Este primero de Junio se cumplió el cuarto aniversario de Elías Antonio Saca como Presidente de la República de El Salvador y como tal, ofreció su ultimo informe a la nación.
Los salvadoreños durante dos décadas de gobiernos nacionalistas, hemos esperado pacientemente por el cumplimiento de las promesas fundamentales que con convicción fueron realizadas por cuatro presidentes de la república en diecinueve años. Promesas de trabajo digno, seguridad ciudadana, bienestar común, que aun no han sido cumplidas.
Su informe fue egocentrista, lustrado en buenas noticias, formidable de retos, infinito en esperanza, loable en compromisos, pero realizado por un estadista que no puede ver mas allá de su propia nariz, quien ignoró el esfuerzo que ha realizado el pueblo salvadoreño en dos décadas. Con este hecho que demuestra que no le importa el alcance de sus actos, el presidente Saca, desvirtuó además totalmente la contribución de los salvadoreños al progreso de la patria, al omitir en su discurso el impacto que el trabajo de la diáspora y los hermanos en las fronteras patrias, ha tenido durante dos décadas para respaldar los resultados positivos en la economía, la sociedad y el desarrollo del país del que hace alarde el partido ARENA.
El Presidente Saca no reconoce que durante este tiempo, la Diáspora ha colaborado para el progreso de la patria, a través de un compromiso patriótico con nuestro país y nuestras familias, en el que asumimos responsabilidades ciudadanas con la visión y propósito de aunar esfuerzos que faculten a nuestro país del financiamiento necesario por medio de las remesas para poder reducir la pobreza extrema, mejorar el nivel educativo, extender el sistema de salud, reconstruir la infraestructura nacional debido a la guerra o desastres naturales y procurar el bienestar común en nuestros lugares de origen.
Al cumplirse su cuarto aniversario como mandatario de la República, también se cumple el decimonoveno aniversario de la Alianza Republicana Nacionalista (ARENA) administrando el poder ejecutivo y legislativo del país, por lo que hace este discurso a la nación extraordinariamente relevante debido a la dirección que la ciudadanía debe seguir en preparación para las próximas elecciones generales en Marzo de 2009.
Su discurso detalla avances concretos en determinadas áreas, promesas importantes cumplidas e ingeniosas iniciativas creadas para financiar objetivos importantes de su plan de gobierno, lo cual es coherente a la continuidad del plan integral que la plataforma política y socio-económica de ARENA ha ejecutado por dos décadas y que continúa encaminada hacia los fines que determinaron la fundación del partido político: Proteger los intereses de los que tienen más.
La interpretación realista de este informe es que, aún mientras los avances del país han sido positivos, las políticas publicas adoptadas no han permitido satisfacer la demanda mínima de empleo formal, la seguridad ciudadana y la repartición ecuánime de la riqueza. Es muy difícil aceptar que en dos décadas de gobierno de ARENA, el bienestar de la mayoría del pueblo ha sido la motivación de su servicio publico como institución política.
Mañana una cantidad importante de ciudadanos continuará emigrando mientras los que no puedan hacerlo continuarán subsistiendo las durezas que el actual esquema económico implementado por ARENA ofrece al pueblo salvadoreño; a ello se sumarán las consecuencias del incremento en los combustibles y la actual crisis alimenticia mundial, lo que se traduce a menor poder adquisitivo y mayor necesidad de empleo para mantener sus condiciones de vida.
El fortalecimiento de los cuerpos de seguridad en dos décadas, no fue el apropiado y suficiente para que se liberaran de delincuentes los centros comerciales, las calles de los mercados, los pasajes de las colonias, pueblos y cantones del país, de manera que, las familias pudieran ser libres de discernir en actividades sanas con sus vecinos; además, tampoco fue una prioridad el invertir en la apertura de programas vocacionales que instruyeran a los jóvenes que purgaron condenas en las cárceles para preparar su reinserción a la vida productiva de la nación al ser liberados.
Las cifras positivas del incremento a la industria del turismo que Saca atribuye a la labor de su gobierno, se deben al incremento de las visitas de los salvadoreños en el exterior que han sido beneficiados por diferentes leyes migratorias en sus países de residencia, las cuales les han permitido regresar a la patria para consumir los productos y servicios que esa industria ofrece.
El Salvador es aún un país con problemas profundos, a través de los años, ARENA no cambió la burocracia corruptible heredada, sino que la puso al servicio de los círculos de poder histórico y casi monopólicos que controlan el comercio, la industria y vendieron la banca, acaparando fuentes de riqueza que detienen la distribución ecuánime de las oportunidades de bienestar económico hacia la mayoría de ciudadanos.
Este es el legado que obtenemos, debido a que una mayoría de la población destinó democráticamente nuestro futuro a ARENA por dos décadas.
A través de la historia, el pueblo cuscatleco ha sido sometido a la muerte por masacres desde el conquistador Pedro de Alvarado, el directorio cívico del General. Maximiliano Hernández Martínez y los subsecuentes dictadores militares del PCN, y finalmente la guerra civil; ahora el pueblo es masacrado, extorsionado y oprimido por la delincuencia común, el crimen organizado y políticos traidores e inmorales.
Las dificultades económicas de muchos ciudadanos se mantienen y para otros se han agudizado. Diecinueve años de políticas publicas de ARENA son responsables por estas condiciones. El legado histórico de ARENA hasta este momento se traduce a muertes y hambre generada por victimas de la violencia, delincuencia, miseria, corrupción, trafico de drogas, educación mediocre y exilio, lo que opaca considerablemente logros como el fin de la guerra y la implementación de la apertura democrática bajo un sistema de libre mercado.
Las encuestas públicas demuestran que el gobierno del Presidente Saca no ha sido eficiente y que el candidato presidencial de su partido no cuenta con el apoyo de la mayoría de quienes le otorgaron el privilegio de servirles y le emplearon para dirigirles.
El Salvador necesita cambio en su dirección política, sin embargo, un cambio positivo para el país no esta a la vista, el partido opositor controlado por comunistas que idolatran a regímenes dictatoriales como el venezolano y fomentan el terrorismo internacional de las FARC, no ofrece garantías creíbles de democracia y eso no augura nada bueno para los ciudadanos en las fronteras patrias. ¿Es esta una razón suficientemente valedera para permitir que ARENA gobierne cinco años mas? Las encuestas a diez meses de las elecciones demuestran que no y la responsabilidad histórica es exclusiva de Elías Antonio Saca.