viernes, 7 de junio de 2024

Una canción para El Salvador: No se den por vencidos. De Peter Gabriel y Paolo Luers



Te dicen callate.

Pero el silencio mata.

¿Te vas a ir del país?

Aún hay tanto por hacer.


El audio: NO SE RINDAN.mp3


Publicado en MAS! y EL DIARIO DE HOY, sábado 8 junio 2024 

Cuando pienso sobre El Salvador, comienza a sonar en mi cabeza la canción “Don’t give up” de Peter Gabriel. Aquí les mando mi traducción muy libre al salvadoreño. Es para todos, que no quieren rendirse: las madres buscadoras de desaparecidos, las madres que hacen cola enfrente de las cárceles y bartolinas, los presos políticos y sus familiares, los acusados sin pruebas, los que perdieron sus carretones de sorbete – para todos los golpeados en esta guerra contra los pobres. 






NO TE RINDAS

De Peter Gabriel

En esta tierra orgullosa
Crecimos fuertes.
Había amor siempre.
Me enseñaron a luchar.
Me enseñaron a ganar.
Nunca pensé que podría fallar.

Dicen que ya no quedan luchas.

Pero es mentira.
Los sueños no se me fueron.
Podría cambiar mi rostro y mi nombre
.
Podría esconderme.
Pero nadie quiere a los perdedores.

No te des por vencido.
Porque tenés amigos.
No te rindas.
No te han derrotado.
No te des por vencido,
Sé que podés levantarte.


Lo vi por todas partes.
Jamás pensé que me p
udiera pasar.
Pensé que seríamos
Los últimos en irnos.
Es tan rara la manera
En que las cosas cambian.

Por la noche fui buscando
El lugar donde nací,
A la orilla del lago.
Cuando se hizo de día, vi la tierra.
Los árboles se habían quemado
Completamente.


No te des por vencido,
Aún t
enés a nosotros.
No te rindas,
No necesitamos mucho de nada.
No te des por vencido,
En alguna parte hay un lugar
Al cual pertenecemos.

Dejá de romperte la cabeza.
Te preocup
ás demasiado.
Todo va a estar bien.
Cuando los tiempos se ponen 
yucas
P
odés recurrir a nosotros.
No te rindas,
Por favor
, no te rindas.

Debo 
salirme,
No soport
o más.
Me pararé en aquel puente,
viendo para abajo,
Venga lo que venga
Y pase lo que pase
,
El río fluye
,
El río fluye.


Te dicen callate.

Pero el silencio mata.

¿Te vas a ir del país?

Aún hay tanto por hacer.


No te des por vencido,
Porque t
enés amigos.
No te rindas,
No 
sos el único.
No te des por vencido,
No hay razón para avergonzarse.
No te rindas,
Aún nos t
enés a nosotros.
No te rindas ahora,
Estamos orgullosos de lo que eres.
No te des por vencido,

No dejes que te jodan.

No dejes de joder jamás.
Sab
és que nunca ha sido fácil.
No te des por vencido,
Porque hay un lugar,
Hay un lugar 
donde
 pertenecemos.

 

 

Cuando me preguntan cuál es la característica más esencial del salvadoreño, siempre contesto: No dejarse joder – y nunca dejar de joder. Estoy seguro que Peter Gabriel está de acuerdo.

 

Saludos Paolo Luers



Don’t give up, de Peter Gabriel, en You Tube


Don’t give up, letras originales, de Peter Gabriel

 







ANUNCIO:

Doble Cara se encuentra temporalmente agotado en El Salvador, pero pronto será nuevamente en las librerías de la  UCA
Siempre lo pueden pedir Amazon.com, desde Méjico en amazon.com.mx




miércoles, 5 de junio de 2024

Primera carta al dictador de El Salvador: Sus dos pecados fundacionales. De Paolo Luers

 

"No hay manera para describir mejor la esencia de una dictadura: La obediencia incondicional y ciega a la voluntad del gobernante. Gracias por dejarlo tan claro." 

El audio: Obediencia.mp3

Publicado en MAS! y EL DIARIO DE HOY, jueves 6 junio 2024 

Para empezar, dejemos clara una cosa: Ya no le vamos a llamar presidente. A partir del 1 de junio, usted es otra cosa. Su título adecuado sería “señor dictador de El Salvador”, y pueden llamarlo también tirano, usurpador, déspota. Usted mismo se puso strongman, que es lo mismo. No se ofenda, usted escogió libremente lo quería ser.


Del show de su entronización todo está dicho y señalado: el despilfarro, la mutilación del Palacio Nacional, su ridículo atuendo, el desfile militar, y la alfombra roja de ultraderechistas del mundo, prestándole pleitesía... Todo esto ilustra la nueva realidad de dictadura que estamos viviendo, pero nada de esto es realmente importante.


Hay dos pecados suyos que sí hay que resaltar: la fórmula de obediencia ciega que hizo jurar a la multitud en la plaza. Y la captura de 9 dirigentes de los veteranos de guerra que usted ordenó para elevar su propia estatura como dictador. Tirano que se aprecia necesita tener enemigos que amenazan su poder y su vida. Si no existen, los inventa.


La única parte de su mediocre discurso que quedará en la memoria es el juramento; “Juramos defender incondicionalmente nuestro proyecto de Nación, siguiendo al pie de la letra cada uno de los pasos, sin quejarnos. Y juramos nunca escuchar a los enemigos del pueblo.”


Esto equivale a la prohibición de cualquier forma de oposición y crítica. Equivale a anular varios derechos garantizados por la Constitución: el derecho a la libre expresión, el derecho a la petición, el derecho al amparo. El artículo 37 de la Constitución dice: “Toda persona tiene derecho de pedir y obtener el amparo de la Suprema Corte de Justicia o Cámara de Segunda Instancia, cuando cualquiera autoridad o individuo restrinja la libertad personal o el ejercicio de cualquiera de los otros derechos individuales que garantiza la presente Constitución.” Todavía es válida esta Constitución, lo que ya no existe es una Corte Suprema que la aplique.


No hay manera para describir mejor la esencia de una dictadura: La obediencia incondicional y ciega a la voluntad del gobernante. Gracias por dejarlo tan claro. 


La captura de los dirigentes de los veteranos de la guerra civil no es solamente un caso más de la interminable lista de violaciones a los derechos humanos, procedimientos arbitrarios y persecuciones políticas. Conlleva otra dimensión: destruir la dignidad de los veteranos, antes considerados protagonistas de una gesta patriótica, que abrió el camino a la transición de la dictadura a la democracia. Presentar a un hombre septuagenario como Atilio Montalvo, el comandante Salvador Guerra de la guerra civil, como un vil terrorista que planifica atentados contra gasolineras y supermercados, es una forma de reescribir la historia a la medida de la nueva dictadura. Presentar a los 9 veteranos de la guerrilla además como principiantes inútiles que ni siquiera saben cómo fabricar bombas, es una forma de burlarse de ellos y privarlos de su dignidad.


Estos dos pecados, cometidos en el marco de su entronización, definen el carácter de su persona y del régimen que estápor implementar. Todo lo demás que pasó el 1 de junio son caprichos de un hombre excéntrico, egómano y perturbado que ya estábamos acostumbrados a observar. A quién importa que usted se vista como Napoleón Bonaparte, Simón Bolívar o Gerardo Barrios?


No hay personas más solas que los dictadores. No pueden confiar en nadie, ven enemigos por todas partes, hasta entre sus mejores cheros y cómplices.

Sin más que agregar,






ANUNCIO:

Doble Cara se encuentra temporalmente agotado en El Salvador, pero pronto será nuevamente en las librerías de la  UCA
Siempre lo pueden pedir Amazon.com, desde Méjico en amazon.com.mx


lunes, 3 de junio de 2024

Carta a mi pasado yo: Te debo la rebeldía. De Paolo Luers

 

"Como dijo Karl Marx: “La historia se repite dos veces: la primera vez como tragedia, la segunda vez como farsa.” En nuestra vida, el primer desastre fue la dictadura nazi, la repetición trágica el imperio soviético - y ahora apreciamos la farsa en figuras tragicómicas como Chayo Murillo, Javier Milei y Nayib Bukele, los dictadores farsantes."

El audio: EL PASADO YO.mp3

Publicado en MAS! y EL DIARIO DE HOY, martes 4 junio 2024 

Hola, Arnd:

Todo comenzó hace 57 años, un 2 de junio 1967. Fuiste a una manifestación en frente de la Ópera Alemana en Berlin. El presidente de la República Federal Alemana había invitado al Sha de Persia, Mohamed Reza Palavi, quien estaba de visita de Estado, a ver la ópera Zauberflöte, La Flauta Mágica, de Wolfgang Amadeus Mozart. El día anterior, cuando el alcalde recibió al Sha, un grupo de estudiantes había protestado frente a la alcaldía. Tú no fuiste, no te gustaban las manifestaciones, estabas metido en tus estudios de literatura y en tu sueño de convertirte en escritor. Pero todo cambió cuando viste en el noticiero las imágenes de los manifestantes pacíficos, que fueron atacados brutalmente por docenas de agentes iraníes, la guardia personal del Sha. Vestidos de civil y armados de bates de basebol, vapulearon a los estudiantes, bajo los ojos de la inactiva policía berlinesa. Docenas terminaron en hospitales.


Igual que miles de estudiantes y de manera espontánea, fuiste al día siguiente a la Opera para retar al Sha y no dejarlo entrar a la Ópera. Nadie estaba preparado para el tamaño y la rabia de la multitud, mucho menos la policía. Eran miles y miles que bloquearon el acceso a la Ópera. Los policías trataron a dispersar a la multitud y abrir un camino para el Sha, los manifestantes resistieron. En medio del desmadre, observaste a pocos metros a un policía que sacó su arma y apuntó a uno de los estudiantes. Era Benno Ohnesorg, a quien conocías del departamento de Germanística de la Universidad Libre de Berlin. Un tipo tranquilo que asistido  a su primera -y última- manifestación de su corta vida. El policía lo mató con un tiro certero, frente a tus ojos.

 

Este día 2 de junio de 1967 cambió todo. 


Comenzó la rebelión masiva de los estudiantes, la misma de la Sorbonne, de Berkeley, de las universidades italiana, en la UNAM de México y hasta en Praga. Surgió una nueva izquierda, que se desmarcó de la Socialdemocracia y de los Comunistas: se definió como antiautoritaria. Surgió la llamada ‘Generación ‘68’, que movilizó a todas las universidades: contra la intervención de Estados Unidos en Vietnam y la soviética en Checoslovaquia; contra las dictaduras de derecha e izquierda; por una radical reforma educativa. 


Cambió también tu vida, que tomó un rumbo radicalmente diferente: te alejó de tu carrera académica y literaria, te llevó a abandonar la universidad y comenzar a trabajar en una fábrica para organizar a los trabajadores - y en última instancia te llevó a El Salvador a unirte a la guerrilla. Te convertiste en Paolo.


Hoy que estoy medio retirado, aunque sigo escribiendo mis columnas-cartas, pienso mucho en vos. En el muchacho que quería ser escritor, pero llegó a la conclusión que primera había que vivir. Viví intensamente y ahora, ya viejo, comienzo a escribir libros. Publiqué uno, Doble Cara, sobre mis 40 años en El Salvador, como reportero, como guerrillero, como mediador entre pandillas y como columnista polémico. Termi otro libro, Lulú, una novela sobre crimen organizado y política corrupta en Centroamérica - y sobre amistad. Ya pronto saldrá publicada. Y te cuento, Arnd, que ahora comencé a escribir sobre vos, el niño de la guerra, que creció en el caos de la postguerra y quien con 10 años tomó la decisión que será escritor.


Escribiendo sobre este tiempo, estoy tomando cierta distancia a lo que pasa ahora en mi nuevo país. Bukele es sólo uno de los reflejos de la historia de dictaduras. Como dijo Karl Marx: “La historia se repite dos veces: la primera vez como tragedia, la segunda vez como farsa.” En nuestra vida, el primer desastre fue la dictadura nazi, la repetición trágica el imperio soviético - y ahora apreciamos la farsa en figuras tragicómicas como Chayo Murillo, Javier Milei y Nayib Bukele, los dictadores farsantes.


Vamos a pasar juntos largos meses de trabajo, mi muchacho. Te debo todo. 








ANUNCIO:

Doble Cara se encuentra temporalmente agotado en El Salvador, pero pronto será nuevamente en las librerías de la  UCA
Siempre lo pueden pedir Amazon.com, desde Méjico en amazon.com.mx