viernes, 13 de agosto de 2021

Carta sobre historia: El muro de Berlín. De Paolo Luers

 13 de agosto 1963: La construcción del muro que dividirá Berlin



Publicado en MAS! y EL DIARIO DE HOY, sábado 14 agosto 2021

Estimados amigos:

El día que escribo estas líneas, el 13 de agosto, es el aniversario 58 de la construcción del muro que dividió en dos partes la ciudad de Berlín. Se convirtió en el símbolo de la división entre el bloque oriental y el occidental, entre comunismo y capitalismo, entre dictadura y libertad.

Pero para los ciudadanos de Berlín no era ningún símbolo. Era un absurdo muro que corría por toda la ciudad, cerrándoles el paso a la casa de sus padres o amigos de toda la vida. Dividía físicamente familias, barrios y a los habitantes de una misma calle. Un lado era parte del imperio soviético, el otro del bloque encabezado por Estados Unidos, y entre ambos reinaba la guerra fría.

Yo estaba recién llegado a Berlín, con mis 19 años y sed de libertad. No podía creer lo que veía. Miles de trabajadores de Berlín Oriental, vigilados por soldados fuertemente armados, levantaban el muro con elementos prefabricados. El gobierno de Alemania Oriental, o más bien el Politburó del Partido Comunista, o más bien el Kremlin en Moscú habían decidido ya no dejar que sus propios ciudadanos abandonaran el supuesto ‘paraíso de los obreros y campesinos’. Demasiados obreros, técnicos, médicos, ingenieros y estudiantes se habían escapado a Berlín Occidental, donde había abundancia de productos, diversiones y libertades. BILD, el periódico más popular de Alemania Occidental, llevaba diariamente en su portada la cuenta: 1800 refugiados, 2050, 3015…

La gente decía: como en Alemania Oriental no hay elecciones, la gente expresa su voluntad “con las patas”, huyendo, buscando la vida en la parte capitalista del país.

Los primeros días, mientras se estaba levantando el muro, había diariamente decenas de miles de ciudadanos fugándose, aprovechando que el muro con todo el sistema de vigilancia aún no estaba completo. La gente se lanzaba al río para pasar a la otro orilla. Soldados botaron sus fusiles y corrieron al otro lado de la calle. Gente venía caminando por los túneles del metro.

Toda la ciudad -en ambas partes- estaba en shock, nunca se había visto ni imaginado semejante cosa. Una tristeza colectiva se apoderó de la ciudad. Para mí fue la primera vez que en serio tuve que pensar sobre la libertad, no en teoría, como concepto, sino como algo que se necesita para respirar y vivir. Pasé horas recorriendo Berlin para ver cómo crecía el muro, esa herida abierta y dolorosa en la ciudad.

El muro, con los años, se perfeccionó en un sistema sofisticado de vigilancia, con una franja que la gente llamaba ‘zona de muerte’, sin vegetación, sin casas, y en la cual los soldados, apostados en torres de vigilancia, tenían órdenes de disparar al que se movía.

Es sistema completo de "seguridad" del Muro




El muro no sólo atravesaba la ciudad de Berlín, sino también rodeaba completamente la mitad occidental, convirtiéndola en una isla en un territorio hostil.
Luego, atravesó todo el país, del mar Báltico hasta las montañas del Sur.

Para salir de Berlín, tuvimos que sujetarnos a estrictos controles fronterizos, tanto en los trenes como en las autopistas. Berlín Oriental sólo se podía visitar con un permiso especial que a veces lo daban y otras veces lo negaban. Estaban estrictamente reguladas las cantidades de dinero y mercancías que se podía llevar en estas visitas. El país se terminó dividiendo en una parte rica y otra con escasez de todo.

La ciudad y el país, con los años, comenzaron a separarse culturalmente: el muro en las cabezas de la gente. De manera que cuando en 1990 Berlín y Alemania fueron reunificados, el muro físico desapareció, pero no el mental. Nos costó décadas para realmente reunificarnos como nación.

Estoy haciendo memoria de todo esto, porque es necesario que todo el mundo sepa lo peligroso que es la división política extrema e impuesta por dictaduras. Los muros que nos dividen toman formas muy diferentes…

Saludos, 



miércoles, 11 de agosto de 2021

Carta a los diputados bayuncos y vulgares. De Paolo Luers

Diputado Walter Alemán / presidente de la Asamblea Ernesto Castro                       

 

Publicado en MAS! y EL DIARIO DE HOY, jueves 12 agosto 2021

Me parece propaganda barata cómo muchos en las redes sociales han tratado de explotar las imágenes de diputados de Nuevas Ideas pegándose una gran hartada de carne y haciendo fiestas bailables en Los Ángeles. Algunos gustosamente publicaron los precios del restaurante de carnes, igual que otros publicaron los precios del restaurante en Ibiza, donde según reportes de la prensa de esta isla española vieron a cenar a Nayib Bukele durante las vacaciones de agosto.

¿Y qué? ¿Qué tiene de extraordinario que un hijo de familia millonaria en sus vacaciones viaje a Ibiza, aunque sea por dos días? ¿O que gaste una fortuna en un exclusivo restaurante en España? ¿Acaso esto comprueba corrupción? Docenas de miembros de otras familias pudientes de El Salvador habrán gastado igual en sus viajes a Florida o California y sus visitas a clubes exclusivos. ¿Y qué? Tal vez se podría criticar al mandatario porque otra vez más salió del país en viaje privado, sin pedir permiso a la Asamblea, como lo demanda la Constitución. Pero esto también ya es disco rayado…

Que unos bichos virgos llegados por arte de magia a ser diputados devengando salarios que les permite viajar en las fiestas agostinas a California paguen $40 dólares por una cena, ¿qué indicio de corrupción puede ser?

Viendo los videos del restaurante, llegamos a otra impresión: Son bayuncos. Y viendo los vídeos de los mismos padres de la patria bailando el perreo más vulgar en a saber que antro de Los Ángeles, confirma lo mismo: Son bayuncos. Tienen mal gusto. Son vulgares…

Pero esto tampoco nos agarra de sorpresa. Ya los hemos observado en la Asamblea Legislativa, en las comisiones de la santa inquisición que ha armado el líder de la manada legislativa, Ernesto Castro. De él también salió una foto de sus vacaciones, en una playa con su esposa, la ministra de Vivienda, en pose igualmente bayunca que sus alumnos en Los Ángeles: exhibiendo que puede costearse unos puros cubanos marca Cohiba. ¿Y qué? No sabíamos ya que le dicen “El Burro Castro” por algo. Muchos recordarán cómo se comportó cuando manejaba para el niño Bukele la discoteca Code.

Si quieren comprobar corrupción, no se detengan con babosadas y bayuncadas de la nueva clase política. La verdadera corrupción está a la vista, en los libros del MOP, de los ministerios de Agricultura, Salud y Vivienda, o tal vez lo que no está visible en los libros, pero que ya está bastante investigado. Entre otros lo investigó la CICIES antes de que Bukele la mandó a cerrar y también la Fiscalía General de la República, antes de que Bukele pusiera ahí a un chero incondicional. Incondicional porque tiene sus propios pecados en el sótano, y sabe que sus panas Gustavo Villatoro y Pedro Dumas los tienen bien documentados.

Sigan en fiesta, diputados. Tienen derecho de exhibirse como lo que son: unos bayuncos vulgares y, encima de esto, ostentativos y exhibicionistas.

Saludos, 





lunes, 9 de agosto de 2021

Carta a Carolina Recinos: Bella Italia. De Paolo Luers




Publicado en MAS! y EL DIARIO DE HOY, martes 10 agosto 2021

Hola, Carolina:

Yo también amo Italia, especialmente Roma. así que, el traslado de tu esposo Arnoldo Bernal, de embajador en Moscú a embajador en Roma, debe ser excelente noticia para vos. ¿Quién quisiera pasar su exilio dorado en el frío de Moscú si lo puede hacer en la ciudad eterna, con excelente vino, deliciosas cenas y moda elegante?

 

A Moscú fueron en la época de la guerra fría los comunistas exiliados o desterrados, sólo a pasar hambre y sufrir depresión o, en muchos lamentables casos, terminar en Siberia. No me extraña que pediste al presidente, ya que te iba a sacrificar para ganar algunos puntos con los gringos, que lo haga en Italia. En este gobierno, de todos modos con una orden del presidente se nombran o quitan embajadores, independiente de su capacidad o incapacidad.

 

Mientras tanto, tus antiguas compañeras Violeta Menjívar y Erlinda Handal, están en manos del sádico ángel de la venganza Osiris Luna, y tu viejo comandante en jefe Leonel tiene que conformarse con un exilio en Nicaragua, con opciones de vacaciones en Venezuela o Cuba. 

 

Definitivamente, vos al hacerte del lado ganador y ayudarle a Bukele a destruir el Frente, tenés derecho a mejor suerte y a un exilio con más estilo. Sin embargo, no sé cómo los italianos, como parte de la Unión Europea, van a manejar lo de la lista Engel de funcionarios corruptos, en la cual figuras. En Bruselas están discutiendo aplicar las mismas sanciones que ya decretaron en Washington. ¿Harán una excepción para la señora esposa del excelentísimo embajador salvadoreño en Roma?

 


Tal vez, con suerte, porque los italianos son muy corteses. Pero tal vez no te invitarán a los espléndidos eventos sociales, culturales o diplomáticos. Tal vez le harán la vida muy incómoda a tu esposo, el embajador.

 

Tal vez mejor regresen a Moscú, donde a todo el mundo le vale un comino si alguien es corrupto o no. O a Minsk en Bielorrusia, donde el dictador Alexandr Lukashenko siempre está feliz si puede recibir a alguien que se volvió una carga para uno de sus homólogos. En Moscú o en Minsk te recibirán con gusto en la alta sociedad de mañosos.

 

Y no te preocupés: Tu trabajo de regañar a los ministros, darles línea y corregirles la plana lo hacen felizmente los mercenarios venezolanos. Mejor que vos, con más discreción y menos espectáculo.

Disfrutá el tiempo que te quede en Roma. Saludos, 





domingo, 8 de agosto de 2021

La destrucción de la política. De Paolo Luers

Encarcelar a la hija de Schafik, Erlinda Handal (izqu.) es un golpe contra un símbolo de lo que quieren destruir

 

Publicado en EL DIARIO DE HOY, lunes 9 agosto 2021

Muchos piensan que a los Bukele y sus réplicas los mueve la sed de venganza cuando arremeten contra todos los funcionarios de todos los gobiernos anteriores; cuando los acusan de corrupción y comienzan a echarlos presos. Falso. No es venganza lo que les mueve, porque nunca han sido víctimas, nunca han sufrido, siempre han estado cerca de la corrupción que ahora denuncian.

Tampoco son redentores justicieros, porque adolecen del fundamento ético, religioso o ideológico necesario. Ni siquiera odian a quienes declaran enemigos. Diseminan odio y lo provocan en sus seguidores, pero no movidos por sentimientos sino por un una necesidad política y propagandística. El odio es un instrumento del autoritarismo. Dudo que Hitler odiara de verdad a los judíos, su estrategia totalitaria necesitaba un enemigo. Los judíos sólo fueron los enemigos más fáciles de vender al “pueblo.”

 

La arremetida de Bukele y sus secuaces en la fiscalía, en las “salas de guerra” de sus propagandistas y en las comisiones inquisidoras contra todos los funcionarios y dirigencias políticas, gremiales, académicas de lo que ellos llaman “el bipartidismo” o “el sistema”, en el fondo no va contra las personas. Tampoco va contra “la clase política”. Va directamente contra la política como el espacio para superar diferencias y construir acuerdos mediante el debate franco, el diálogo, la negociación y la concertación. Para ellos, negociación es pacto oscuro, la política es sucia. Aceptar que en la sociedad hay intereses enfrentados y legítimos y usar la política para administrarlos y armonizarlos, para los populistas es conspiración y corrupción. Lo que vemos en el ataque sistemático y bien orquestado de la anti política contra la política. Si todos los políticos son sucios, la política como tal es sucia.

Aquí se cierre el círculo vicioso en la mente autoritaria: Todos los que han participado en este ejercicio político de debate-diálogo-negociación-concertación --desde los protagonistas de los Acuerdos de Paz (para Bukele son el “pecado original”) hasta los legisladores y líderes de opinión-- para el autoritarismo son corruptos. A todos ellos hay que golpearlos, deslegitimarlos y, si es necesario, eliminarlos del tablero político del país, callándolos o incluso encarcelándolos. Sólo veamos hacia Nicaragua y veremos el futuro nuestro, si no paramos esta ola autoritaria.

 

Gobernar sin negociar significa gobernar sin incluir a todos en el proceso – y libera al gobernante de la necesidad de dialogar. Es suficiente el monólogo mil veces repetido. Gobernar sin concertar, sino transmitiendo órdenes, de manera vertical y sin discusión, de arriba hasta todas las ramificaciones del Estado, erradicando la independencia judicial o municipal, sólo es posible si antes se ha vencido el concepto clásico de la política en una sociedad plural y democrática. La política se sustituye por la administración del poder, el diálogo político se sustituye por una relación directa del gobernante y líder con “el pueblo”, la cual nada tiene que ver con “participación popular” – por más que usen este término cuando hablen de la nueva Constitución con mecanismos plebiscitarios de consultas populares. No son mecanismos de participación, y mucho menos de concertación, son instrumentos propagandísticos.

 

Una vez descartada la política, todo se reduce a un líder que gobierna e impone su voluntad.

 

En esta transición estamos actualmente. En el guion del autoritarismo estamos en la fase de la destrucción de la política, usando como instrumento las acusaciones generalizadas de corrupción contra toda la clase política (menos la parte que a tiempo comenzó a brindar pleitesía al nuevo poder). ¿Cómo lo llama hace poco Nayib Bukele? La fase de destruir el “aparato ideológico” del sistema que quieren destruir. Esto significa atacar aun más a los medios y periodistas independientes, debilitar a los tanques de pensamiento, fundaciones y organizaciones cívicas, y tomar control de las universidades. ¿Alguien piensa que luego de destruir la independencia judicial y municipal, ambas ancladas en la Constitución, van a respetar la independencia universitaria o de los medios de comunicación?

 

Esta batalla contra el mero concepto de la política, la independencia y el pluralismo no la han ganado. Hicieron la declaración de guerra y lanzaron los primeros ataques, pero en este campo, sí hay oposición y sí se está forjando resistencia y unidad. 

 

Todos sabemos que hubo corrupción en las diferentes etapas del desarrollo política del país. La hubo con los militares gobernando y la hubo con Duarte. La hubo durante la reconstrucción de país con gobiernos de ARENA, y se volviósistemática con los gobiernos de Saca y Funes. Y la hay ahora, a pesar del discurso anti-corrupción de Bukele. 

 

Como sociedad hemos creado instrumentos de transparencia, que han permitido descubrir los mecanismos de la corrupción. Detectamos los abusos de la partida secreta y conseguimos que se abolieraDetectamos que Saca la reviviócomo gastos reservados e inventó el mecanismo de permanentes transferencias de cientos de millones de dólares de los ministerios a Casa Presidencial para nutrir estos fondos discrecionales. Se denunció, se investigó y se cerró esta zona gris de corrupción. Detectamos hacer años que la práctica de pagar “sobresueldos” era arbitraria y llena de abusos. Falta resolver este problema con una solución justa y transparente que da a los presidentes la libertad de reclutar a funcionarios bien pagados. Y falta investigar y cerrar los nuevos mecanismos de corrupción del actual gobierno: los “sobresueldos.2” y los fondos de emergencia manejadas sin controles ni transparencia.

 

Pero ojo: Siempre cuando escuchen a Bukele y a sus encargados de la fiscalía y de la legislación hablar de estos temas, no se trata de transparencia ni de cerrar las válvulas de la corrupción. Se trata de una guerra de exterminio contra la clase política y el sistema democrático que representa.