No
todo es negro. También han pasado cosas buenas en El Salvador en este
año que estamos por despedir. Poco se ha escrito sobre estas noticias
buenas. Tal vez en estas vacaciones de navidad y fin de año, siempre un
poco reflexivas, es el momento para hacerlo.
Hemos
avanzado sustancialmente en términos de transparencia – y por tanto en
la lucha contra la corrupción. Este año, la Ley de Acceso a la
Información Pública ha comenzado a funcionar como instrumento de la
ciudadanía. Es un verdadero empoderamiento: de repente todos sabemos que
podemos conocer lo que antes estaba oculto (y ocultado) sobre cómo los
funcionarios han manejado los fondos – y estamos haciendo uso de este
derecho. Hoy todos sabemos más sobre la corrupción que al principio del
año.
Resultado:
Hay un movimiento ciudadano que exige la creación de una Comisión
Internacional contra la Impunidad, parecida a la CICIG que en Guatemala
ha llevado al destape de la corrupción gubernamental. En consecuencia,
unos de los partidos grandes se ha visto obligado a respaldar esta
exigencia ciudadana, y la comunidad internacional ha reaccionado
ofreciendo sus buenos oficios y sus buenos dólares para instalar una
CICIES.
Sin
embargo, una Comisión de este tipo no se puede instalar contra la
voluntad del gobierno – y el gobierno del FMLN la ha vetado. Pero la
necesidad de combatir la corrupción y la impunidad es tan imponente, que
en la sociedad se abrieron otros canales para que esta lucha pueda
avanzar. Uno de estos canales se abre en el sistema judicial, que en
forma de la Sección Probidad abrió una especie de CICIG casera,
investigando y transparentado los casos de enriquecimiento ilícito de
los funcionarios y ex-funcionarios de alto nivel.
El
otro canal de la lucha contra la corrupción que se abrió con
sorprendente fuerza es la presión popular sobre la elección del Fiscal
General de La República, que ya logró frustrar la conspiración de los
corruptos de todos los partidos a reelegir al ex-fiscal Luis Martínez.
Resultado de esta presión ciudadana por la elección de un fiscal
independiente y comprometido con la lucha contra la corrupción, en ambos
partidos grandes se han abiertos debates públicos que rompen el control
de las cúpulas. Esto es otra noticia buena que se ha dado este año.
Tal
vez el FMLN logre vetar, por unos años más, la instalación de una
CICIES, pero ya no tiene capacidad de parar el combate a la corrupción.
La Corte Suprema de Justicia, la Sección Probidad, la nueva Sala de lo
Contencioso, y obviamente la Sala de lo Constitucional no permitirán que
el gobierno vuelva a cerrar la caja de Pandora abierta por esta nueva
sed de transparencia que se ha despertado en la ciudadanía. En su
momento lo señalamos algunos: Promoviendo el juicio político contra Paco
Flores, Funes está abriendo una caja de Pandora de la cual van a salir
todos los pecados propios y de sus amigos….
Y cabal: Hoy el FMLN y GANA quieren volver a controlar y callar la Sección de Probidad de la Corte Suprema – y ya no podrán.
Hoy el FMLN y GANA quieren evitar que llegue un fiscal independiente – y ya no podrán.
Hoy
el FMLN y GANA quieren bloquear una CICIES que investigue la corrupción
– y lo podrán lograr, solo por ahora. La Fiscalía y la Corte Suprema
van a asumir las funciones de la CICIES. La caja de Pandora, una vez
abierta, ya no se cierra.