El presidente de Ecuador, Rafael Correa, y su homólogo venezolano, Hugo Chávez, han realizado una encendida defensa de las políticas intervencionistas en sectores estratégicos de sus respectivos países para que la revolución socialista que ambos promulgan y ambicionan sea también efectiva en el orden económico, además de en el social y político.
Durante una rueda de prensa conjunta en el palacio presidencial de Quito, Correa ha asegurado que sectores clave de la economía de Ecuador, entre ellos el del petróleo -donde operan compañías como la hispanoargentina Repsol-YPF- y las minas, deben de estar en manos del Gobierno. Durante sus primeros dos años de mandato, Correa ha desplegado una postura de firmeza con las compañías privadas que gestionan el petróleo y las minas, aplicando contratos más favorables al Estado, pero sin apostar abietamente por la nacionalización de ninguna firma.
Chávez, en cambio, si que ha sido más radical en su política económica. Y así lo ha vuelto a demostrar este domingo al asegurar que su política de nacionalizaciones continuará adelante pese a las críticas. Muchos sectores de la economía venezolana, incluido el energético y el de las telecomunicaciones, han pasado a manos del Estado en la década que lleva Chávez en el poder. Buena prueba de ello es que en las últimas semanas su Gobierno ha nacionalizado compañías petrolíferas y empresas de la industria del acero.
Contra los medios
Ambos presidentes también han arremetido contra determinadas empresas de comunicación, a las que acusan de seguir los dictados de la oposición y de distorsionar informaciones con la única intención de lesionar sus mandatos.
Correa incluso ha adelantado que cuando se haga cargo de la presidencia de la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur), propondrá crear un organismo regional que se encargue de vigilar a los medios de comunicación de la región. "Cierta prensa", según Correa, "ha sido el perro guardián del statu quo, de los intereses que siempre han primado en América Latina, en detrimento" de los pueblos de la región.
"Tenemos que enfrentar y derrotar a ese poder tan grande y tan impune", ha añadido antes de plantear la posibilidad de endurecer las leyes para "sancionar los abusos que se cometen en nombre de la libertad de expresión".
Chávez, como era de esperar, ha respaldado a Correa en este capítulo y le ha ofrecido todo su apoyo para combatir este fenómeno "que ya raya en la locura".
Integración regional
Ambos mandatarios, asimismo, han solicitado a sus socios suramericanos afianzar el Banco del Sur y el Sistema Unico de Compensación Regional (SUCRE) como mecanismos para robustecer la integración regional.
Chávez ha recordado que el Banco del Sur y el SUCRE son dos de los instrumentos que han probado varios países latinoamericanos para crear un espacio económico común.
El gobernante venezolano ha recordado que en el marco del SUCRE, su país y Ecuador han suscrito un mecanismo de compensación, que se inscribe en lo que denominó "la nueva arquitectura financiera regional".
Además, ha asegurado que Venezuela, con un aporte de 50 millones de dólares y Ecuador con 20 millones, crearon "un fondo binacional para el desarrollo", que busca alentar a los pequeños y medianos sectores productivos.
(El País, Madrid)