Tal vez se recuerdan de mi, de los años que tuve casa en el barrio Concepción y pasé todos los fines de semana en Suchi. Tal vez algunos de ellos han leído lo que he escrito en los periódicos sobre la tregua, aguantando insultos y amenazas por explicarla y defenderla...
Desde hace ratos mis amigos de Suchi me
están hablando de cómo de yuca se ha vuelto la situación en el pueblo – y que
esto tiene que ver con ustedes y el pleito que se tienen entre las dos
pandillas y entre La Colonia y La Cruz. Me duele el alma ver cómo un lugar tan
lindo como Suchitoto, con gente noble que apenas logra sobrevivir, se sienta
acosado de la violencia y frustrado en su intento de salir adelante mediante el
turismo. No puede ser que a 20 meses de haber iniciado la tregua y con ella
supuestamente un proceso de paz, ustedes no sepan ponerse de acuerdo por el
bien de sus propios comunidades y de toda la población de Suchi.
He hablado con sus líderes en los penales
tanto de Ciudad Barrios como de Cojute, y también con los que andan coordinando
afuera. Todos, de ambas pandillas, me han dicho que los problemas en Suchi se
pueden resolver y que ellos están trabajando para esto. Si quieren se comunican
con ellos y les preguntan si yo soy alguien que tiene el derecho de exigirles a
ustedes que reflexionen y cambien de actitud. Les van a decir que me he ganado
este derecho.
Y hago uso de esta cancha que me he
ganado y les digo: Dejen en paz a Suchi. Hagan la paz entre ustedes y con la
gente de este pueblo.
Déjense de pajas y regalen paz navideña a
su gente en Suchi. Y luego nos sentamos a hablar a calzón quitado y hasta que
tengamos soluciones para los problemas de fondo: las extorsiones, que la gente
necesita que terminen - y las oportunidades, que ustedes necesitan que se les
abran. Los mediadores del proceso y este servidor estamos listos para entrar en
esto.
Hagamos algo por nuestro pueblo.
Paolo Lüers
Paolo Lüers
(Más!/EDH)