"Tal vez el dinero del BID les alcance para comprar equipos de alta tecnología. Pero el alma de un hospital no es la tecnología sino el personal calificado, animado y comprometido. ¿De dónde lo piensan sacar, cuando el gobierno sistemáticamente maltrata a los médicos, las enfermeras y los trabajadores de salud?"
En la voz del autor: Hospitales.mp3
Publicado en MAS! y DIARIO DE HOY, martes 18 febrero 2025
Estimados amigos:
Cuando Nayib Bukele asumió la presidencia, hace 6 años, todo estaba listo para construir el nuevo Hospital Rosales. El préstamo del BID estaba aprobado. Los diseños estaban hechos, resultado de la labor de expertos internacionales con el Ministerio de Salud.
Hoy, el inquilino de Casa Presidencial dijo que la construcción del hospital Rosales, en frente del viejo que ya están botando, tiene un avance del 90%. Lo publicó en Twitter/X, acompañado de un video que lo mostraba inspeccionando el sitio de construcción. Se ve que todavía están en obra gris y que falta muchísimo más que un 10% para terminar la construcción, ni hablar de la fase de equipamiento del hospital. No sabemos quién se inventó la paja del 90%. Puede haber sido el consorcio constructor. Puede haber sido el ministro de Salud. O puede haber sido Bukele. Tal vez tres bullshiter juntos llegaron a este mentira...
Así como van, Bukele podrá inaugurar el Rosales, cuando ya esté en campaña electoral para su siguiente reelección. Si es que tiene un opositor que corra contra él, este candidato podría destrozarlo diciendo: “El presidente nos vende como logro la inauguración de un hospital, que según el convenio original con el BID tendría que haberse inaugurado en el 2024, antes de su reelección inconstitucional.”
Para esta misma fecha tendría que haber sido inaugurado también el otro hospital incluido en el paquete del BID, el de Nejapa. Así como va esta construcción, Bukele necesitaría un tercer mandato presidencial para inaugurarlo. A la fecha están completando apenas los sótanos.
Posiblemente en el Ministerio de Salud dicen: Tranquilos, no hay prisa, no se ajoloten con los nuevos hospitales, de todos modos no tenemos los médicos especialistas ni las enfermeras calificadas para operarlos. Es mismo Bukele advirtió en 16 de febrero en Twitter/X: “Lo más difícil no es construir el edificio, sino garantizar la mejor atención, el equipo más avanzado, los mejores médicos, insumos de calidad, protocolos eficientes, controles rigurosos y una mística de trabajo excepcional. Todo lo necesario para convertirlo en el mejor hospital de Centroamérica.”
En el sexto año del gobierno Bukele, el sistema de Salud está en su más profunda crisis. Cientos de médicos especialistas han salido del sistema, cansados de trabajar en condiciones tan adversas: sin medicamentos, sin insumos, bajo directores incompetentes y represivos. Están cansados que se toman decisiones equivocadas sin consultar nunca al gremio de médicos. El gobierno invirtió grandes sumas en anuncios en los periódicos de varios países para atraer a cirujanos, oncólogos y otros especialistas. En los hospitales no han visto que algún médico hay llegado.
Tal vez el dinero del BID les alcance para comprar equipos de alta tecnología. Pero el alma de un hospital no es la tecnología sino el personal calificado, animado y comprometido. ¿De dónde lo piensan sacar, cuando el gobierno sistemáticamente maltrata a los médicos, las enfermeras y los trabajadores de salud?
Ya tienen un hospital fantasma en la Feria, equipado con la última tecnología, pero sin alma, sin saber dar respuestas a las dramáticas deficiencias de Salud de la población. Enfrente tienen el anexo, la gran galera, el elefante blanco, que durante la pandemia cumplió su función para la campaña de vacunación, pero ahora alberga oscuras oficinas gubernamentales medio clandestinas, donde despachan los mercenarios venezolanos y operan los trol center.
Por más propaganda que el gobierno haga sobre sus mega-inversiones en hospitales, no va a convencer a nadie, mientras a la gente le toca esperar un año para su cita con un especialista; mientras no hay medicina para los tratamientos de cáncer y mientras tratan con las patas a quienes ejercen las nobles profesiones de enfermera y médico.
Esto no va cambiar mientras ustedes no reclamen sus derechos en voz alta.
Saludos,