Bueno, yo estoy lejos de llamar a no votar (o a anular el voto), como hace un año lo hizo un señor que hoy nos ruega por nuestro voto. Pero hay que aclararlo: La Constitución no dice que sea obligatorio el voto. El voto es un derecho ciudadano – y esto incluye la libertad de no ejercerlo.
Yo sí voy a votar, y espero que igual lo hagan todos quienes seguimos convencidos que nuestro sistema de democracia representativa y liberal es válido, que merece que lo defendamos, y que para mejorar y consolidarse necesita de nuestra participación.
Obviamente dicen esto para que votemos por ellos. Pero antes de hacerlo, cada uno tiene que echarles un buen vistazo a quienes denuncian al resto del mundo como corruptos. Y a lo mejor se darán cuenta que son los más corruptos de todos.

Otra vez: Si no encuentran a nadie en quien confiar, ni modo. No voten. Por lo menos se ahorrarán la pena de luego descubrir que les tomaron del pelo con el viejo truco del ladrón que gritó: ”¡Paren al ladrón!”, y que con esto logra despistarnos y salirse con la suya.
Si el bombardeo de propaganda negativa los ha sumido en una duda tan generalizada que ya no les permite confiar en nadie, tampoco confían de quienes predican esta desconfianza. Mejor no voten por nadie. En cambio, si logran detectar las diferencias entre los candidatos, rompiendo con esta consigna estúpida de que todos son “los mismos de siempre”, voten por el que más honesto y capaz les parezca.
La cosa es: No tenemos derecho de equivocarnos nuevamente.
Saludos,

(MAS! y EL DIARIO DE HOY)