sábado, 16 de mayo de 2009

México: responsabilidad y estoicismo

México ha refutado ante el mundo la versión de ser un "Estado fallido", pero el mundo, al parecer, no se ha enterado. Aunque el virus ha cobrado decenas de vidas y tiene ya un efecto devastador sobre nuestra lastimada economía, su estela destructora pudo haber sido mucho mayor si el Gobierno federal y los Gobiernos estatales (en particular los del centro del país, correspondientes a los tres partidos mayoritarios) no hubiesen reaccionado de manera coordinada.

Esa cooperación entre gobernantes de filiaciones diversas dio credibilidad a la acción estatal y contribuyó a que las instituciones de salud (con todas sus limitaciones presupuestales y técnicas, y sus rémoras burocráticas y sindicales) pasaran decorosamente esta prueba de fuego. La comunicación sobre la peligrosidad del virus no estuvo a la zaga: movilizó a decenas de millones de personas que respondieron atendiendo los lineamientos de las autoridades. Esa mayoría silenciosa fue la verdadera heroína en estos días aciagos.

Lo sigue siendo, como debería ser evidente para cualquier observador de buena fe. ¿Qué habría visto ese testigo en la semana álgida de fines de abril a principios de mayo? ¿Y qué vería ahora? Entonces habría visto el cierre pacífico y ordenado de escuelas, iglesias, restaurantes, partidos de futbol. Y ahora vería que en los restaurantes los meseros utilizan tapabocas, guardan su distancia de los comensales, se abstienen de tocar el pan que sirven, proveen sustancias desinfectantes y se comportan con precaución y diligencia; vería maestros y padres de familia ejecutando con buen ánimo labores de limpieza en los salones de clase; vería a las doctoras en el Aeropuerto Benito Juárez sometiendo, con delicadeza y celeridad, cuestionarios y pruebas pertinentes a los viajeros; vería "caravanas de la salud" recorriendo la ciudad con sus servicios; vería a las parejas abrazarse con tapabocas. En suma, habría visto y vería un despliegue notable de solidaridad y madurez cívica.

A pesar de estas evidencias, el balance general en la prensa mundial ha sido de reprobación. La razón es simple: sospecho que el sesgo tiene menos que ver con las carencias profesionales o editoriales de los reporteros que con el contagioso virus que se respira en la política nacional, un virus compuesto de radicalismo, distorsión ideológica y amnesia histórica.

Las facciones de los partidos han envenenado la atmósfera política mexicana. En plena esquizofrenia, mientras en el caso de la epidemia los gobernantes colaboraban entre sí, los jerarcas de esos mismos partidos se destrozaban en una escalada de calumnias. Otro elemento constante de discordia es la presunción nunca probada del fraudede 2006 y la consecuente fidelidad al ex candidato presidencial López Obrador, cuyo designio explícito es "salvar a México". Esta "salvación" no se aplicó en el caso de la gripe. Su grupo compacto y sus muchos simpatizantes han negado casi la existencia misma del virus y sostienen la idea de que se trató de una maquinación del Gobierno para imponerse en las próximas elecciones legislativas de julio. Aunque carece de sustento, esta visión condiciona el tratamiento del tema: reconocer que, en este caso, se actuó con relativo acierto es "hacer el juego" a un Gobierno de "derechas", es ir contra las pautas elementales de la "corrección política".

La distorsión ideológica es una manía muy difundida en ciertos círculos académicos (ciencias sociales y políticas, economía), mucho más que en ámbitos técnicos y científicos.

En aquéllos se han propagado las más extrañas teorías de conspiración y se ha manifestado una reprobación total hacia las acciones del Gobierno federal.

Los cargos son muchos, las pruebas pocas: reaccionar tardíamente (algo quizá hubo de esto), confundir las cifras, esconder la información, "atomizar" y desmovilizar a la población, exhibir "patrioterismo" y hasta "discriminar" a los chinos y suramericanos. En cambio, los científicos han visto con mejores ojos el desempeño oficial, tanto de Calderón como de Ebrard. El problema es que los reporteros internacionales suelen entrevistar sobre todo a los intelectuales académicos (con frecuencia a los mismos, algunos con obras respetables, otros sin obra alguna) y no a los científicos, ni siquiera a doctores de gran autoridad en este tema como Jesús Kumate y Adolfo Martínez Palomo. Sensible a ese sesgo, al menos The New York Times tuvo el acierto de pedir una colaboración a Julio Frenk, que dirige actualmente un instituto internacional de salud pública en Harvard.

El tercer factor es la ignorancia de la historia. Tras el terremoto de 1985, el Gobierno reaccionó con estupefacción y retraso, y puso trabas a la ayuda internacional.

Fue la sociedad civil la que salió a las calles devastadas de la Ciudad de México, en un acto masivo de solidaridad que rescató muchas vidas. Casi 25 años más tarde, gobiernos y sociedad actuaron juntos ante una contingencia casi tan sorpresiva como aquella y potencialmente más letal. Este progreso tangible fue reconocido por un solo reportero internacional: Larry Rother, corresponsal del New York Times en México en los años ochenta y noventa.

Amartya Sen ha argumentado convincentemente que los desastres naturales en India se han manejado con mayor eficiencia y menor costo gracias a la democracia: la intensidad permanente del debate público (que no existe en China) mejora el desempeño gubernamental. La tesis de Sen se ha comprobado en México.

El debate público (aun con las diatribas más irracionales) contribuyó a que las instituciones del Estado hayan cumplido con razonable eficacia su tarea. Pero la prensa internacional no ha reconocido ese esfuerzo ni ha tenido ojos para la verdadera noticia de estas semanas: la hazaña de una sociedad responsable y estoica, una sociedad que no tiene quien la describa.

(El País, Madrid)

Caudillo Chávez

La victoria en el referéndum del 15 de febrero, que le permitirá presentarse a la reelección indefinidamente, ha insuflado nuevas y alarmantes energías a Hugo Chávez. El presidente venezolano, muy alejado de la moderación que caracterizara sus primeros pasos en el poder, hace ya una década, despliega ahora una actitud mucho más agresiva y sin cortapisas. Lo mismo en el terreno económico, donde las nacionalizaciones se suceden en un equivocado intento de contrarrestar los primeros estragos de la recesión, que en el político. Chávez hostiga abiertamente a sus oponentes, especialmente cargos electos en noviembre pasado, y va camino de reducir a escombros a los sindicatos, a los que considera una rémora del pasado capitalista de su país, para sustituirlos por consejos de trabajadores obedientes al partido gobernante.

El llamado socialismo del siglo XXI que Chávez abandera es mucho más que un eslogan oportunista. Se va convirtiendo en un programa concreto para liquidar cualquier oposición articulada al chavismo. Por haber alertado tímidamente de esta clara deriva hacia el poder autoritario, la Organización de Estados Americanos acaba de ser demonizada por el líder venezolano, que cavila ya la puesta en pie por Caracas de una organización alternativa "de pueblos libres".

Es muy improbable que la libertad en Venezuela o en otro lugar del continente pueda ir de la mano de Hugo Chávez. Su último proyecto, en línea con la pasión refundadora de todos los caudillos, se llama Plan Revolucionario de Lectura, y pretende, entre otros objetivos, consolidar el hombre y la mujer nuevos, desmontar el imaginario del capitalismo y recontextualizar la historia (sic); las bibliotecas públicas ya están siendo abastecidas de títulos como El socialismo venezolano y el partido que lo impulsará, ¿Por qué soy chavista? y otros de semejante tenor.

La historia proporciona un apabullante muestrario de adonde conducen estos experimentos masivos en manos de dirigentes sin un apropiado control democrático, cual es el caso pese a las apariencias. La revolución cultural que Chávez dice pretender no se hace poniendo trabas cada vez más insalvables a la importación de libros. Nunca algo llamado Escuadra Revolucionaria de Lectura ha servido para elevar el nivel cultural de un país, estimular su democracia o abrir la mentalidad de sus ciudadanos. Sí para lo contrario.

(El Pais, Madrid)

La primera baja de ‘el cambio’


Vino ‘el cambio’, con su primera baja: William Meléndez, recién despedido director del noticiero Hechos y entrevistador del canal 12.

William ahora está pagando dos pecados: primero, aceptar el cargo de Mauricio Funes, cuando a él lo echaron del canal en el 2005. Funes demandaba que todo el personal se solidarizara con él, pero muchos dijeron, como William Menéndez: Como jefe, durante años nos trataste con las patas, no te debemos nada...

El segundo pecado: su independencia. Durante los años al frente del noticiero y de la entrevista, William no se dejó mangonear ni presionar de nadie. Ni del gobierno, ni del Frente, ni de Mauricio.

Cuando los mexicanos de TV Azteca compraron el Canal 12, al rato entraron en conflicto con Funes, quien bajo la tutela del fundador del canal, Jorge Zedán, se había ganado un poder ilimitado sobre la línea editorial del canal. Y sobre todo el personal editorial. Cuando los nuevos dueños querían reformar la estructura de la redacción, con una distribución más funcional de tareas y responsabilidades, Funes se negó. Terminó despedido, y cualquiera que se negaba a solidarizarse con él, se convirtió en enemigo personal y en traidor a la causa del periodismo crítico como lo entendía Funes.

Cuando años después Funes se convirtió en candidato presidencial, y cuando las encuestas le dieron buenas posibilidades de asumir el poder, muchos se hicieron amigos de Mauricio Funes. Y el candidato, sabiendo que no le convenía apoyarse sólo apoyarse en el FMLN, buscó a nuevos amigos. Para impresionar a los poderes fácticos del capital salvadoreño que todos estaban apoyando a su rival arenero, se hizo amigo de varios magnates mexicanos. La presea mas valiosa: El hombre que había echado de su canal en El Salvador a Mauricio Funes cuando todavía era un periodista, o sea un don nadie: Ricardo Salinas Pliego, dueño de TV Azteca.

Don Ricardo seguramente siente que algo le debe a este periodista convertido en candidato. Le empieza a recompensar. Cuando el candidato considera pertinente expresarse en las pantallas del canal 12, William Meléndez no recibe llamadas del comando de campaña de Funes, sino de México DF, comunicándole el día y la de la entrevista a realizarse con el señor candidato.

Otro pecado de William Menéndez: a pesar de que es sumamente extraño que desde al cuartel general de México le programen entrevistas, no se opone. Pero las conduce como Dios (o más bien la ética profesional) manda: con criterio independiente, no excluyendo preguntas críticas e incómodas. De estos raros reencuentros entre Funes y Meléndez en la pantalla del 12 salen entrevistas interesantes, muy diferentes a las realizadas en otros canales nacionales. Nada de entrevista lite, nada de periodismo de cortesía...

Una vez que Funes es presidente electo, los favores que consigue por parte de su nuevo amigo mexicano -quien cuatro años antes era enemigo suyo, del periodismo independiente de la humanidad al echarlo del 12- aumentó el nivel de favores. Ahora le presta a Funes su avión privado para viajar de manera más cómoda y plantosa a cumbres presidenciales. Parece que está dispuesto a prestar aún más: su canal de televisión. Hoy, a pocos días del traspaso oficial del poder, Funes recibe el favor que realmente borra el pasado y sella la nueva amistad: la cabeza de William Meléndez.

Así de simple: A William Meléndez echaron para quedar bien con el señor presidente. No es que no tienen el derecho de hacerlo. Nadie está llorando, a diferencia del año 2005, cuando un entrevistador desempleado se presentó como víctima del sistema represor y puso a llorar a toda la izquierda del país, comenzando así su carrera hacia la presidencia. No, los dueños del canal tienen derecho a poner en su pantalla a las caras que consideran conveniente.

Pero Funes y el Frente mejor dejen de hablar sobre ‘la defensa de la independencia del periodismo contra los oligopolios’.

William Meléndez es la primera baja en la guerra sobre el control de los medios que se va a desatar con la llegada de ‘el cambio’. Para no asumir que detrás de su despido haya algo tan bajero como un colega resentido que toma venganza al llegar al poder...

(El Diario de Hoy, Observador)

viernes, 15 de mayo de 2009

Los demonios del estado de visita en casa: crónica de un allanamiento

“¿Sin la justicia, qué serían en realidad los reinos, sino bandas de ladrones?”
San Agustín, La Ciudad de Dios

“A mis amigos lo que quieran; a mis enemigos la ley”, atribuido a Porfirio Díaz

Esto le tiene que quedar grabado a tus hijos, dijo estremecedoramente uno de nuestros captores.

Fue en ese momento que me devolvieron al cuarto, en donde toda mi familia vivía el momento más terrible de sus vidas: el allanamiento ilegal que una banda de terroristas de Estado hizo en mi casa el 24 de junio del año 2003.

Te vas a morir hijo de la gran puta. Y me hincaron. Ramoncito tenía entonces once años. El resto de la familia tenía los ojos vendados con mis propias corbatas, pero él no. Él estaba viendo. Yo le dije: tranquilo, no te preocupés, y le sonreí conmovido. Y pensé para mis adentros: aquí acabó todo... Leer el texto completo en ElPeriodico

Rechazo a nuevas agresiones a periodistas y medios

Ante la andanada de eventos que han puesto en entredicho la existencia de la libertad de expresión e información en estos días, el Colegio Nacional de Periodistas acordó:

1) Condenar categóricamente las destempladas amenazas hechas por el alcalde del Municipio Libertador, Jorge Rodríguez y dirigentes del Partido Socialista Unido de Venezuela contra nuestro colega Nelson Bocaranda. Las agresiones hechas por miembros directivos del PSUV son especialmente virulentas y constituyen un gravísimo precedente en la relación actual entre la sociedad y el Estado. Los contenidos emitidos por Bocaranda que produjeron la ira de Rodríguez son moneda corriente en otras latitudes y no revisten ninguna gravedad en particular: invitamos a quienes se sintieron agraviados a leerlas de nuevo. Bocaranda es un profesional que merece respeto y cuenta con el apoyo del CNP.

2) Repudiar, asimismo, los desplantes producidos a continuación en contra de las periodistas Joselyn Torres de Notitarde y Beatriz Adrián de Globovisión por parte de la dirigencia del partido oficialista.

3) El CNP lamenta profundamente los nuevos dicterios y amenazas hechas por el Presidente de la República, Hugo Chávez, en contra de los medios radioeléctricos y la prensa. Con todo respeto, le informamos al Presidente que cualquier agresión en contra de la libertad de expresión, de los periodistas de cualquier tendencia, se encontrará de frente con el gremio de comunicadores y con el resto de la sociedad venezolana. Le solicitamos al Presidente que no atice más la tensión cotidiana que mantiene tan enfrentados a los venezolanos, tomando medidas unilaterales en contra de los medios que lo critican. Le invitamos a que revise la programación de los espacios de opinión del oficialismo.

4) Las declaraciones del Viceministro de Comunicación e Información, Mauricio Rodríguez, en torno a la supuesta existencia de la pena de muerte en contra de los medios críticos a los gobiernos en otros países son, para el CNP, sencillamente risibles y demuestran una clara manipulación de la realidad.

5) Los periodistas integrantes de las diversas seccionales del CNP en todo el país están conscientes de que no son dueños de la verdad y acogerían con agrado cualquier invitación a discutir con el estamento gobernante sobre excesos, ética y obligaciones ciudadanas. Respetuosamente, les decimos a las autoridades del gobierno que antes que ofenderse por los contenidos críticos de algunos medios deberían revisar la parilla de programación de Venezolana de Televisión, que sólo acepta las versiones de la realidad que ofrece el PSUV; que veta hasta las opiniones de sus propios aliados y que tiene en sus horarios de mayor audiencia espacios donde abundan los insultos personales, el mal gusto y las violaciones más graves a la Ley Resorte.

El CNP vuelve a hacer un llamado a las autoridades y al partido de gobierno a respetar la libertad de expresión, aceptar la disidencia y tomar las criticas a las acciones del gobierno como un alerta para revisar y corregir aquello que no esté funcionando correctamente.


Sobre el desarrollo sostenible y los servicios ambientales.

El dilema de la conservación y sobre todo desde un punto de vista sustentable es muy difícil de abordar. Lo primero que hay que ver es que tenemos que tener unas variables que nos hagan posible entender esta realidad. Dentro de esta aproximación tenemos dos claras visiones, en una es claro que hay que valorar los servicios ambientales y para hacer este análisis se parte de que existen ciertos indicadores que pueden ser de diversas índoles. Pueden ser sociales, culturales, económicos, ecológicos y de producción. Siendo los únicos que se les puede dar precio los de producción.

En otro caso, cuando te dicen "internalizar las externalidades" significa que el que causa las externalidades asuma sus consecuencias, sean estas buenas o malas. El ejemplo clásico es la contaminación de un río, una fábrica río arriba y una granja río abajo, la fábrica echa desechos al río y la externalidad negativa que se produce es que la producción río abajo de la granja se reduce. Si la fabrica internaliza esta externalidad significa que pagara los costes (en este caso), ya sea pagara un sistema o filtro de sus desechos o compensara monetariamente a la granja por su perdida. Este ejemplo es sencillo y todo es medible o cuantificable.

En el caso de "externalidades positivas de carácter ambiental" pues es muy difícil hacer una valoración directa. Cuanto vale el aire limpio que genera el amazonas o como valoras el efecto de la contaminación del aire en santiago de chile en la salud respiratoria de los niños.
Ya que esta valoración directa es muy difícil de hacer pues se buscan medio de valoración indirecta y uno de los más utilizados en economía son los precios hedónicos, los cuales tienen sus pros y contras.

El ejemplo clásico que ponen de los precios es el siguiente: Imaginase que comprar un departamento, evalúa el área construida, la ubicación, etc. Pues supone que, en el mismo edificio, en el mismo piso hay dos departamentos exactamente iguales (en área construida y distribución), solo que un departamento no tiene "vista" (o tiene vista a más edificios) y el otro departamento tiene una preciosa vista a una "montaña verde". La diferencia en precio entre el departamento con vista y sin vista es el precio hedónico de la vista, es como valoras ver cada día una montaña verde. Este es un ejemplo muy sencillo, obviamente la valoración es mas compleja pero esta es una metodología que poniéndole cerebro puede ser practica de utilizar.

Pues bien entonces una aproximación más realista a estas valoraciones sería tener una serie de indicadores que demuestren como interactúan distintos grupos de variables, ejes; si esto es correcto, el modelo productivo puede tener cierta concordancia con los otros ejes, así impulsando un desarrollo mucho más viable.

Dentro de estas buscadas de desarrollo más viable tenemos la muy distinta visión de Joao Galhano, donde su enfoque de un mundo perfecto, es muchas veces difícil de integrar a las prácticas actuales de agricultura y de gestión del territorio. Al plantearnos cosas tan evidentes como que el hecho de cuales son las sociedades donde existe una biodiversidad total y tratar de imitar estos modelos en los casos que esta convivencia se allá mantenido. La diversidad total no significa el estado donde hay más especies distintas, tampoco significa ecosistemas donde hay depredadores, sino que significa ecosistemas-sociedades donde hay depredadores y el ser humano. Esta biodiversidad total es muy difícil de observar ya que normalmente el ser humano y sobre todo el occidental han excluido a los grandes depredadores quedando aislados los depredadores a zonas donde casi no hay intervención humana. Para el caso de Europa casi en ningún lugar. En este mundo ideal, se controla las poblaciones de grandes herbívoros, ya que el ciclo normal de depredador presa se restablece, volviendo fuerte y menos propensas a las enfermedades a estas poblaciones, además de otro gran número de beneficios asociados a esto.

Entonces, que es lo que nos enseñan estas sociedades que viven en diversidad total. Que existen una serie de técnicas positivas de convivencia entre humanos y grandes depredadores. Estas sencillas técnicas, comportamientos etológicos, que pueden variar desde tipos distintos de vocalizaciones hasta comportamientos de su sistema productivo. Siendo las técnicas de casa el “input” más directo. Aunque no todas las sociedades que viven en diversidad total son un modelo a seguir, por ejemplo la sociedad del parque natural Montesinho, en el nordeste de Portugal, existen una serie de percepciones sobre el lobo y la naturaleza en general, que explican en parte el desbalance ecológico que existe en la zona, con un numero muy bajo de depredadores y unos crecientes problemas relacionados con un exceso de herbívoros salvajes. Aunque ha habido un cambio de pensamiento en la zona, todavía existen una serie de problemas asociados a estas percepciones. En cambio en sociedades como los Sariska de la india, donde conviven con el tigre de bengala, existen características asociadas a su percepción de la naturaleza y del tigre que hacen que los sistemas productivos, tengan en consideración las especies silvestres. Tienen una clara visión de cuales son los peligros reales de la selva, además de tener una visión sistémica, y que existan una serie de valores psicológicos y mítico-religiosos. Esto produce que bien aunque en esta sociedad no halla una homeostasis total, si sea una plenamente satisfactoria.

Entonces cual es la función de los espacios naturales protegidas en esta visión del mundo ideal. Pues bien como se desde cualquier punto de vista son un taller de preparación al mejor mundo posible. Son lugares concretos donde se puede practicar este mundo ideal, siendo luego polos de expansión de experiencias. Así luego cambiando la percepción y la relación de unidireccional que existe en estos momentos. Existe una continua demanda de bienes y servicios de los espacios naturales, y casi todas las medidas de conservación van de afuera hacia adentro. Teniendo así una serie de “inputs”, pero rara vez se evalúa que es lo que sale del espacio natural, si el espacio natural es un ejemplo de cómo las sociedades tienen que convivir en esta biodiversidad total, entonces una de sus principales funciones a de ser, enseñar a esta gente que llega, cuales son los mecanismos para que funcione esta relación. Si este es el caso una necesidad fundamental en los espacios protegidos será que existan grandes depredadores y seres humanos conviviendo en los espacios naturales protegidos, para así poder aprehender ese ultra valor.

Además de esta visión, también tiene que haber métodos de valorar los bienes y servicios que produce un espacio natural protegidos. Siendo esta valoración de vital importancia para el desarrollo local. En esto existen dos grandes tendencias. Una es que el estado pague a la comunidad local, ya sea en dinero o en obra, para que la comunidad tenga una serie de bienes que luego no los tenga que extraer del espacio natural, o bien para que mantenga una serie de practicas que producen grandes beneficios para este espacio. Pues bien la otra forma de verlos es la diferenciación, lo cual implica el tratar de desarrollar la comunidad local dándole valor a las cosas que proceden desde esta comunidad y haciéndolas únicas. Como por ejemplo en el caso de Doñana (Andalucía, España), existe una fundación (Doñana 21), que garantiza la autenticidad de los productos hechos en la comarca de doñana y que pone un sello que identifica el producto como de origen de doñana y además como que la producción de este es ecológicamente recomendable. Dándole así un valor agregado que se puede traducir en un precio más alto en el mercado. Así la comunidad local obtiene más beneficios y hace que se empodere de su espacio natural, dándolo como suyo y poniéndolo como el valor más importante de la comarca. Así entonces la comunidad no tendrá conflictos con el parque sino que más bien tendrá mucho más aprecio por las cuestiones que se obtengan de este parque.

Para que se de el desarrollo de una comunidad local tienen que existir una serie de premisas, una es que la personas quieran su territorio, otra es que se obtengan claros beneficios económicos para ellos de una manera rápida y por ultimo que exista una coordinación entre los agentes de desarrollo (fundaciones, juntas, parque nacional, etc.) y ellos. Si no se puede trasmitir estos aspectos es muy difícil que exista este desarrollo, que en cierta medida es sustentable. Sino, casos como el de Somiedo (Asturias, España) serán las únicas experiencias exitosas, pero este éxito se debe en gran parte a la gran urgencia que había en la comunidad para tratar de solucionar un gran problema. Siendo así es mucho más fácil tratar de desarrollar una comunidad.

En el caso de El Salvador, es difícil, y que la mayoría de personas que viven cerca o en espacio natural protegido no sienten el parque como suyo, y tampoco lo ven con posibilidades de que este parque les brinde un medio de sobrevivir. Talvez una alternativa que ha surgido es la del Espacio Natural de Río Sapo, donde la comunidad es la que esta proponiendo que se haga un desarrollo turístico en la zona para ver si así obtienen algo de dinero. Talvez en esta comunidad se pueda comenzar a desarrollar actividad que puedan ser sustentables, para ellos y para el espacio natural, y por su puesto no solo basado en el turismo ya que esta actividad en El Salvador brindaría muy pocos beneficios. Pero ya que la comunidad tiene la iniciativa de querer desarrollarse entonces esa ahí donde se tiene la gran posibilidad de cambio para mejor.

Visiones 'krugmaniáticas' contra el euro

Hace unos días, Paul Krugman manifestó que la pertenencia de España al euro había acentuado la crisis y dificultaba nuestra salida de la misma. El núcleo argumental de estas y otras críticas se puede resumir como sigue. El euro impuso a España una política monetaria excesivamente expansiva. En consecuencia, la inflación en nuestro país ha superado año tras año la media de la eurozona haciéndonos perder competitividad y configurando tipos de interés reales negativos que han alentado el endeudamiento y alimentado la burbuja inmobiliaria. Además, la economía no puede contar con el estímulo de la devaluación para recuperar la competitividad perdida y propulsar la salida de la crisis. Así pues, la mejora de la competitividad ha de realizarse reduciendo el avance de los costes laborales unitarios por debajo del de los otros países, ajuste que entraña fuertes reducciones de los niveles de renta y empleo.

Los costes que se imputan al euro sólo serían tales en la medida que fueran mayores que los existentes bajo el patrón alternativo que se postula: la persistencia de la peseta como moneda independiente. Los críticos del euro olvidan que un tipo de cambio variable puede tanto depreciarse como apreciarse. Además, dan por sentado que una economía relativamente pequeña y muy abierta, como la española, puede llevar a cabo una política monetaria independiente de la que estén instrumentando sus principales socios comerciales. Esto es, presuponen que si España no hubiera entrado en el euro podría haber subido sus tipos de interés al tiempo que los principales países europeos los bajaban y hubiera evitado así el diferencial de inflación e impedido la acumulación de pérdidas de competitividad y volúmenes de endeudamiento como los registrados en los últimos 10 años. También consideran que una devaluación del tipo de cambio nominal ejerce siempre efectos positivos sobre los niveles de producción y empleo.

Tenemos lo más parecido a un experimento controlado para evaluar los límites y consecuencias de aplicar una política monetaria independiente en España: lo sucedido entre 1985 y 1992. En aquel periodo, el Banco de España elevó intensamente los tipos de interés, hasta situarlos casi dos veces por encima de los vigentes en los países centrales de Europa, a pesar de lo cual nuestra inflación media anual casi dobló la media europea. La pérdida de competitividad fue superior a la ocasionada por los amplios diferenciales de inflación debido a la apreciación registrada por el tipo de cambio nominal de la peseta. Así, en un periodo que duró la mitad de lo que lleva de vida el euro, la pérdida de competitividad fue más del doble de la sufrida dentro de la moneda única, siendo más de una tercera parte de dicha pérdida atribuible a la apreciación deltipo de cambio nominal de la peseta. Por otra parte, las sucesivas devaluaciones de la peseta no impidieron que el ajuste de la economía se realizara mediante pérdidas voluminosas de producción y empleo, alcanzando la tasa de paro niveles cercanos al 25% en la primera mitad de 1994.

No hace falta mucha imaginación analítica para visualizar lo que habría ocurrido si con los mercados de capitales y la globalización más potentes aún en lo que llevamos de siglo que en aquellos años nuestro país hubiera seguido con la peseta. Cualquier diferencial de tipos de interés no sólo habría inducido una apreciación del tipo de cambio nominal o diferenciales de inflación aún más intensos que entonces, sino que habría llevado a nuestros bancos a endeudarse fuertemente en divisas con bajos tipos de interés para satisfacer la demanda de financiación barata por parte de familias y empresas. Es difícil saber si en estas circunstancias la burbuja inmobiliaria hubiera sido mucho menor. Ciertamente no lo ha sido en países que tenían una política monetaria independiente, como el Reino Unido, Islandia, Hungría o Rumania. Lo que se puede afirmar con certeza es que en todo caso habría habido un exceso de endeudamiento y que la eventual devaluación de la peseta habría sido muy dañina para las familias y empresas endeudadas y, especialmente, para nuestro sistema financiero.

Es verdad que, llegada la crisis, podríamos contar con la devaluación del tipo de cambio nominal, pero cuando el sector privado o público de un país está fuertemente endeudado en divisas dicha devaluación tiene efectos contractivos. Por eso, el Banco de España, como están haciendo los bancos centrales de muchos países del este de Europa, se habría visto obligado a mantener tipos de interés muy elevados a fin de evitar el desplome del tipo de cambio y del sector financiero.

Las consideraciones anteriores sirven para refutar un mito firmemente arraigado en el subconsciente colectivo de nuestro país: la idea de que las devaluaciones de la peseta han sido el resorte fundamental para recuperar la competitividad perdida y suavizar las crisis económicas del pasado. El verdadero mecanismo de ajuste de la competitividad en el pasado, como en el presente, han sido las brutales pérdidas de empleo necesarias para reducir los costes laborales unitarios en presencia de la extraordinaria viscosidad nominal y real de nuestra estructura salarial. Ciertamente, las devaluaciones del tipo de cambio nominal en el pasado tuvieron efectos positivos, pero rápidamente evanescentes y además contrarrestados por la necesidad de mantener tipos de interés relativamente elevados como consecuencia de las expectativas de elevada inflación a largo plazo que anidan en un país propenso a devaluar de tiempo en tiempo su moneda. Las devaluaciones de la peseta de los noventa tuvieron efectos más duraderos que otras precisamente porque la entrada en el euro ancló las expectativas de inflación muy por debajo de las que existían antes y de las que hubieran existido si nuestro país se hubiera quedado fuera de la moneda única.

En resumen, dentro o fuera de un área monetaria, cuando un país tiene un mercado de trabajo tan inauditamente distorsionado como el nuestro está condenado a realizar cualquier ganancia duradera de competitividad a costa de ajustes de producción y empleo. Estos ajustes son menores dentro que fuera del euro por dos razones. En primer lugar, porque en el euro las pérdidas de competitividad son de menor entidad ya que el tipo de cambio nominal frente al grueso de nuestros socios comerciales no se puede apreciar durante la fase expansiva y el diferencial de precios acumulado es inferior por el anclaje de las expectativas de inflación a largo plazo. En segundo lugar, porque los tipos de interés son significativamente menores cuando se elimina la propensión a las devaluaciones recurrentes.

Comparado con estos beneficios, los costes de perder la posibilidad de una devaluación, que en el mejor de los casos tendría efectos efímeros y rápidamente contraproducentes, son irrisorios. Krugman terminaba sus admoniciones sobre España comparando la situación de nuestro país con la de California y Florida, señalando la ineluctable necesidad en unas y otras economías de sufrir dolorosos ajustes de producción y empleo. Es curioso, sin embargo, que no postulara para esos dos Estados norteamericanos lo que predicaba para España: que hubieran estado mejor si en lugar de adoptar el dólar hubieran tenido una moneda propia susceptible de devaluarse frente a la del resto de Estados del país.

(El País, Madrid)

jueves, 14 de mayo de 2009

Los torturadores voluntarios de Bush

Los documentos relativos a las prácticas de tortura empleadas en las cárceles de la CIA que el Gobierno de Obama hizo públicos el pasado 16 de abril arrojan una nueva luz sobre esta cuestión: ¿cómo explicarse la facilidad con la que han aceptado la tortura y la han aplicado a sus prisioneros unas personas que actúan en nombre del Gobierno estadounidense?

Los documentos que se acaban de publicar no revelan los casos de tortura concretos: éstos son de sobra conocidos por todos los que en su día quisieron enterarse. Sin embargo, aportan abundante información sobre la forma en la que se llevaban a cabo las sesiones de tortura y sobre cómo la entendían los agentes que la practicaban.

Lo más sorprendente es descubrir la existencia de una normativa increíblemente meticulosa, formulada en los manuales de la CIA y retomada, a su manera, por los responsables jurídicos del Gobierno de George W. Bush. Hasta ahora era posible imaginar que tales prácticas eran una muestra de lo que se suele denominar "atropellos", infracciones involuntarias de las normas provocadas por la urgencia del momento. Por el contrario, lo que se percibe en los documentos recién conocidos es que se trata de unos procedimientos pautados hasta en sus menores detalles, al milímetro, perfectamente cronometrados.

Así, las formas de tortura son 10, número que posteriormente será elevado a 13. Se dividen en tres categorías, cada una de ellas con diversos grados de intensidad: preparatorias (desnudez, manipulación de la alimentación, privación del sueño), correctivas (los golpes) y coercitivas (duchas de agua fría, encierro en cajas, suplicio de la bañera).

En el caso de las bofetadas, el interrogador, según estos manuales, debe golpear con los dedos separados, en un punto equidistante entre el extremo de la barbilla y la parte inferior del lóbulo de la oreja.

La ducha de agua fría aplicada al prisionero desnudo puede durar 20 minutos si el agua está a cinco grados, 40 minutos si está a 10 grados, y hasta 60 minutos si está a 15 grados.

La privación del sueño no debe ser superior a 180 horas, pero tras un reposo de ocho horas, se puede recomenzar.

La inmersión en la bañera puede durar hasta 12 segundos, durante un periodo que no debe exceder las dos horas diarias, y ello durante 30 días seguidos (un preso particularmente resistente pasó por este suplicio 183 veces en marzo de 2003).

El encierro en una caja de dimensiones muy reducidas no debe ser superior a dos horas, pero si la caja permite que el prisionero esté de pie, se puede prolongar hasta ocho horas seguidas, 16 por día. Si se introduce un insecto en el interior, no se le debe decir al prisionero que la picadura será dolorosa o incluso mortal.

Y así sucesivamente durante páginas y páginas.

Nos enteramos también por estos documentos de cómo se forma a los torturadores. La mayoría de esas torturas está copiada del programa que siguen los soldados americanos que se preparan para enfrentarse a situaciones extremas (lo que permite a los responsables concluir que se trata de pruebas absolutamente soportables). Y lo que todavía es más importante, se elige a los torturadores entre aquellos que han tenido "una larga experiencia escolar" en este tipo de pruebas extremas; dicho en otras palabras, los propios torturadores han sido torturados en una primera fase de su formación. Tras la cual, un cursillo intensivo de cuatro semanas basta para prepararlos para su nuevo trabajo.

Los socios indispensables de los torturadores son los consejeros jurídicos, cuya labor es garantizar la impunidad legal de sus colegas. Esto constituye otra novedad: la tortura ya no se presenta como una infracción de la norma común, lamentable pero excusable, sino que se convierte en la propia norma legal. En este caso, los juristas recurren a otra serie de técnicas. Para librarse de la ley, los interrogatorios deben realizarse fuera del territorio nacional de Estados Unidos, aunque puedan efectuarse en bases norteamericanas en terceros países.

Tal como se define legalmente, la tortura implica la intención de producir un gran sufrimiento. Se sugerirá, por consiguiente, a los torturadores que nieguen la presencia de esa intención. De tal modo que no se abofetea al preso para producirle dolor, sino para sorprenderlo y humillarlo. En cuanto al objetivo de encerrarlo en una caja de reducidas dimensiones no es provocar un desorden sensorial, sino producirle cierta sensación de incomodidad.

El verdugo debe insistir siempre en su "buena fe", en sus "convicciones sinceras" y en lo razonable de sus premisas. Se han de utilizar sistemáticamente eufemismos: "Técnicas reforzadas", en lugar de tortura; "experto en interrogatorios", en lugar de torturador.

También se evitará dejar huellas físicas, y, por esta razón, se preferirá la destrucción mental a los daños físicos; asimismo, se destruirán inmediatamente las posibles grabaciones o tomas visuales de las sesiones.

Otros colectivos colaboran en la práctica de la tortura: el contagio se extiende allende el limitado círculo de los torturadores. Aparte de los juristas que se encargan de dar legitimidad a sus actividades, en los documentos se menciona sistemáticamente a los psicólogos, a los psiquiatras y a los médicos (obligatoriamente presentes en todas las sesiones), además de a las mujeres (los torturadores son hombres, pero la humillación es aún mayor, más grave, cuando hay mujeres presentes) y a los profesores de universidad que proveen justificaciones morales, legales o filosóficas.

¿A quién debemos considerar hoy responsable de esta perversión de la ley y de los principios morales más elementales?

Los ejecutores voluntarios de la tortura lo son menos que los altos cargos y los magistrados que la justificaron y la fomentaron; y éstos, menos responsables, a su vez, que quienes teniendo el poder de tomar decisiones políticas les pidieron que lo hicieran.

Los Gobiernos extranjeros aliados, sobre todo los europeos, también tienen su parte de responsabilidad: pese a haber estado siempre al corriente de la existencia de estas prácticas y de haberse beneficiado de la información obtenida por estos medios, nunca, ni antes ni ahora, se preocuparon por alzar la más mínima protesta, ni siquiera hicieron el más leve signo de desaprobación. Quien calla otorga. ¿Habría que sentarlos en el banquillo?

En una democracia, la condena de los políticos consiste en privarlos del poder no reeligiéndolos. Y con respecto a los otros profesionales, se esperaría que sean sus iguales quienes les impongan el castigo, pues ¿quién querría ser alumno de semejante profesor, paciente de un médico tal o juzgado por un juez así?

Si se quiere comprender por qué estos valientes estadounidenses aceptaron tan fácilmente convertirse en torturadores, de nada vale intentar encontrar argumentos en el odio o en un miedo ancestral a los musulmanes o a los árabes. No. La situación es mucho más grave.

Lo que nos enseñan los documentos estadounidenses que acaban de hacerse públicos es que, siempre y cuando forme parte de un colectivo y esté respaldado por él, cualquier hombre que obedezca a los nobles principios dictados por el "sentido del deber", por la necesaria "defensa de la patria", o que se deje arrastrar por un temor elemental por la vida y el bienestar de los suyos, puede convertirse en torturador.

(El País, Madrid)

Chávez lanza su revolución cultural

El Gobierno venezolano ha hecho correr mucha tinta en los últimos cinco años para llenar de nuevos libros la "sección ideológica" de las bibliotecas públicas del país. Ahora, con las estanterías completas y habiendo concluido el programa de alfabetización, el presidente Hugo Chávez pone en marcha el Plan Revolucionario de Lectura (PRL) para "reafirmar los valores conducentes a la consolidación del hombre nuevo y la mujer nueva.

El Gobierno venezolano ha hecho correr mucha tinta en los últimos cinco años para llenar de nuevos libros la "sección ideológica" de las bibliotecas públicas del país. Ahora, con las estanterías completas y habiendo concluido el programa de alfabetización, el presidente Hugo Chávez pone en marcha el Plan Revolucionario de Lectura (PRL) para "reafirmar los valores conducentes a la consolidación del hombre nuevo y la mujer nueva, como base para la construcción de la patria socialista", "desmontar el imaginario del capitalismo" y "recontextualizar la historia", según el Ministerio de Cultura.

"Leer, leer y leer, consigna de todos los días. Lectura para la conciencia", dijo Chávez al anunciar el lanzamiento del proyecto desde la nueva sede de la Galería de Arte Nacional y ante un auditorio de niños vestidos con delantales rojos con letras blancas que decían: "Cultura, corazón adentro / misión socialista". "Tenemos que inyectarle a la contrarrevolución todos los días una dosis de liberación a través de la lectura", añadió. El PRL ha sido diseñado, según el mandatario, para generar "un acto colectivo orientado a fomentar el socialismo".

Las bibliotecas han sido rápidamente equipadas con ejemplares de El socialismo venezolano y el partido que lo impulsará, un libro escrito por el ministro de Finanzas, Alí Rodríguez, y el vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela, Alberto Müller Rojas. También con títulos como ¿Por qué soy chavista?, del ex ministro del Poder Popular para la Cultura Farruco Sesto, e Ideas cristianas y otros aportes al debate socialista, que reúne extractos de los discursos de Hugo Chávez en torno al tema de la condición socialista de Jesucristo.

Che Guevara

En la selección tampoco faltarán tomos sobre el pensamiento del Che Guevara y el Manifiesto comunista. ¿Es un proyecto ideológico? "Sí que lo es", dice sin rubor Edgar Páez, representante de la Oficina Nacional del Plan Revolucionario de Lectura, con la convicción de que hasta las recetas de cocina guardan entre sus líneas un mensaje ideológico. "Ha habido una declaración explícita del comandante-presidente en el propio acto de lanzamiento, cuando advirtió que se trata de un plan de formación, y todo plan de lectura es un proyecto de formación ideológica", sostiene Páez en una entrevista publicada por el semanario Todos Adentro, que edita el Ministerio de Cultura. Una de las preocupaciones, dice Páez, es que "los niños están siendo formados con libros que aún llaman descubrimiento a la invasión del Imperio español u otros eufemismos que buscan endulzar el genocidio de los pueblos originarios. Nosotros queremos, como parte de este plan, comenzar a llamar a las cosas por su nombre".

El PRL, al menos en su primera etapa, está dirigido a los adultos agrupados en las organizaciones vecinales, obreras y estudiantiles creadas por el Gobierno como base social de su proyecto político: a los Consejos Comunales, a las Empresas de Producción Social, a las Aldeas Universitarias. Luego vendrá el turno de los "colectivos neoalfabetizados" de las escuelas y los hospitales. Hace casi cuatro años, en octubre de 2005, el Gobierno declaró al país como "territorio libre de analfabetismo", al anunciar los resultados de la Misión Robinson, el programa de alfabetización puesto en marcha en 2003 con la cooperación del Gobierno cubano y antecesor del PRL. Hasta 2001, la media nacional de analfabetismo era del 9% entre los venezolanos mayores de 15 años. Entre 2003 y 2005, esa tasa se redujo al 6%, según los datos oficiales.

La aplicación del PRL tiene un cronograma muy concreto. Luisa, que es presidenta de un consejo comunal de una barriada popular del Estado de Carabobo, ya recibió instrucciones de cómo organizar a su primer grupo de lectura y qué títulos, de los que le han dado como referencia obligada, les corresponde leer en cada etapa. "Primero viene el momento de la selección y organización de los grupos, en el que debemos atraer a la gente hacia la lectura con libros como las Cartas de amor de Manuela Sáenz a Simón Bolívar, para que le agarren el gusto al asunto y no se aburran. Después es que viene el trabajo ideológico como tal y la división en escuadras".

Las Escuadras Revolucionarias de Lectura serán, según las instrucciones repartidas por el Ministerio de Cultura entre los consejos comunales, "la unidad básica de organización comunitaria y funcionarán como grupos de lectura en los que la selección del material bibliográfico estará definida ideológicamente, dado el contexto político y los objetivos del plan". A ellas, ordena el Ministerio, les corresponde desarrollar la etapa "de consolidación de la lectura para el pensamiento crítico y revolucionario".

Aparte de los libros antes mencionados para reforzar el "socialismo del siglo XXI" bolivariano, el Gobierno promoverá la lectura de un centenar de obras de autores venezolanos y extranjeros editadas en el país y repartidas en forma gratuita. Hasta el momento, el Gobierno sólo ha ofrecido los nombres de una decena de libros. Entre ellos aparecen Inventamos o erramos, escrita en el siglo XIX por Simón Rodríguez, maestro de Simón Bolívar, y algunos textos que fueron objeto de culto entre la izquierda venezolana de los sesenta y setenta, como Venezuela violenta, de Orlando Araujo, y Teoría de la ideología, de Ludovico Silva. También se incluyen otros libros menos célebres y más recientes, como Dictadura mediática, de Luis Britto García; Discursos de Chávez, de Leonardo Ruiz; Che, comandante del Alba, de Modaira Rubio, y El código Chávez, de Eva Golinger.

(El País, Madrid)

Carta a Álvaro Colom, presidente de Guatemala


Estimado Álvaro:

No te queda otra cosa que renunciar. O te vas, o te echan. O, tratándose de Guatemala, te matan.

Yo no sé si sos culpable o no de todo lo que te acusa en su video el abogado Rosenberg antes que lo ejecutaran. No sé si vos lo mandaste a silenciar. Pero escuchando a este hombre, quien sabe que lo van a matar, y quien decide hablar para salvar a su país de “la banda de ladrones, asesinos y narcos que lo gobierna”, te puedo decir: No puedes seguir gobernando.

Te puedes aferrar al poder. Tal vez lo logrés. Pero incluso si sobrevives esta crisis, ya no podrás gobernar, porque ya nadie te cree, nadie te confia. Se acabó.

Aunque mañana capturen a los asesinos de Rosenberg, y aunque ellos juren que vos no tenías nada que ver, nadie lo va a creer. Cuando en un país ya nadie cree en las autoridades, las autoridades tienen que apartarse para que otros reconstruyan la confianza. Sólo la verdad puede salvar a Guatemala, y vos sos un obstáculo para la investigación, para la verdad, para la curación.

Así que, presidente Álvaro Colom, ni modo, adios.

Me despido, Paolo Lüers

(Publicado en Más!)

miércoles, 13 de mayo de 2009

Basta de impunidad…

Una muerte más enluta, llena de sangre y conmueve a Guatemala: fue asesinado vil y salvajemente el distinguido y destacado profesional; hombre probo, digno e íntegro; extraordinario hijo, padre y ciudadano ejemplar, Rodrigo Rosenberg Marzano.

Todo su pecado, en este caso mortal, fue ser el abogado de otro hombre honorable, Khalil Musa Bassila, quien fue cruelmente asesinado junto a su hija Marjorie, a plena luz del día, cuando como todos los días salían a tomar su almuerzo. A raíz del asesinato de los Musa, aunque ya no era su obligación profesional, producto de su consistencia, consecuencia y coherencia moral, se hizo responsable de las investigaciones de este injustificable hecho criminal.

Estas investigaciones lo llevaron a desbaratar la primera hipótesis oficial, al extremo que el propio Presidente y su Secretario tuvieron que reconocerle al propio Rodrigo que el origen de los asesinatos surgían del nombramiento de Khalil en Banrural.

Derivado de los resultados de las investigaciones Rosenberg fue amenazado de muerte. Consciente de la gravedad de la situación, Rosenberg procedió, con valentía y arrojo, a dejar testimonio en video, audio y por escrito –todos ellos auténticos– de quienes, según él, asesinaron a Khalil y a Marjorie y que podrían ser responsables de su propia muerte en caso su asesinato tuviese lugar, tal como dos días más tarde sucedió.

En su testimonio-testamento, Rodrigo Rosenberg, entre otras aseveraciones y reflexiones expresa: Si usted leyó este mensaje es porque he sido asesinado por Gustavo Alejos, Gregorio Valdez, con la aprobación del señor Álvaro Colom y de Sandra Torres, por negarme a que se convirtiera en una estadística más el cobarde y vil asesinato de dos increíbles personas como lo eran Khalil Musa y su hija Marjorie Musa. Asimismo, agrega: Que los guatemaltecos le hemos permitido… A personajes como José Ángel López, Fernando Peña y Gerardo de León, que en forma directa amenazaran e intimidaran a Don Khalil, pocas semanas antes de su asesinato y el de su hija, para que renunciara a su nombramiento en Banrural.

Las acusaciones son de tanta seriedad y gravedad y provienen de un hombre intachable y sin mancha, como lo era Rodrigo Rosenberg, que una investigación independiente dirigida por los organismos de la comunidad internacional de inteligencia, en acompañamiento a la CICIG, es imperativa.

El Presidente debería ser excesivamente cuidadoso para evitar la retórica y sobre todo evitar las reuniones con el Fiscal General, con el Ministerio y con el fiscal que lleva el caso no sólo por razones de forma y de fondo sino porque es uno de los señalados en el caso.

Asimismo, el Procurador de los Derechos Humanos debe presentar la denuncia al Ministerio Público y a la Corte Interamericana de Derechos Humanos.

El Presidente debería ser el más interesado en el esclarecimiento de los hechos, pues de otra forma podría quedar en la triste historia de Guatemala como cómplice de asesinatos de guatemaltecos prominentes, entre otros delicados ilícitos.

En todo caso, el repudiable asesinato de Rodrigo, ha venido a significar un parteaguas para el gobierno de Colom, pues a partir de ahora, ha perdido su autoridad para hacer gobierno y en el mejor de los escenarios, su destino será flotar hasta entregar la estafeta al proximo Presidente. En cuanto a la carrera política de Doña Sandra, simplemente está liquidada.

(El Periódico, Guatemala)

martes, 12 de mayo de 2009

El momento de las definiciones

El señalamiento contra funcionarios, entre ellos el presidente Álvaro Colom, de estar involucrados en un asesinato es una situación muy seria.

Las autoridades bancarias están obligadas a investigar qué es lo que pasa en el interior de Banrural, pues se le acusa nada menos que de lavar dinero.

El nivel de degradación al que han llegado las instituciones del Estado es algo que no se puede tapar fácilmente. Las evidencias acerca de actos de corrupción se han convertido en algo cotidiano.

La acusación lanzada, post mórtem, por el abogado Rodrigo Rosenberg Marzano, en contra de altos funcionarios del Gobierno y de uno de sus financistas, así como de altos ejecutivos del Banco de Desarrollo Rural (Banrural) y de la Fe-deración de Cooperativas Agrícolas de Productores de Café de Guatemala (Fedecocagua), no es un hecho que deba tomarse a la ligera.

Los señalamientos acerca de que el presidente Álvaro Colom y su esposa Sandra Torres de Colom, el secretario privado de la Presidencia, Gustavo Alejos, y el financista y empresario de la construcción Gregorio Valdez, son los responsables de su muerte, es una acusación muy seria, por las repercusiones penales que podría tener.

Rosenberg, en un audiovideo filmado cuatro días antes de su asesinato, ocurrido el domingo, relata haber recibido amenazas por parte de Alejos y de Valdez, quienes habrían contado con la aprobación del mandatario y de la Primera Dama de la nación.

No obstante, a estos acusados se añaden los presidentes de la Junta Directiva del grupo financiero y del Consejo de Administración de Banrural, José Ángel López Camposeco y Fernando Peña, respectivamente, así como el presidente de la Fedecocagua, Gerardo De León.

El asunto toma un matiz bastante trágico, ya que el abogado relaciona su propia muerte con el asesinato de Khalil Musa y su hija Marjorie Musa, quienes fueron acribillados, igual que el denunciante, en una calle concurrida de la capital. Rosenberg sostiene que la muerte de estos dos empresarios está relacionada con un puesto asignado al señor Musa en la Junta Directiva del Banrural, institución a la que acusa de estar penetrada por el narcotráfico y los negocios turbios de los funcionarios del Gobierno.

Ha pasado poco menos de un año y medio desde que la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE) asumió la administración del país, y en ese período, casi desde su inicio, ha venido de escándalo en escándalo. La descomposición es tal dentro de las instituciones gubernamentales, que se hace necesario reflexionar acerca del futuro de la nación.

Una serie de hechos parecen haber preparado este panorama que estamos viviendo. Están las declaraciones del subjefe de bancada de la UNE, Nery Samayoa, en cuanto a que el Ejecutivo, es decir, Colom, podría disolver el Congreso de la República si no se aprueba el proyecto de “modernización financiera”, iniciativa que no logra alcanzar el consenso entre los parlamentarios y tampoco es visto con buenos ojos por una parte considerable de la ciudadanía.

Además, la declaratoria del Estado de Calamidad Pública, seriamente cuestionada por el sector productivo, pues, ade-más de afectar de manera negativa la marcha de la economía, se restringe, entre otras, las garantías consagradas en el artículo 5 constitucional, el cual permite a los ciudadanos no ser perseguidos ni molestados por sus opiniones.

Ya el mismo presidente Colom ligó el Estado de Calamidad Pública con la aprobación de la reforma fiscal, así que, en ese sentido, no existe duda alguna de las intenciones presidenciales al restringir ciertos derechos constitucionales.

La acusación en contra de los mencionados reviste relevancia por cuanto quien las hizo, en un audiovideo y por escrito, hace señalamientos concretos: “Me han dicho que me van a matar, si no me callo acerca del caso Musa”, narra Rosenberg en el video difundido ampliamente en los medios electrónicos de comunicación. Y, sin tapujos, califica al Gobierno como conformado por “ladrones y asesinos”. “Si están leyendo este mensaje es que yo, Rodrigo Rosenberg Marzano, fui asesinado por el secretario privado de la Presidencia, Gustavo Alejos, y su socio Gregorio Valdez, con la aprobación del señor Álvaro Colom y de Sandra de Colom”, expresa el ahora fallecido.

En las palabras del abogado, la Superintendencia de Bancos (SB) tiene un gran reto, ya que está diciendo que en el Banrural se está lavando dinero procedente de actividades turbias, como el narcotráfico y la corrupción en las esferas gubernamentales, mediante “la utilización de empresas de papel”.

No sólo la SB, por medio de la Intendencia de Verificación Especial (IVE), está obligada a actuar, de oficio, en la investigación de lo que sucede en el interior del Banrural. También el Ministerio Público, la Contraloría General de Cuentas de la Nación, el Organismo Judicial y todas las entidades a cargo de velar por la transparencia, como la Comisión Internacional Contra la Im-punidad en Guatemala (Cicig). tienen la responsabilidad de verificar estas denuncias.

En la medida en que ofrezcan resultados estas instituciones se podrá saber si hay algo rescatable en ellas. Haciendo eco de lo dicho por el ahora asesinado, también el vicepresidente Rafael Espada tiene un papel importante, pues ya no puede seguir jugando el papel de comparsa de tantos desmanes. Ha llegado la hora de las definiciones.

(SIGLO XXI, Guatemala)

Violencia con rostro

Mientras escribo esta columna, veo los rostros compungidos de la familia Rosenberg. Percibo su dolor y su tristeza. Y también su indignación con clamor de justicia al Cielo. Su ira por la pérdida de su ser querido, del papá, del esposo, del hermano, del primo, del socio, del amigo; llorado hoy por todos entre lirios de funeraria y lamentos de dolor. Una víctima más que se lleva el abismo de luto negro que está engullendo a este país en donde el crimen paga y la justicia es nula.

La inseguridad nos está matando lentamente, como el batracio que muere porque se acostumbra al calor de la temperatura del agua en donde se encuentra sumergido, hasta que ésta hierve, y ya es muy tarde.

El asesinato del abogado Rodrigo Rosenberg Marzano es una demostración palpable de la fragilidad del Estado y su incompetencia en proteger nuestros derechos, nuestras vidas y nuestras propiedades.

Son acusaciones muy delicadas y serias que deben ser investigadas con todo el rigor de la ley. Pero no con esa pasmosa ineficiencia que ha caracterizado la mayoría de crímenes que se vienen cometiendo a diario impunemente en nuestro país. Esta investigación deber ser hecha por una “comisión independiente” totalmente desvinculada de posibles manipulaciones e influencias. Y los más interesados en permitirla deben ser los señalados.

La difusión el día de ayer del video grabado y del testimonio firmado por el propio Lic. Rosenberg unos días después del asesinato del industrial Khalil Musa, de quien era abogado —video en el que hace una pormenorizada descripción de las causas y las motivaciones de los asesinos para cometer tal crimen— es solo la punta del iceberg de la conspiración, pues también señala con gran vehemencia: “Si usted está leyendo este mensaje, es que yo Rodrigo Rosenberg Marzano fui asesinado por el secretario privado de la Presidencia Gustavo Alejos y su socio Gregorio Valdez, con la aprobación del señor Álvaro Colom y de Sandra de Colom”.

“Yo era un guatemalteco de 47 años, con cuatro divinos hijos, con el mejor hermano que uno le puede pedir a la vida, con increíbles amigos y con muchísimas ganas de vivir en mi país, pero no hubiera podido vivir conmigo mismo sin rebelarme, armarme de valor y denunciar a todos los guatemaltecos que tienen principios y valores acerca de las verdaderas razones de la muerte de don Khalil Musa y su hija Marjorie Musa, sin importar las consecuencias y entendiendo que mi vida corría peligro, quise dejar este testimonio en caso me pasara algo, como lamentablemente sucedió”. Fin de la cita.

El pasado domingo 10 de mayo será recordado como uno de los domingos más negros de nuestra historia. Un hombre muy valiente fue abatido a tiros por cobardes mercenarios de la muerte. Lo acribillaron mientras andaba en bicicleta tranquila y pacíficamente, anunciándole al mundo que no le debía ni temía a nadie.

No puedo sino unirme a la profunda consternación y repudio que este execrable crimen nos causa a toda la sociedad guatemalteca. Las palabras no conjugan ni transmiten el verbo ni el sustantivo de nuestra desesperación. No se puede escribir un epitafio, ni articular moción alguna, sin dejar de sentir un deseo de emitir un grito profundo y gutural nacido en el asiento mismo de nuestra alma. ¡¡Basta ya!!

Acaso no es hora de que todos los guatemaltecos nos unamos para hacer valer el estado de Derecho y el imperio de la ley, y como el Lic. Rodrigo Rosenberg lo acota en el último párrafo de su testimonio, rescatemos nuestro país de los ladrones, de los asesinos, de los narcos, y todos juntos recuperemos nuestra Guatemala, nuestros valores y nuestra fe en la justicia de nuevo.

Por amor de Dios y de nuestro país.

(La Prensa Libre, Guatemala)

Grave acusación crea crisis política

La acusación hecha pública ayer por una grabación filmada por el abogado Rodrigo Rosenberg Marzano, horas antes de ser asesinado, creó la más grave crisis política de la actual democracia del país, porque nunca antes un presidente de la República electo de manera libre había sido señalado de participar de forma directa o indirecta en un asesinato, precisamente el de quien filmó la denuncia, que incluye a la esposa del mandatario y a uno de sus principales colaboradores, así como a autoridades del Banrural, institución bancaria utilizada para muchas de las transacciones del Gobierno.

La reacción gubernativa fue rápida, pero no adecuada. Ante la gravedad de las acusaciones, la posición oficial debió haber sido manifestada de manera directa por el presidente Colom, no por su vocero. Por aparte, las promesas gubernativas necesitan ser cumplidas al pie de la letra: pedir que la Cicig y países o entidades internacionales colaboren en la investigación. No hacerlo tendría efectos devastadores para este gobierno. Sin duda.

Pero el Gobierno de nuevo se equivoca al indicar que sectores interesados en desestabilizar y generar psicosis asesinan a hombres y mujeres, lo cual es cierto, pero es difícil de aplicar en este caso, y que la intención es crear una crisis política y con fines de conspiración. No tiene lógica que una persona como el abogado Rosenberg, conocido por su amplia trayectoria y calidad profesionales, pudiera urdir un plan semejante. Eso significa que a su criterio existieron razones válidas para hacer sospechar su asesinato, que lamentablemente se materializó.

El Gobierno decidió no responder preguntas periodísticas, posición que no se puede mantener. Es necesario que los acusados se refieran públicamente al asunto, seguros de que la Prensa del país sabrá actuar de manera profesional, para no divulgar rumores, sino solo versiones que tengan base o que hayan sido comprobadas. A la solicitud del Gobierno, de que la Prensa actúe de manera profesional, ésta tiene el derecho de pedirle transparencia e información tanto veraz como constante.

Ocurre también que este caso puede significar un parteaguas en el tema de las investigaciones de los crímenes, que en Guatemala quedan impunes en una abrumadora mayoría. El alevoso asesinato del señor Khalil Musa y su hija Marjorie, seguido a los pocos días por la muerte violenta de su abogado, a causa del prestigio de las víctimas, es un hecho que políticamente constituye una manera de desgaste al máximo. Sería terrible, y sobre todo descorazonador, que la ciudadanía se sintiera desamparada al darse cuenta de que el silencio oficial fuera interpretado como una tácita aceptación de las gravísimas acusaciones del video.

Debe prevalecer la serenidad del Gobierno, pero ante todo la valentía política y personal de encarar las acusaciones. Esconderse sería un suicidio político. El licenciado Rosenberg ya no puede aclarar ni agregar nada a lo expresado, pero es un hecho irrefutable que su intuición le funcionó, y por esa causa su entierro tuvo lugar ayer, en medio del justificado dolor de los suyos.


(La Prensa Libre, Guatemala)

Otro asesinato espeluznante

El pasado domingo, en horas de la mañana, Rodrigo Rosenberg Marzano, ex vicedecano de Derecho de la Universidad Rafael Landívar y ex director de la Cámara de Comercio de Guatemala, fue asesinado a pocos metros de su residencia localizada en la zona 14 de la capital. Los sicarios le acertaron 7 impactos de bala y quedó tendido en el asfalto.

Ha trascendido que Rosenberg Marzano era el abogado del industrial Khalil Musa Bassila, quien fue asesinado junto a su hija Marjorie Musa hace aproximadamente un mes, y que el móvil del crimen es que Rosenberg Marzano había profundizado en las pesquisas del doble asesinato de sus clientes y que había detectado quiénes fueron los autores intelectuales.

Asimismo se sabe que Rosenberg Marzano fue amenazado en reiteradas ocasiones, presuntamente con el propósito de que no denunciara el resultado de sus investigaciones.
El asesinato de Rosenberg Marzano coincide con la visita a nuestro país del relator especial de la ONU sobre la independencia de los magistrados y abogados, Leandro Despouy. La misión principal del relator Despouy es apoyar la transparencia del proceso de elección de magistrados de la Corte Suprema de Justicia y de la Corte de Apelaciones.

En nuestra opinión, el relator Despouy debe imponerse del crimen del abogado Rosenberg Marzano, sobre todo porque fue precedido por otro doble asesinato que él mismo investigaba.

Todo apunta a que el asesinato Rosenberg Marzano, así como los de los señores Musa, fueron perpetrados por cuerpos ilegales o aparatos clandestinos de seguridad (CIACS) que operan en el marco del denominado Estado Paralelo, que investiga la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), bajo la conducción del español Carlos Castresana.

Son las “gusaneras” incrustadas en el sector público que en su oportunidad denunció y evidenció el ex vicepresidente Eduardo Stein, y que, con absoluta impunidad, siguen segando vidas de seres humanos en este suelo ensangrentado.

Por tanto, resulta imperativo que este crimen, así como los otros cometidos contra operadores de justicia y abogados, se esclarezca y que los responsables sean debidamente castigados. La impunidad sería, además de injusta, intolerable e inadmisible.

(El Periódico, Guatemala)

Los locos andan sueltos

“La democracia revolucionaria será el inicio de la ruptura radical con el Estado actual y el orden establecido.”

“Bajo un nuevo Estado revolucionario y con la participación efectiva de las organizaciones populares conscientes y correctamente dirigidas por su vanguardia revolucionaria, la socialización de los medios de producción deja de tomar formas capitalistas, pero solo al término de una larga lucha de clases, que resulta inevitable.”

“Por su parte, las izquierdas reformistas y socialdemócratas en el subcontinente, tan en boga hoy frente a la confusión ideológica y la alineación al “nuevo orden”: la economía de mercado o neo-capitalismo, están cayendo en la trampa que les ha tendido el poder económico: trabajar en las transformaciones sociales y políticas que le resuelvan los problemas colaterales al gran capital.”

No estamos citando a Lenin, aunque parece. Ni a nadie del Siglo 19. Las tres frases provienen de Oscar A. Fernández O., quien escribe en Contrapunto, un periódico digital cercano al proyecto político de Mauricio Funes. El mismo autor escribe para Colatino. En este vespertino -que desde unos 20 años difunde las posiciones del FMLN- le dan oportunidad para escribir frases como: “Debemos garantizar que la izquierda, que se establece como una opción histórica de gobierno, asegure que la eventual reforma (o rediseño) de un sistema electoral transparente y apartidista, se inserte en el marco de una democracia de futuro superando los límites de la democracia representativa burguesa, formalista y de elites.” Para entender de qué diablos está hablando, vea arriba...

¿Deslices de un loco anclado en el pasado marxista-leninista? Sí, pero no está sólo. Y no está, para nada, meando fuera del guacal. En una extensa entrevista concedida al sitio de Web Argenpress, el diputado Sigfrido Reyes, vocero oficial del FMLN, dice:

“Hay experiencias novedosas en Nicaragua, en materia de democracia, impulsando mecanismos de participación ciudadana y de apertura en la gestión pública, que a nuestro juicio, vale la pena estudiar, porque son mecanismos que rompen con la tradicional democracia participativa y abren otros cauces a la democracia, una democracia más ciudadana, más de base, eso es, a nuestro juicio, algo muy interesante que está haciendo el Frente Sandinista y el gobierno.”

Son planteamientos que durante la pasada campaña electoral sólo se podía encontrar con esta claridad en el órgano oficial de Tendencia Revolucionaria (tendenciarevolucionaria.org), dirigida por Dagoberto Gutiérrez, quien durante la guerra era el segundo de Schafik Handal al mando del Partido Comunista y sus Fuerzas Armadas de Liberación.

Dagoberto hoy es vice-rector de la Universidad Luterana y participa en debates televisivos como analista político independiente, y pocos saben que es el líder de Tendencia Revolucionaria, organización que ejerce influencia decisiva sobre el ala más radical y violento del movimiento social. El planteamiento de Dagoberto Gutiérrez: “Debe haber una nueva constitución donde el pueblo tenga derecho a ser consultado – aquí no tenes derecho vos, a ser consultado – debe incorporarse eso: plebiscito, referéndum, que es lo que ocurre en Venezuela donde a la gente se le consulta frecuentemente, porque lo manda la constitución, aquí no existe esto.”

En el sitio de la Tendencia Revolucionaria ya se ha abierto todo en debate sobre el tipo de democracia que, según este sector de la izquierda, debería construirse en El Salvador. Citamos de un artículo titulado “Democracia Liberal Burguesa o Democracia Popular” de Pablo Santiago en este sitio:

“Venezuela, Ecuador y Bolivia son ejemplos de democracias populares, y de cómo estas se convierten en un vehículo al socialismo.”

“La democracia popular es incompatible con las constituciones liberales, la democracia popular debe crear su propia base legal. La constitución popular debe crear mecanismos de participación popular que permitan al pueblo ejercer su soberanía por encima de la gran propiedad, los monopolios y la ganancia ilimitada. Se hace necesaria una constitución popular debatida y votada por el pueblo, en un ámbito democrático. El pueblo debe decidir su destino, y este debe ser respetado por cualquier gobierno.”

“En la democracia popular, los medios de comunicación deben ser democratizados, estableciendo no solo medios estatales y privados, sino también medios sociales. Estos últimos deben garantizar la libre expresión de organizaciones sociales, políticas y culturales, sin discriminación ideológica o económica. Los medios privados deben existir, es cierto, pero regulados, sin monopolios. Esa es la esencia de la libertad de expresión y el acceso libre a la información en una democracia popular.”

Repito mi pregunta: ¿Deslices de un loco anclado en el pasado marxista-leninista? No. Para muestra de botón, veamos unos párrafos del programa de gobierno de Mauricio Funes y del FMLN:

“Potenciar el poder de decisión de la población.... Para ello se promoverán los cambios jurídicos y administrativos necesarios que faciliten la legalización y el respeto jurídico a las organizaciones ciudadanas...”

“Apertura de espacios y mecanismos de participación. La participación necesita que el Estado se transforme y establezca vínculos y procedimientos que facilitan la participación ciudadana...”

“Contribuir desde el Nuevo Gobierno democrático a inaugurar una etapa inédita en la que el pueblo pueda ... incidir responsable y decisoriamente en el rumbo y el destino del país, en su vida pública, en la definición, formulación y ejecución, monitoreo y evaluación de las políticas públicas y asegurar que los mandatarios cumplan con las misiones encomendadas por la ciudadanía...”

Definitivamente, la cosa es más seria que unos locos sueltos. Andan sueltos, pero es porque los responsables del manicomio les están abriendo las puertas.

(El Diario de Hoy, Observador)

lunes, 11 de mayo de 2009

A Table for Tyrants

IMAGINE an election where the results are largely preordained and a number of candidates are widely recognized as unqualified. Any supposedly democratic ballot conducted in this way would be considered a farce. Yet tomorrow the United Nations General Assembly will engage in just such an “election” when it votes to fill the vacancies on the 47-member Human Rights Council.

Only 20 countries are running for 18 open seats. The seats are divided among the world’s five geographic regions and three of the five regions have presented the same number of candidates as there are seats, thus ensuring there is no opportunity to choose the best proponents of human rights each region has to offer.

Governments seem to have forgotten the commitment made only three short years ago to create an organization able to protect victims and confront human rights abuses wherever they occur.

An essential precondition was better membership. The council’s precursor, the United Nations Commission on Human Rights, was folded in 2006 mainly because it had, for too long, allowed gross violators of human rights like Sudan and Zimbabwe to block action on their own abuses.

The council was supposed to be different. For the first time, countries agreed to take human rights records into account when voting for the council’s members, and those member-states that failed to, in the words of the founding resolution, “uphold the highest standards in the promotion and protection of human rights” would find themselves up for review and their seats endangered. For victims of human rights abuses and advocates for human rights worldwide, the reforms offered the hope of a credible and effective body.

Now, it seems, principle has given way to expediency. Governments have resumed trading votes for membership in various other United Nations bodies, putting political considerations ahead of human rights. The absence of competition suggests that states that care about human rights simply don’t care enough. Latin America, a region of flourishing democracies, has allowed Cuba to bid to renew its membership. Asian countries have unconditionally endorsed the five candidates running for their region’s five seats — among them, China and Saudi Arabia.

In past years, Western countries encouraged rights-respecting states from other regions to compete for election. This year, they have ceded the high ground by presenting a non-competitive slate for the council elections. New Zealand withdrew when the United States declared its candidacy, leaving just three countries — Belgium, Norway and the United States — running for three seats.

Even where competition is guaranteed, it is minimal. In the Eastern Europe region — which under the United Nations’ rules includes all countries behind the former Iron Curtain, including my own, the Czech Republic — the countries running for re-election are Azerbaijan and Russia, whose human rights records oscillate from questionable to despicable. Only Hungary has stepped forward to compete for the region’s two seats. The reluctance of Eastern European states to reclaim leadership from human rights abusers does not inspire confidence.

Like the citizens of Azerbaijan, China, Cuba, Russia and Saudi Arabia, I know what it is like to live in a country where the state controls public discourse, suppresses opposition and severely curtails freedom of expression. It is thus doubly dismaying for me to see the willingness of democracies in Latin America and Asia to sit by and watch the council further lose its credibility and respect.

Activists and journalists in Azerbaijan and Cuba have already appealed to the international community not to elect their nations to the Human Rights Council. States committed to human rights and the integrity of the council cannot remain indifferent. Countries must express solidarity with the victims of human rights abuses and reclaim the council by simply refusing to vote for human rights abusers in this shamefully uncontested election.

(The New York Times; Vaclav Havel was the president of the Czech Republic from 1993 to 2003.)

domingo, 10 de mayo de 2009

Comentarios sobre la ley de la carrera administrativa municipal en el marco del traspaso de administración en la Alcaldía Municipal de San Salvador.

La Constitución de la República de 1983 estableció el régimen administrativo para los empleados y funcionarios públicos. Pasaron 23 años desde la promulgación de la Constitución para que la Asamblea Legislativa decretara una ley reguladora del régimen administrativo para los empleados y funcionarios municipales.

La Asamblea Legislativa en uso de sus atribuciones constitucionales, aprobó la LEY DE LA CARRERA ADMINISTRATIVA MUNICIPAL, mediante decreto legislativo  número 1039 de fecha 26 de mayo de 2006, y publicado en el diario oficial No. 103, tomo 371, de fecha 06 de junio de 2006; la ley en comento tiene por  objeto desarrollar los principios constitucionales relativos a la carrera administrativa municipal y garantizar la eficiencia del régimen administrativo municipal mediante el ofrecimiento de igualdad de oportunidades para el ingreso al servicio público municipal, la capacitación permanente, la estabilidad en el cargo y la posibilidad de ascensos y traslados.

Dicha ley fue aprobada por amplia mayoría, habiendo votado por ella, incluso el actual alcalde de nuestra capital el señor Norman Quijano.

En este momento de transición de administraciones municipales la referida ley cobra relevancia, ya que con los cambios de administración siempre se pone en juego la estabilidad laboral de los trabajadores y funcionarios. Pero genera más relevancia a partir de que en este momento se esta dando el traspaso en la alcaldía más grande es este país, es decir la de San Salvador.

En dicha municipalidad los mandos gerenciales y jefaturas han manifestado su intención de continuar en sus cargos dado que la ley de la carrera administrativa municipal les otorga estabilidad laboral.

La actitud de los gerentes y jefaturas ha generado diversas reacciones de diversas personas y sectores, incluido el presidente electo, quienes descalifican  su actitud, unos por ignorancia y otros con mala intención.

Las críticas como ya se dijo se emiten por ignorancia, o  por mala intención, ya que basta con ver los considerandos de dicha ley para entender que el espíritu de la misma, el cual es promover el desarrollo socioeconómico de los municipios,  que las instituciones y organizaciones municipales del país posean una administración honesta, moderna, fuerte, eficiente y eficaz que transmita seguridad y confianza a los pobladores, que garantice la estabilidad y continuidad en la prestación de los servicios públicos municipales. Que las administraciones municipales, para el cumplimiento de sus fines y objetivos,  cuenten con servidores públicos municipales eficientes y eficaces donde los funcionarios y empleados, como agentes ejecutores de las funciones públicas municipales, accedan y desarrollen su profesión en base a los principios de igualdad de  méritos y capacidades, estableciendo los mecanismos, criterios y procedimientos que deben cumplirse para la selección, nombramiento, contratación, traslado, capacitación, promoción, evaluación, remoción o retiro del personal para los cargos de funciones públicas municipales, que actúen con imparcialidad y honestidad, guiados por una cultura de servicio a los pobladores, con lealtad al gobierno municipal y en permanente adaptación técnica y organizativa acorde a lo que requieran las realidades locales.

Así las cosas, el alcalde Quijano debe de respetar la ley que el mismo aprobó, garantizando  que los funcionarios y trabajadores que opten por continuar en la institución  lo hagan sin ningún temor a ser despedidos. Por otra parte la misma ley  prescribe las causales de despido o destitución  y su procedimiento  de las cuales el alcalde puede echar mano en caso de que los funcionarios o trabajadores  no cumplan con su cometido.

Es importante recalcar que con las reacciones generadas, lo que se está promoviendo es el irrespeto a la ley, de ahí que el alcalde Quijano tendrá que desarrollar su gestión municipal con los funcionarios y trabajadores con que actualmente cuenta la institución.