lunes, 4 de mayo de 2020

Carta a los diputados: Sin presiones. De Paolo Luers


Publicado en MAS y DIARIO DE HOY, martes 5 de mayo 2020


Estimados amigos:
A veces el calendario y el horario político ponen en aprietos a los comentaristas. Escribo esta carta habiendo visto la conferencia de prensa que Javier Simán, como presidente de ANEP, dio junto a miembros del gabinete de gobierno. Pero no se qué va a decidir la Asamblea Legislativa que, al solo terminar la conferencia de ANEP, fue convocada para este día lunes en la tarde. Solo sabemos cuales son los dos proyectos de decreto legislativo, que presento Casa Presidencial: la autorización de otros mil millones de dólares, supuestamente para la reactivación económica; y una “ley de regulación para el aislamiento, cuarentena, observación y vigilancia por Covid 19”. Esta última no es otra cosa que el decreto ejecutivo respectivo convertido en ley de la República.

La otra incógnita es: ¿qué va a decir en su conferencia de prensa el presidente Bukele? Originalmente estaba programada para la noche del lunes, pero el presidente la postergó por un día “para que los diputados puedan deliberar con tiempo y sin presiones”. Me imagino que “sin presiones” significa sin amenazar la Asamblea con una nueva invasión militar...

Aunque hayan sido convocados a una plenaria para la tarde de lunes, yo asumo que es para iniciar el debate sobre los dos proyectos - y no para aprobarlos en un madrugón, sin las debidas discusiones y consultas. Si el mismo presidente dice que trabajen sin presión, tómenle la palabra. También Javier Simán les dijo en su conferencia que analizaran detenidamente los proyectos de CAPRES. No les pidió que los aprobaran así como están.

Entonces, hablemos de la conferencia de ANEP. Javier Simán hizo algo que muchos que lo observan con escepticismo no han entendido: Asumió como un hecho que la cuarentena domiciliar general y obligatoria terminará el 15 de mayo, y que el 16 comenzará la gradual reapertura de las actividades productivas, comerciales y sociales del país. No lo puso como una posibilidad, tampoco como una petición, sino como un hecho que habrá que preparar desde ya. Las caras de los miembros del gabinete de Bukele no mostraban precisamente felicidad al escuchar esas palabras tan determinantes, pero tampoco las contradijeron.

Habrá que esperar qué dirá el presidente sobre esto en su conferencia de prensa. Puede contradecirle a Simán; puede confirmar que este es el acuerdo; o puede hacerse el maje y hablar de otra cosa. Pero de todas formas hay de repente en la arena nacional un jugador nuevo, quien desafía al presidente a tomar posiciones. 

Tampoco los ministros pusieron caras felices cuando Simán dijo que cualquier medida que se tome tiene que estar acorde con la sentencias de la Sala de lo Constitucional y los Derechos Humanos.

Las oportunidades que se abren con la intervención del nuevo liderazgo empresarial se echarían al traste si Ustedes precipitadamente aprueban las leyes que solicita Casa Presidencial. Acuérdense, sin presiones...

Saludes,