miércoles, 28 de diciembre de 2022

Carta: Los requisitos para ser dictador - o la prueba del pato. De Paolo Luers

Esta es la prueba del pato: “Si grazna como un pato, camina como un pato y caga como un pato, entonces, es un pato.”

El audio: El Pato.mp3

Publicado en MAS! y EL DIARIO DE HOY, jueves 29 diciembre 2022

Estimados amigos:

¿Es Nayib Bukele un dictador, o soló un presidente con fuerte liderazgo?

¿Es El Salvador una dictadura o sólo un país en el cual al fin reina el orden?

 

Son preguntas, sobre las cuales los salvadoreños están profundamente divididos. Hagámoslo simple. Para ser dictador, un gobernante tiene que llenar ciertas características y ciertos requisitos. Veamos.

o     Para establecer una dictadura, tiene que centralizar el poder en sus manos.

o      Para lograr esto, tiene que eliminar la independencia de los otros órganos del Estado y tomar control de ellos.

o   El Parlamento se convierte en oficina para firmar y sellar proyectos del gobernante.

o   El órgano judicial pierde su independencia.

o   La Fiscalía se convierte en integrante del gabinete de Seguridad, supeditado al mando presidencial.

o      Tiene que lograr que el ejército y la policía actúen en lealtad a él, no al orden constitucional.

o      Tiene que eliminar la regla constitucional que no le permite la reelección. Un dictador necesita perpetuarse en el poder para protegerse.

o      Tiene que eliminar los mecanismos constitucionales de transparencia, rendición de cuentas y control interinstitucional.

o      Delega parte del poder estatal a miembros de su familia, socios y amigos personales, quienes pueden interferir en el quehacer de cualquier ministerio y negociar pactos con sectores sociales y gremiales.

o      La corrupción es un elemento indispensable de una dictadura: es el aceite que permite funcionar las relaciones entre el gobernante, su círculo interno, sus lacayos y los pactos con grupos sociales y empresariales. 

o      Para mantener una dictadura, se necesita a su servicio un aparato de propaganda estatal que puede sistemáticamente borrar las fronteras entre realidad y ficción, verdad y mentira.

o      Un dictador necesita que todo su aparato de gobierno, partido y propaganda le rinda pleitesía todos los días. Sin culto a la personalidad no hay dictadura que funcione.

o      Todas las obras, programas sociales, subvenciones del Estado al beneficio de la población tienen que ser presentadas explícitamente como obras del presidente, aunque estén pagados por todo el pueblo. 

o     Un dictador necesita crearse enemigos, tanto internos como externos, contra los cuales puede permanentemente movilizar y unificar a sus seguidores.

o     Una dictadura establece una relación directa entre el gobernante y ‘el pueblo’, desplazando las instancias de intermediación de un sistema republicano: el parlamento, los gobiernos municipales, gremios, sindicatos.

o     Un régimen dictatorial no puede convivir con una prensa independiente y libre que monitoree y critique al gobierno y al presidente. Por eso una dictadura toma tres medidas paralelas: 

o   Restringir y perseguir el ejercicio crítico de los periodistas.

o   Forzar a los medios comerciales a difundir las versiones oficiales. Y abstenerse de críticas

o   Crear sus propios medios (periódico, canal de TV, radios y un universo de plataformas digitales), coordinados por el Centro de Propaganda situado en Palacio.

o     Los dictadores siempre prometen, y a veces realizan, megaproyectos, proyectándolos como su legado. Son vistosos, pero no necesariamente corresponden a las reales necesidades de la gente.

o      Como no está sujeto a controles institucionales, el dictador tiende a improvisar, a convertir sus berrinches en crisis del país y sus obsesiones en políticas del Estado. Usa de manera arbitraria los fondos públicos y asume arbitrariamente, incluso desde su casa, compromisos financieros del Estado sin ningún mecanismo de control.  

o     Una dictadura, para construir su legitimidad, tiene que desestimar todas las políticas, obras y planteamientos de los gobiernos anteriores, incluso la transición democrática que al fin le permitió el acceso al poder en elecciones libres – y erigirse como ‘Nueva República’.

o     Mientras no la necesita, una dictadura no recurre a la represión de manera masiva. La usa de manera focalizada, ejemplarizante – más como amenaza latente que como fuerza aplastante. 

o      Pero cada dictador prepara sistemáticamente todos los elementos necesarios para una represión masiva - para el momento que una crisis económica con altas tensiones sociales merme su apoyo popular y ponga en peligro su gobierno. En ese momento, habrá capturas de opositores, sindicalistas, periodistas, empresarios, intelectuales y líderes sociales independientes, como en Nicaragua.


Si de estas 25 características el presidente Bukele cumple unos 20, tengan cuidado, porque estamos al borde de una dictadura. Si cumple todas, incluyendo la última, les recomiendo que corran – a las calles o al exilio. 

Esta es la prueba del pato: “Si grazna como un pato, camina como un pato y caga como un pato, entonces, es un pato.”

Saludos y un feliz año nuevo, 


lunes, 26 de diciembre de 2022

Carta a la memoria histórica: Hay que entender lo malo que pasó en el 2022 para prevenir lo peor que preparan para el 2023. De Paolo Luers

 "Cuando les deseo un feliz año 2023, me refiero a lo hermoso que sería que el Año Nuevo fuera el despertar de una nueva oposición. Acuérdense: la Constitución exige la insurrección si el presidente intenta su reelección. Una insurrección pacífica sería, al fin, un capítulo digno de nuestra memoria."

El audio: EL 2002.mp3



Publicado en MAS! y EL DIARIO DE HOY, martes 27 diciembre 2022

Mis colegas en todos los medios harán el usual resumen del año. Yo voy a tratar de resumir la esencia de lo que pasó. Porque el año, que ahora estamos despidiendo, tiene reservado un lugar clave en nuestra memoria.

El 2022 fue el año en que permitimos que un enfermo del poder pudiera anunciar en cadena nacional que va a cometer el delito más grave que señala nuestra Carta Magna: el delito contra la alternancia democrática, que es la base de nuestra República. Dijo que en el 2024 buscará la reelección, y no hubo una tormenta de rechazo y protesta. Tratando de explicarlo, en una cena prenavideña, a unos amigos de Costa Rica y México, me di cuenta que es inexplicable y que me da vergüenza. No el presidente, él me da rabia. Me dan vergüenza los que no defienden la República.

El 2022 también fue el año en que el régimen tomó el control social. El año pasado, el 2021, se dedicó a usurpar el poder sobre las instituciones, que por mandato constitucional tienen que ser independientes y ejercer control sobre el Ejecutivo. Hoy le están subordinadas. El poder es total y centralizado en manos de un solo hombre.

Pero este año 2022, armado con los instrumentos que le da el control sobre las Fuerzas Armadas, la PNC, las Fiscalía y las Cortes, el presidente fue a la conquista del control social. Lo vende como guerra contra las pandillas, pero esta guerra, a esta altura, ya es un pretexto para otros propósitos: Los permanentes estados de excepción con su suspensión de los derechos civiles; las reformas restrictivas a las leyes penales, que paralelamente aprobaron y comenzaron a aplicar; la militarización normalizada; el despliegue permanente de las fuerzas militares y policiales en todas los territorios de los sectores más pobres y marginados del país; las detenciones de 70 mil personas de estos territorios… Todo esto está siendo presentado como plan de seguridad. Pero en el fondo es un plan de control social.

Nayib Bukele puede estar muy convencido de su atractivo como líder, pero no es tan loco como para no saber que con el tiempo -y sobre todo con la crisis fiscal, económica y social que va a resultar de sus políticas improvisadas- el apoyo popular, hoy mayoritario, va a revertirse. Habrá desencanto con el hombre que prometió tanto. Habrá tensiones sociales y habrá protestas. Sabiendo esto, cualquier dictador se arma a tiempo de mecanismos de control institucional y de control social sobre la población.

Lo que hemos observado, y lamentablemente permitido, en el 2022 es un proceso radical de tomar el control social por la presencia militar, por las detenciones arbitrarias, por la ilusión de seguridad, pero al mismo tiempo con la siembra de miedo.

Cuando la gente en las comunidades se dé cuenta que el control y asedio por las pandillas ha sido sustituido por el control y el cerco permanente de los militares, el responsable de todo esto planea haber logrado perpetuarse en el poder para quedarse encima de cualquier rendición de cuentas o cualquier investigación del carácter corrupto de su ejercicio del poder.

La memoria histórica tiene que registrar todo esto, para uso de las futuras generaciones, pero igualmente para las presentes. Porque todavía, si tomamos conciencia de lo que está en juego, existe la posibilidad de que el 2023 no sea solamente el año que Bukele proceda a concluir la construcción de la dictadura, sino el año en que comencemos a despertarnos, movernos y oponernos.

Cuando les deseo a todos un feliz año 2023, me refiero a lo hermoso que sería que el Año Nuevo fuera el despertar de una nueva oposición. Acuérdense: la Constitución exige la insurrección si el presidente intenta su reelección. Una insurrección pacífica sería, al fin, un capítulo digno de nuestra memoria.


Saludos, 






viernes, 23 de diciembre de 2022

Carta a Santa: Sólo te pedimos coraje para luchar. De Paolo Luers

 "Estamos cansados de cuatro gobiernos consecutivos que confunden la administración pública con campañas publicitarias."

El audio: Santa.mp3

Publicado en MAS! y EL DIARIO DE HOY, sábado 24 diciembre 2022

Querido Santa:

 

No te voy a robar mucho tiempo, ni muchos regalos. Te pido una sola cosa para nuestro paisito: ¡un gobierno que gobierne!

 

No nos regalés nada: ni empleos, ni carreteras sin baches, ni hospitales que tengan medicamentos, ni barrios seguros, ni escuelas saludables. Todo esto lo podemos crear nosotros mismos, con tal que nos des la fuerza de luchar por ungobierno sin apellido, que simplemente haga su trabajo. El ejecutivo que ejecute. El legislativo que haga leyes. El poder judicial que haga justicia. Sin tanta paja. Y, de paso sea dicho, la oposición que haga oposición. ¿Muy simple esta visión? Sí. Prefiero que las cosas sean simples y claras.

 

Estamos cansados de los gobiernos que se ponen apellidos, etiquetas y consignas. Primero el ‘gobierno con sentido humano’ – pero actuando sin sentido común, regando dinero del Estado para comprar votos y voluntades. Luego, el ‘gobierno del cambio’, que día y noche habló de ‘unidad nacional’ e ‘inclusión’, pero de hecho dividió la sociedad en su permanente búsqueda de culpables para los males del país que no supieron enfrentar. Siguió el ‘gobierno del buen vivir’, pero solamente para los funcionarios. Y ahora el gobierno de las Nuevas Ideas, que son peores que los peores de las viejas: cero transparencia, estados de excepción permanentes, aparato estatal de propaganda, confrontaciones permanentes con la prensa y con los Estados Unidos - y la genial idea de apostar al Bitcoin... 

 

Estamos cansados de cuatro gobiernos consecutivos que confunden la administración pública con campañas publicitarias; que en vez de arreglar los baches hacen una campaña diciendo que están arreglando las calles. Que en vez de abastecer al sistema de salud con medicamentos, hablan de reformas de salud. Que en vez de cambiar las pésimas condiciones que encuentran los inversionistas en el país, sermonean de ‘el cambio’... 

 

Así que, querido Santa, si querés hacer algo por nuestro paisito, no nos des nada regalado. Sólo te pedimos que nos des coraje. 

 

¡Feliz navidad!

 

Posdata: Esta carta la publiqué hace 12 años, el 23 de diciembre 2010. La repito hoy, porque lo que pedí entonces es lo mismo que nos urge ahora. Sólo hice unos pocos cambios de actualización, que están marcados un negrita.



miércoles, 21 de diciembre de 2022

Carta a los sindicalistas que celebran el aumento de las pensiones. De Paolo Luers

 "Ustedes van a estar felices por el corto tiempo que los aumentos funcionen, y van a sufrir cuando el sistema colapse. Pero cuando esto pase, ustedes ya habrán felizmente votado por la reelección de Nayib Bukele y por una Asamblea a sus órdenes. De eso se trata la tal reforma."

El audio: pensiones.mp3

Publicado en MAS! y EL DIARIO DE HOY, jueves 22 diciembre 2022

 

Estimados amigos:


El gobierno va a aumentar las pensiones. No mucho, pero algo. Algo es algo, hoy que todo es caro. ¿Quién puede estar en contra de mejores pensiones? Nadie. Tanto para los que ya están jubilados como para los que en el futuro se van a retirar, es una buena noticia.

 

Lastimosamente, en El Salvador las buenas noticias suelen llegar con malas, que a veces no son tan visibles a primera vista. Tener más seguridad y menos homicidios es buena noticia, obviamente - pero al rato nos damos cuenta que ahora -y parece que para largo- hay que tener miedo a los militares que toman control de las colonias. 

 

Así en el caso de las pensiones. Parecen un regalo de navidad. Pero a veces gastamos demasiado y hasta nos endeudamos para dar a la familia felices navidades, y la goma viene, cuando hay que pagar las tarjetas. Con los ‘regalos’ del  gobierno es diferente: la goma no tendrán los gobernantes, sino todos nosotros. 

 

Hablando de las pensiones, la mala noticia es que esta reforma de pensiones se ha hecho sin tener la más mínima idea de cómo pagar los aumentos, que año tras año, mes tras mes habrá que pagar. Nadie lo explica, porque nadie lo sabe. Resulta que a este presidente y su gabinete, cuyo método de gobernar es la permanente improvisación, le vale un comino. Con tal que tengan garantizado que pueden cumplir las promesas del aumento de las pensiones hasta que terminen las elecciones del 2024, no se preocupan. Para poder financiar los aumentos -y la cuenta para las otras medidas clientelistas por venir durante el 2023- se han asegurado, en la recién aprobada reforma, que el gobierno puede disponer de la totalidad de los fondos de pensiones acumulados. Las AFP estarán obligadas de ‘prestarlos’ al gobierno. 

 

Luego, el diluvio y que Dios nos ayude...

 

Una reforma de pensiones hay que hacerla de manera responsable, pensando en el futuro y en la sostenibilidad de lo que se promete. Improvisarla, sólo pensando en el beneficio electoral, es lo más irresponsable que un gobernante puede hacer. El sistema de pensiones, de todos modos, estaba insostenible. Con esta reforma, que no es una reforma que afecta las raíces del problema, será peor. Ustedes van a estar felices por el corto tiempo que los aumentos funcionen, y van a sufrir cuando el sistema colapse. Pero cuando esto pase, ustedes ya habrán felizmente votado por la reelección de Nayib Bukele y por una Asamblea a sus órdenes. De eso se trata la tal reforma.

 

Si se quiere mejores pensiones y que sean sólidas y sostenibles, primero hay que instalar un gobierno que se compromete a sanar las finanzas del Estado, impulsar las mediadas necesarias para un mayor crecimiento y en base de esto a zelaborar una reforma de pensiones de verdad que garantiza la ampliación de la cobertura y graduales aumentos. 

 

Todo lo demás es propaganda. 

 

Gocen de los aumentos hasta que alcance el pisto, pero no dejen de exigir una verdadera reforma de pensiones.

 

Felices vacaciones les desea




 


lunes, 19 de diciembre de 2022

Carta a los fanáticos del fútbol: Cuidado con las pasiones que les brotan. De Paolo Luers

 "Sólo digo: Cuidado con esas pasiones, que son contrarias a la idea de que el deporte une a los pueblos y crea hermandad."

El audio: Carta-Futbol-y-racismo.mp3

Publicado en MAS! y EL DIARIO DE HOY, martes 20 de diciembre 2022

Estimados amigos:

Yo los entiendo: El fútbol puede ser apasionante. A mí el mundial de Qatar no me inspiró mucho, pero en otras ocasiones he gritado, brincado y bailado los goles, igual que ustedes.

La cosa se vuelve crítica cuando la pasión futbolera despierta -y revela-  pasiones nacionalistas e incluso racistas. No es inusual, sólo vean los desmadres en muchos estadios que arman los ‘hooligans’, las hinchas violentas europeas. Muchas veces sus pasiones se dirigen no tanto contra los jugadores del equipo opuesto, sino más bien a los jugadores de otro color de piel que ellos. A veces incluso cuando juegan en su propio equipo... Pregunten al ex seleccionado alemán Jerome Boateng o al belga Romelu Lukaku, delantero del Inter de Milán, entre muchos otros futbolistas...

Pocos minutos antes de que iniciara la final de Qatar entre Argentina y Francia, me salió en Facebook un comentario: “Ganamos o gana África. Francia no juega.” Lo escribió un amigo, no sólo uno de los miles en Facebook, sino alguien que conozco bien, estimo mucho, un cristiano practicante de convicciones y acciones progresistas. Me impactó. No podía creer que el amor por el fútbol y el equipo de su adoración lo haya llevado a decir semejante barbaridad. Porque lo que escribió el amigo, tal vez pensando que sólo se trata de una broma sin importancia, revela que la pasión por el deporte le activó sentimientos racistas. Los comparte no sólo con muchos fanáticos del fútbol, sino con todo la derecha francesa, que ha dicho que no se siente representada por ‘los africanos’ que juegan por su país.

Los supuestos ‘africanos’ que juegan en el equipo de Francia son franceses, hijos de migrantes, educados en Francia, expuestos al racismo existente en Francia y a la miseria en los suburbios de las ciudades francesas. Son tan franceses como cualquier francés blanco. Mi amigo, que escribió esta barbaridad, sabe esto. Conoce bien los problemas de los migrantes, el rechazo racista que despiertan en los países destinos. Pero no ve como franceses a los hijos de africanos que migraron de las ex colonias francesas a la mère patrie, la gloriosa madre patria.

Según esta lógica, los millones de ciudadanos de Estados Unidos descendientes de los países de América Latina, África y Asia no son ‘verdaderos’ ciudadanos, sino siguen siendo africanos, chinos, mexicanos  y salvadoreños – intrusos. Con esta lógica estará plenamente de acuerdo Marine Le Pen, la dirigente de la ultraderecha francesa, que dijo que siente como insulto que ‘estos africanos’ pretendan representar la bandera francesa – y seguramente también Donald Trump. ¿Pero cómo es posible que cuando se trata de apoyar a su equipo de fútbol, ciudadanos comunes que nunca expresan racismo, se pongan de lado de la señora Le Pen?

No me vengan con la paja de que estoy cayendo en los abismos de la ‘cultura de cancelación’, esta corriente torcida que vigila que nadie se salga de lo ‘políticamente correcto’, que algunos progresistas han definido. No soy de estos intolerantes y puristas. No estoy tratando de callar a nadie. Pero tampoco me voy a callar yo, cuando veo que las pasiones del fútbol se deslizan a pasiones nacionalistas y terminan en pasiones racistas. Sólo digo: Cuidado con esas pasiones, que son contrarias a la idea de que el deporte une a los pueblos y crea hermandad. Se acuerdan que esta es la noble idea que todavía se evoca detrás de lo que hoy son los millonarios negocios del fútbol – como se manifiesta en el hecho que una monarquía, que nada en petrodólares, pudo comprar no solamente al PSG Paris con todo y Messi, sino al campeonato mundial de fútbol.

No tengo problemas con el hecho que todo el mundo ahora se declare argentino y que Messi sea elevado a santo a la par de Maradona. “A cada uno le gusta lo que le guste”, como hace años dijo una sobrina, creando una frase emblemática de toda la familia. Para mi expresa lo más valioso de nuestra cultura: la tolerancia. Cuidémosla.

Saludos, 





viernes, 16 de diciembre de 2022

Carta a los militantes del FMLN: Pónganse claros. De Paolo Luers

 "La verdadera pregunta no es si el FMLN va a aliarse con otros partidos, sino si entiende su responsabilidad histórica de unirse al único instrumento que puede enfrentarse a la dictadura, que es la unidad." 

El audio de la carta FMLN.mp3

Publicado en MAS! y EL DIARIO DE HOY, sábado 17 diciembre 2022

Amigos:

En la reciente Convención Nacional del FMLN, ustedes no contestaron las preguntas que todos les hacen: ¿Van a emprender la lucha política y electoral contra el régimen antidemocrático de los Bukele? ¿Están dispuestos de hacer los sacrificios necesarios para que esta lucha sea consecuente?

El sacrificio principal que todos los opositores tienen que hacer es despojarse de todo egoísmo personal e ideológico que sea obstáculo para la formación de una gran alianza democrática –que es la único forma de enfrentar a Bukele en las elecciones del 2024 y de arrebatarle el poder total que ha usurpado. Quien piensa que puede ir a estas elecciones sólo, agarrado de su propia bandera y sus propios consignas, está condenándose a ser derrotado –esta vez definitivamente.

Parece que ustedes están permitiendo que el FMLN vaya en esta dirección. La decisión tibia que tomaron en su convención es: Vamos a participar en las elecciones del 2024, pero lo vamos a hacer solos, sin coaliciones con Nuevas Ideas, Gana o Arena.

Permítanme, pero esto es ridículo. Coaliciones con NI GANA ni siquiera hay que mencionar, porque ellos son el adversario a derrotar. Bueno, obviamente no para todos en su partido... Entonces, queda el fondo del asunto: No quieren ir juntos con Arena. 

Nadie está esperando que formen una coalición FMLN-ARENA. La historia les exige apoyar, como una corriente más, al esfuerzo de la Sociedad Civil de crear una alternativa democrática. La alianza, que está por surgir, va a invitar a todos los partidos opositores a unirse a este esfuerzo. 

La verdadera pregunta no es si el FMLN va a aliarse con otros partidos, sino si entiende su responsabilidad histórica de unirse al único instrumento que puede enfrentarse a la dictadura, que es la unidad. 

Es preocupante que a esta altura, muchos en el Frente aun no entienden que estas próximas elecciones no son para medir fuerza entre izquierda y derecha, sino entre democracia y dictadura. Me consta que muchos entre ustedes sí entienden esto y quieren ser parte de la alianza que se está construyendo. Pero otros no. Es obvio que hay en el Frente quienes quieren hacer arreglos de convivencia con el régimen autoritario. Ustedes no han resuelto esta contradicción entre dos visiones incompatibles: oposición contra cohabitación. Esto se refleja en su decisión sobre las elecciones: ‘Vamos a participar, pero no unirnos a todos los demás que quieren enfrentar al régimen autoritario’.

Esto, mis amigos, no se vale. Se avecina la gran batalla por la democracia, y cada uno tiene que elegir de que lado va a estar. Medias tintas ya no se valen. 

Y una consideración más: Ustedes tienen una responsabilidad especial. Ustedes crearon este monstruo que ahora destruye la democracia, incluyendo -sobre todo- su partido. Nayib Bukele fue alcalde del FMLN antes de voltearse contra ustedes. Ustedes le abrieron la puerta a la política y al poder. Incluso el puro interés por su propia sobrevivencia debería llevarlos a luchar contra Bukele, porque el FMLN ha sido su primera víctima. Ha sido destruido, desangrado y carcomido por este vampiro. Con el millón de votantes que les robó a ustedes, el hombre saltó al poder.  

Así que déjense de pajas y pónganse claros de qué lado van a estar en las batallas políticas que se avecinan. Si no, serán aplastados.

Saludos,