viernes, 4 de julio de 2014

Carta a Ana Vilma de Escobar

Estimada Pica:
Tu error no es, como algunos puristas han señalado, que hayas expresado que lamentás cualquier agravio que tus declaraciones sobre el caso Ferrari pueden haber causado a Mauricio Funes. Yo no lo lamento, ¡por nada! - pero yo, ¡por suerte!, no soy diputado ni funcionario. Tu error fue confiar en la palabra de Norma Guevara y de Medardo González que te dijeron: Con tal que digás algo que puede entenderse como pedir disculpa, los diputados del Frente no vamos a aprobar el dictamen de la comisión que no encontró causa contra vos…

Yo sé que es jodido hacer política parlamentaria, cuando uno no puede confiar en la palabra de la jefe de la bancada oficialista, ni del secretario general del partido de gobierno. Pero así es. Y partir de la trampa que te pusieron -hacerte pedir disculpas por algo que todo el país sabe que es cierto, y luego joderte de todas formas- por lo menos es manifiesto: el Frente no tiene palabra.

¿Qué significa esto para la gran expectativa que el presidente Salvador Sánchez Cerén ha creado con su llamado al diálogo y la búsqueda de entendimientos con la oposición? Por el momento, hay que entender este discurso constructivo del presidente como lo que es: discurso. O más bien: doble discurso, porque el lenguaje que escuchamos ayer en la Asamblea fue otro: la era Funes, con su permanente confrontación con la oposición, lejos de haber terminado tiene continuidad…

No sé si el doble discurso (y la abierta contradicción entre intenciones declaradas por Sánchez Cerén y Oscar Ortiz y los hechos políticos creados por el partido FMLN) es un juego de policía bueno y de policía malo – o si es expresión de reales contradicciones. Lo vamos a ver pronto, porque el presidente de la República va a tener que explicar qué pasó y cómo piensa avanzar hacia el diálogo. Si no hay una explicación y una propuesta concreta, y sustentada en hechos, la puerta a cualquier entendimiento o acuerdo nacional se cierra.

Respecto a tu futuro político, no me preocupa tanto. Primero, las acusaciones de Funes no van a sustentarse en las Cortes. Ni es desaforo impuesto por el bloque FMLN-Gana en la Asamblea. Así que vos va a estar de regreso. Ojala para las elecciones del 2015, porque nuevamente serás la diputada más votada del país…

De todos modos, hay vida política fuera de la Asamblea. Por ejemplo, en el partido. Estoy seguro que la dirigencia de ARENA no va a dudar en reaccionar al desafía e insulto planteado el jueves por el FMLN. Y la reacción no puede ser  de palabra, tiene que ser de hecho: incorporarte al COENA y nombrarte coordinadora del equipo a cargo de cualquier diálogo negociación con el FMLN y con el gobierno.

Este juicio político que están haciendo a vos y Roberto D’Aubuisson, en vano intento de lavarle la cara a Funes, lejos de terminar su carrera política los va a convertir en personajes claves. Ambos han sido los diputados más votados. Ambos han sido los voceros más claros y valientes de la oposición. Por esto los atacan y los quieren sacar de la jugada. Pero se darán cuenta que ambos son personajes con los cuales el presidente se van a tener que sentar y entender si quiere gobernar bien.

Saludos solidarios, Paolo Lüers
(Mas!/EDH)