jueves, 26 de febrero de 2009

Otra vez, la guerra de encuestas


Otra vez, semana de encuestas. Esta vez, por suerte nuestra, las últimas. Ayer publicó El Diario de Hoy la encuesta de Borges, diagnosticando no sólo un empate entre ARENA y el FMLN, sino además identificando una tendencia a favor de Rodrigo Ávila. Haciendo dos encuestas completas en un lapso de dos semanas, Borges detecta que la candidatura de Ávila va en ascenso a partir del retiro de los otros candidatos.

Al mismo tiempo circulan los resultados de una encuesta encargada por el FMLN y realizada por una firma guatemalteca, que continúan dando al FMLN una ventaja de 20 puntos porcentuales. Para ellos, nada ha pasado el 18 de enero. Para ellos, los resultados del 18 de enero ni siquiera los hicieron dudar de la validez de las encuestas que siempre les daban este tipo de ventaja.

Entre hoy y mañana también saldrán a la luz los resultados de las últimas encuestas de las universidades. Las más serias con pronósticos mucho más conservadores, para no repetir los errores que cometieron antes de las elecciones de enero proyectando una victoria arrolladora del FMLN, incluso en la capital. Parece que las universidades siguen diagnosticando una leve ventaja del FMLN para las presidenciales.

Nuevamente nos preguntamos: ¿A quién creer? Seguramente no a las encuestas internas de los partidos. Es más racional creer a las distintas encuestas que, con diferentes matices, muestran una carrera demasiado cerrada para poder proyectar ganador. Sobre todo cuando este cuadro coincide con el frío análisis de las circunstancias actuales, como el retiro de las candidaturas de PDC y PCN, las alianzas de los dos partidos mayoritarios con las dirigencias nacionales y locales de los partidos minoritarias, etc. Esta análisis también tiene que tomar en cuenta otros factores nuevos: la recomposición exitosa de la unidad dentro de ARENA, a partir de las elecciones del 18 de enero, con el resultado visible de una mayor motivación y puesta en acción del aparato partidario territorial; y una tendencia opuesta en el campo del FMLN, donde la maquinaria partidaria de la capital no ha superado el estado de choque, frustración y casi parálisis en que ha quedado con la derrota de la alcaldesa Violeta Menjívar en enero; y donde otros contingentes territoriales del FMLN se concentran en la consolidación del poder local en vez de mantenerse en campaña permanente en función de una candidatura presidencial que no tiene mucho que ver con su identidad partidaria y revolucionaria.

Los números de Borges en El Diario de Hoy reflejan esta situación: crecimiento de ARENA y su alianza para defender el sistema; y estancamiento del FMLN, debido a que la campaña presidencial muy personalizada de Funes ya no recoge las aspiraciones e intereses del aparato partidario. Para mucha gente en el FMLN, en enero ya se ganó lo que se pudo ganar, y no están tan seguros si la batalla por Casa Presidencial realmente es suya...

(El Diario de Hoy, Observador Electoral)