. Estás metida en la juventud de uno de los partidos políticos del país. Hablás con la arrogancia propia de la juventud: ¡Apártense, venimos a arreglar el país!

Me llega. Ustedes me invitaron para darles una charla – y me dieron una lección y una gran sorpresa: Están listos para asumir el país. Entre los 40 jóvenes entre 21 y 25 que estaban con vos esta noche, hay suficiente talento, suficiente coraje, suficiente madera para una futura dirección de ANEP, para conducir un partido, para un futuro gabinete de lujo, para reformar al país...

Bueno, ni tan futuro. Te repito lo que les dije anoche: Hay un vacío de liderazgo, ¡llénenlo! Tómense los espacios que las generaciones que salimos de la guerra fría (y algunos de la guerra caliente) ya no podemos llenar. Hicimos bastante, pero ahora les toca a ustedes.

Los que han gobernado, los que ahora están gobernando, los que dirigen los partidos, representan el pasado. Todos. Pelean y mutuamente se obstruyen por pleitos del pasado. Ustedes no se preocupan de fantasmas, llámense privatización o nacionalización. Si el transporte público hay que nacionalizarlo, ustedes lo pueden hacer. Y si parte del Seguro Social hay que privatizarlo, ustedes lo pueden hacer igual...

Tómense el partido. Tómense los gremiales. Tómense el país. Sin convertirse en políticos. Sigan haciendo sus carreras, pero ya no permitan que las decisiones que afecten el futuro se tomen sin ustedes.

No esperen que pasen milagros y los partidos se recuperan de su crisis. El milagro y la recuperación son ustedes.

Saludos Paolo Lüers

(Más!)

viernes, 18 de septiembre de 2009

¿Es o no Chávez un paria?

Woman walking poster of Muammar Gaddafi

Tripoli has been given over to huge posters proclaiming 40 years of Gaddafi's rule. Photograph: Ammar Abd Rabbo/AFP/Getty Images

Libya launched a week of lavish events tonight celebrating Muammar Gaddafi's 40 years in power despite a near total boycott by western leaders signalling their distaste at the welcome home given to the man convicted of the Lockerbie bombing.

Thirty African presidents flew into a city draped in flags, posters and banners proclaiming the achievements of the "Great al-Fateh Revolution" on 1 September 1969 that overthrew the pro-western monarchy and paved the way for the Jamahiriya, the "state of the masses", in which power is meant to be held by thousands of "peoples' committees."

But other leaders – including most European heads of state – are avoiding the event, as the fallout from the release of the convicted Lockerbie bomber Abdelbaset al-Megrahi continued to contaminate relations. Diplomats revealed that Britain's ambassador to Libya, Sir Vincent Fean, has gone abroad and will not be joining envoys and VIPs at the gala events – another deliberate snub after a planned visit by the Duke of York was cancelled as the Lockerbie row erupted in Britain.

Yesterday Libyan officials reported that Megrahi's condition had worsened.

The centrepiece of the celebrations is an enormous stage constructed in Green Square overlooking the Mediterranean, Tripoli's main public space and the scene of many of Gaddafi's famously rambling speeches. The main streets of the capital have been cleaned up and decorated with green flags and giant posters of Gaddafi in flamboyant uniforms.

Banners vaunt Libya's "New Dawn" and the achievements of the revolution.

Because it is Ramadan, the Muslim month of fasting from dawn to dusk, events will be held only at night.

Italian air force jets – the equivalent of Britain's Red Arrows – will stage a display tomorrow, prompting comments about how things have changed since the US air force bombed the capital in 1986.

Other plans involve concerts of Arab and western music, a son et lumière spectacular at the Roman ruins of Leptis Magna and a heavily promoted enactment of key periods in the country's 5,000-year history – highlighting Phoenician trade, Roman civilisation and Arab learning.

Camels, horses, fireworks, hot air balloons and a brass band from Wales are just part of an extravagant lineup.

Libyan officials are dutifully exultant – though most ordinary people seem bemused rather than excited at the scale of the fuss. "Of course we love our leader," said Naji, a 32-year old driver who lives with his mother because he cannot afford to marry. "But this is a rich country with a lot of poor people."

Earlier, Presidents Robert Mugabe of Zimbabwe and Omar al-Bashir of Sudan – wanted for war crimes in Darfur – rubbed shoulders at an African Union summit called by Gaddafi, the organisation's current chairman.

And there was a reminder of the Libyan leader's taste for controversy when he told fellow leaders that Israel was "behind all of Africa's conflicts", including Darfur and Somalia. "As African brothers we must find solutions to stop the superpowers who are pillaging our continent," he urged them.

The Libyan regime seems keen to limit the damage done by the reception for Megrahi at Tripoli airport so it is thought unlikely he will appear in public.

Seif al-Islam al-Gaddafi, the leader's influential younger son, insisted that Megrahi had not been given a "hero's welcome". No official reception had been held to mark Megrahi's return and both Libyan and foreign media were barred from covering the event, he wrote in the International Herald Tribune.

But the boycott of the anniversary celebrations by western leaders sends its own stark message to a regime that had been relishing its emergence from isolation.

Silvio Berlusconi, Italy's prime minister, was in Tripoli for a few hours on Sunday, but left after opening the first stage of a new highway linking Tunisia to Egypt and which Rome is paying for in reparation for the horrors suffered by Libya when it was an Italian colony. Venezuela's Hugo Chavez is expected.

This article was amended on Tuesday 15 September 2009. A remark that Venezuela's President Hugo Chávez is a current contender for the "pariah" status Muammar Gaddafi held for so long was removed. "Pariah" was the wrong word; we did not intend to suggest that other countries have broken diplomatic relations with Venezuela: we meant to convey that Venezuela's president is regarded by some as a controversial figure.

(The Guardian, London)


Periódico británico The Guardian rectifica falsa acusación
que describe a Chávez como paria

El periódico británico The Guardian tuvo que retractarse el día de hoy de la falsa acusación que publicara recientemente Ian Black, editor de asuntos del Medio Oriente, en la cual catalogó al presidente de Venezuela, Hugo Chávez, como “aspirante al título de paria que Gaddafi ha mantenido por bastante tiempo”.

Ian Black formuló este comentario, sin basamento alguno, en un artículo intitulado “Las sombras del Megrahi tiñen la gran celebración en Libia de los 40 años de Gaddafi (31 de agosto de 2009).

El Embajador de Venezuela en Londres, Samuel Moncada, se comunicó con el periódico The Guardian para exigirles una rectificación, y posteriormente Siobahin Butterworth, editora de la sección de lectores del Guardian, le informó al Embajador que su periódico “eliminó la citada oración de la página web, y agregó una nota a pie de página en donde se explica el cambio” y que señala lo siguiente: "Este artículo fue corregido el martes 15 de septiembre de 2009. Removimos un comentario que señalaba al presidente de Venezuela Hugo Chávez como
aspirante al título de "paria" que Gaddafi ha mantenido por bastante tiempo. "Paria" no era la palabra correcta; no fue nuestra intención sugerir que otros países han roto relaciones diplomáticas con Venezuela. Quisimos expresar que algunas personas consideran que el Presidente de Venezuela es una figura controversial".

Esta es la segunda vez que una publicación británica se retracta por versiones erradas en relación con Venezuela. El mes pasado The Economist se retractó de afirmaciones infundadas sobre una presunta participación de tropas militares venezolanas en Bolivia.

Al respecto, el embajador Moncada afirmó: “me complace saber que The Guardian se ha retractado de las falsas acusaciones que califican al presidente Chávez de paria. Desafortunadamente, han sido muchos los artículos de desinformación y manipulación en los medios británicos acerca de los avances en Venezuela. Razón por la cual siempre estaremos dispuestos a agotar todos los esfuerzos para contrarrestar dichas desinformaciones. Por encima de todo debe reportarse adecuada y honestamente para que sean los mismos lectores quienes lleguen a sus propias conclusiones”.


Prensa Embajada de Venezuela en Reino Unido e Irlanda del Norte / 18/09/2009


Cultura y maquinaria presidencial

La administración Funes ha transformado al ‘Consejo Nacional de Cultura’ (Concultura) en la ‘Secretaría de Cultura de la Presidencia de la República’.

Dice el decreto ejecutivo 8 (del 25 de junio de 2009), el cual da vida a la Secretaría de Cultura, en su articulo 13: “Se trasladan a la Presidencia de la República el personal y los bienes que forman parte del Patrimonio de Concultura”. O sea, se trasladan a control de Casa Presidencial museos, sitios arqueológicos, bibliotecas, teatros, casas de cultura, orquesta sinfónica, el CENAR, la Escuela Nacional de Danza, la Compañía Nacional de Danza... ¡hasta los animales del zoológico!

Según un comunicado oficial de la presidencia, “con este cambio, el gobierno del presidente Funes eleva el rango que tenía Concultura y proyecta un apoyo más decisivo a las distintas expresiones de la cultura salvadoreña.”

De una entidad del Estado, la autoridad cultural se ha convertido en una herramienta del ejecutivo, mejor dicho de Casa Presidencial. Esto tiene todo el sentido del mundo en el caso de la Secretaría de Comunicación o de la Secretaría Técnica. Son, por definición, herramientas de trabajo de la presidencia. La Secretaría de Comunicación no es responsable de las comunicaciones del Estado, mucho menos de la sociedad en general; ni siquiera del ejecutivo. Es -y tiene que ser- la unidad que maneja las comunicaciones de Casa Presidencial, siguiendo el lineamiento directo y sirviendo los intereses políticos del presidente.

Así la Secretaría Técnica: Es el instrumento, mediante el cual el presidente coordina al ejecutivo. El presidente es el jefe del ejecutivo, y su secretario técnico es su gerente. Un presidente siempre necesita, a su plena disposición, a su secretario privado, a su secretario de comunicación y a su secretario técnico.

Pero la cultura es otra cosa. Concultura, por lo menos en teoría, no tenía la función de ejecutar las ideas culturales del presidente de la República. Es el Estado, es la sociedad en general que necesitan una entidad que administre sus instituciones culturales, sus museos, sus teatros, sus casas de cultura; que genere políticas culturales y que fomente los procesos creativos. Los artistas, investigadores, promotores culturales, que trabajan en las distintas instituciones coordinadas por Concultura (y hoy por la nueva Secretaría), asumen funciones del Estado, no del gobierno, mucho menos de la presidencia. Yo no sé si Concultura realmente fue una institución plural, donde no importaban las afiliaciones partidarias. Pero transformándose en Secretaría de Cultura de la Presidencia ciertamente no va en dirección de más pluralidad y menos politización. Para fomentar la pluralidad, la inclusión de todas las expresiones culturales y artísticas, había que fortalecer la autonomía de la institución, en vez de supeditarla a las lógicas del aparato político de Casa Presidencial.

Significa una gran diferencia si, por ejemplo, las casas de cultura en los municipios, se proyectan como instituciones plurales y abiertas, o como instrumentos dentro de una secretaría de la presidencia que tiene por misión “propiciar un cambio cultural” (artículo 13 del decreto ejecutivo que da vida a la Secretaría de Cultura). ¿Qué lugar y qué apoyo tendrán, entonces, los artistas que no buscan ‘un cambio cultural’?

Hay consenso: Era necesario sacar a Concultura del Ministerio de Educación - pero para darle más autonomía. Lo que la cultura y las artes necesitan es exactamente lo contrario de lo que les recetó el gobierno Funes: Se necesita crear una entidad cultural autónoma, con un estatus de autonomía parecido al que gozan las universidades públicas, supervisada por una junta directiva con amplia participación de la sociedad civil, de los sectores creativos, de las universidades, etc.

Por cierto, lo mismo es cierto para los medios de comunicación estatales: En vez de darles autonomía, el presidente Funes los concentró en la Secretaría de Comunicación de la Presidencia, con el grave peligro de convertirlos en instrumentos políticos y de propaganda del gobierno de turno.

Lo preocupante es que todo esto está pasando sin debate público. Hace falta un debate público y profundo sobre la relación Estado-gobierno. Secretarías como la de Cultura, la de Inclusión Social (donde se fusionan las antiguas Secretarías de Juventud y Familia), no deberían ser instrumentos de la presidencia. El gobierno ‘del cambio’ no sólo reproduce las mismas prácticas erróneas del gobierno anterior (que de manera sinvergüenza usó la Secretaría de Juventud para fines políticos y partidarios), sino las extiende a otros campos: cultura, medios estatales, y.... planificación. Porque también la nueva Secretaría de Asuntos Estratégicos nace con el mismo defecto: nace como instrumento político de la presidencia, no del Estado, no de la sociedad. Sobre su creación, que teóricamente tiene mucho sentido, pesa el pecado original de la muerte violenta de la Comisión Nacional de Desarrollo (CND) a manos del gobierno Funes. La CND sí era autónoma y plural, pero tuvo que ceder sus funciones a una secretaría de la presidencia. Mala señal, igual que en el caso de cultura...

Urge un debate de la sociedad sobre estos cambios donde el estado pierde y el ejecutivo, mejor dicho la presidencia, gana control.

(El Diario de Hoy/Observador)

jueves, 17 de septiembre de 2009

Carta a Manuel Melgar, ministro de Seguridad

Estimado Manuel:

Si quieres hacer algo para ayudar al presidente (y de paso al país), ¡renunciá! Tenés que ahuecar y dejar que alguien con más capacidad y más liderazgo tome el mando.

No podemos seguir teniendo un vacío de poder en la cúpula de seguridad. La falta de mando en Seguridad y PNC es inmediatamente aprovechada por los delincuentes.

Vos puedes tener buenas intenciones, aunque tampoco las conocemos, porque no has tenido la capacidad de formularlas. Pero este volado no es de buenas intenciones. Para combatir al crimen, hace falta liderazgo y mando... ¡y un plan! Líneas claras que cada policía puede entender. Y cada ciudadano también. Necesitamos al frente de Seguridad alguien a quien los delincuentes tengan miedo y los ciudadanos tengamos confianza.

Tengo claro que no es tan chiche que te sustituyan, porque tu cargo es parte de la cuota del FMLN en el gobierno. Ahí hay dos posibilidades: Una que asuma alguien del Frente, pero alguien con capacidad de estratega y con vos de mando. Y que a partir de ahí el Frente se haga responsable de conducir este combate. Con todas las consecuencias.

O la otra: que den chance a Henry Campos, tu viceministro, en vez de seguir la batalla perdida de meterlo como Fiscal General.

El problema ahora es que en el tema de Seguridad, el Frente no hace, pero tampoco deja que otros asuman.

Vos puedes cortar este nudo con un tajo: renunciar y obligar a Funes y al FMLN a ponerse claro con Seguridad...

Te saluda Paolo Lüers

(Mas!)

miércoles, 16 de septiembre de 2009

"Ahora corren tiempos muy peligrosos para los periodistas"

El afamado periodista norteamericano Jon Lee Anderson ofreció ayer una conferencia en la Casa de Cultura de Chiclana en la que expuso los riesgos de la profesión en países latinoamericanos. Esta charla se enmarca dentro del I Curso Internacional de Libertad de Expresión que se celebra en esa localidad, organizado por la Facultad de Periodismo de la Universidad de Sevilla y la Asociación de la Prensa de Cádiz.

Jon Lee Anderson comenzó su disertación con una frase que resumía la inseguridad de la profesión periodística en países latinoamericanos: "Ahora corren tiempos muy peligrosos para los periodistas". Antes, Rafael Navas, director de Diario de Cádiz, ilustró sobre la trayectoria de este escritor y reportero especializado en cubrir noticias en zonas de conflicto, quien posee un impresionante currículum. Entre sus libros se encuentran La Tumba del León: Partes de Guerra de Afganistán, La Caída de Bagdad (por el que recibió el Premio Reporteros del Mundo 2005), Inside the Liga y Che Guevara: Una vida revolucionaria, una de las biografías más importantes de Ernesto Guevara.

Anderson dijo que los países iberoamericanos padecen actualmente de "una carencia de estado de derecho. Ahora en estas naciones no hay dictaduras como hace 25 años, ni apenas guerrillas, pero a cambio hay mafias del narcotráfico que se han extendido por todo el hemisferio". Contó que hace dos décadas los periodistas morían en países como El Salvador a manos de los agentes de la seguridad del gobierno, mientras que ahora son los pandilleros, criminales o los protectores dentro del orden público los que matan".

Relató la fatalidad de tres compañeros y amigos periodistas en los tres últimos meses. Uno de ellos canadiense, "obligado en Irán a confesar asesinatos que no cometió"; la muerte de otro periodista del New York Times, "asesinado en el acto", y Christian Poveda, asesinado el pasado 2 de septiembre en una zona rural cerca de la colonia La Campanera, en El Salvador, la misma en la que durante 16 meses compartió con pandilleros de la Mara-18, protagonistas de su documental La vida loca.

El conferenciante criticó el abuso de poder en países como Venezuela, Colombia, El Salvador y otros estados del entorno, donde sus gobernantes tratan de controlar a la prensa a toda costa y donde apenas existen periodistas opositores al poder, salvo excepciones. "Esos dirigentes argumentan que los medios opositores son privados y al servicio de potencias extranjeras y que lo único que buscan son prebendas y lucro ", dijo.

Finalmente, Anderson mostró su preocupación por la tendencia política de esos países y la inseguridad del ejercicio de la profesión periodística en el hemisferio latinoamericano.

Por otro lado, hoy continúa el Curso de Libertad de Expresión que se desarrolla en el Museo Taurino de Chiclana, donde intervendrán profesores de facultades de periodismo de Andalucía.

(El Diario de Cádiz)




Estimado director de El Diario de Cádiz:

Me refiero a un artículo publicado en su medio el 15 de septiembre:
http://www.diariodecadiz.es/article/provincia/514922/quotahora/corren/tiempos/muy/peligrosos/para/los/periodistasquot.html

Soy periodista en El Salvador y opositor. Escribo publico todos los días críticas al gobierno. Es absurda la afirmación que en El Salvador "los gobernantes tratan de controlar la prensa a toda costa” y que “apenas existen periodistas opositores". No puedo creer que Anderson haya dicho semajante estupidez. En El Salvador hay democracia, periodismo libre y oposición. Que yo no estoy a favor del gobierno es otra cosa.


Paolo Luers, columnista de El Diario de Hoy, El Salvador.

martes, 15 de septiembre de 2009

Carta a un colega periodista:

Estimado amigo:

Por favor, ¡dime que es un chambre mal intencionado lo que cuentan de vos! No puedo creer que dejas el periodismo para convertirte en el ‘segundo’ de la embajada den Washington!

Esto lo ha inventado alguien que quiere joder al presidente, alguien que quiere crear la impresión que este gobierno, así como el anterior, está llenando sus embajadas con primos y cheros. O hijos y sobrinos, en este caso, ya que tu papá es miembro del gabinete Funes y tu tío fue nombrado para representar a El Salvador en el Banco Interamericano de Desarrollo BID.

¡Qué invento mas malévolo! Por suerte nadie lo va a creer. ¿Quién cree que vos, que prácticamente estás dirigiendo un periódico, vas a preferir un cargo en una embajada, para aguantar que todo el mundo se burla de vos porque sabe cómo legaste ahí...

En cambio, nadie pudo dudar de cómo llegaste a la jefatura en el periódico. Llegaste a pesar de tu familia, y por esto todo el mundo te respetaba...

Así que, por favor, ¡dinos que todo es chambre!

Tu colega Paolo Lüers

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