Publicado en MAS! y EL DIARIO DE HOY, 10 septiembre 2019
El presidente Bukele repitió varias veces que la Comisión Internacional contra la Impunidad iba a comenzar a investigar la corrupción antes de terminar los primeros 100 días de su gobierno. Incluso ahora, que ya venció este plazo (el domingo 8), sigue diciendo que cumplió su compromiso y que la CICIES ya está creada.
Es una mentira. Lo que el viernes 6 de septiembre firmaron la OEA y el gobierno Bukele en Casa Presidencial no fue el convenio de creación de la CICIES. Firmaron nada más una “Carta de Intención.“
Luego de un montón de considerandos, esta Carta dice:
Han convenido en suscribir la siguiente Carta de Intención:
1.1. Las partes manifiestan su intención de establecer una CICIES y se comprometen a firmar un Convenio con este propósito dentro de los tres meses siguientes a la firma de esta Carta de Intención, el cual entrará en vigencia una vez se cumplan los procedimientos legales internos correspondientes.
1.1. Las partes manifiestan su intención de establecer una CICIES y se comprometen a firmar un Convenio con este propósito dentro de los tres meses siguientes a la firma de esta Carta de Intención, el cual entrará en vigencia una vez se cumplan los procedimientos legales internos correspondientes.
1.1.1. No obstante su establecimiento definitivo conforme al artículo anterior, con la suscripción de esta Carta de Intención, las partes instalarán la CICIES a efectos de avanzar la cooperación con las instituciones nacionales competentes…
Cito textualmente este párrafo, porque es una joya de lenguaje de engaño. Me parece increíble que el Secretario General de la OEA haya autorizado este párrafo, que tiene un solo propósito: salvarle la cara a Nayib Bukele y permitirle decir que cumplió su compromiso de los 100 días de “instalar“ la CICIES (según artículo 1.1.1.), aunque no esté “establecida” (vea artículo 1.1.). Así que nos instalaron un volado inexistente…
La CICIES no existirá hasta que exista un Convenio (en 3 meses), y hasta que este cobre vigencia “una vez se cumplan los procedimientos legales internos correspondientes”; o sea, hasta que lo haya ratificado la Asamblea Legislativa, previa negociación con los partidos representados en ella y con la Fiscalía.
Aquí no mencionan el punto clave: existe un requisito para que la CICIES pueda iniciar su misión de investigar la corrupción, la luz verde de la Fiscalía General de la República, que tiene el privilegio constitucional de la investigación y acción penal.
Y no es un simple aval que necesita una CICIES de la Fiscalía. Necesita que la Fiscalía le delegue transitoriamente parte de sus facultades. Pero como la Constitución dice que son facultades indelegables, la Fiscalía sólo puede autorizar a una CICIES que las ejerza conjuntamente con la ella. Quiere decir que la CICIES va a trabajar de la mano con los fiscales, o no va a poder trabajar, a menos que se quede a nivel de un organismo de propaganda como la difunta Secretaría de Transparencia de Funes y Sánchez Cerén.
Aquí la lista de las cosas esenciales que la CICIES, así como la concibe el gobierno Bukele (sin convenio con la Fiscalía General) NO podrá hacer, porque la Constitución no se lo permite:
-citar testigos
-ordenar arrestos
-allanar oficinas y casas
-decomisar documentación o bienes
-solicitar información bancaria
-solicitar datos financieros a organismos extranjeros
-dirigir investigaciones policiales
-acusar ante tribunales
Todas estas son facultades y deberes exclusivos e indelegables de la Fiscalía. Una CICIES que no nace de un convenio con la Fiscalía no tendría esta facultades, lo que significa que no podrá dedicarse a investigación penal. Solo dispondría de los elementos, documentos, pruebas que el Gobierno les proporcione. Sería una Comisión Presidencial nada más.
Otra vez nos hicieron fraude de etiqueta, esta vez con la complicidad Secretario General de la OEA, Luis Almagro. Firmaron una carta de intención y nos la vendieron como el lanzamiento de una CICIES. Pero esta, así como la conciben, nunca funcionaría como arma contra la corrupción.
Saludos,