sábado, 3 de abril de 2021

Carta de sábado: El secuestrado II. De Paolo Luers

Father Roy Bourgeois en una protesta 
frente a Fort Brenning

Publicado en MAS! y EL DIARIO DE HOY, sábado 3 abril 2021

Estamos subiendo al Cacahuatique. Conmigo van el fotógrafo Harry Mattison, el padre Maryknoll Roy Bourgeois, a quien en San Salvador andan buscando por “secuestrado”, y Roger Blandino, recién liberado preso político. Jimmy “El Gato” es el jefe de la escuadra, que nos lleva de Rio Seco al Cacahuatique. Es de Rio Seco, tiene varios años de combatir contra los paramilitares de la zona. En la ofensiva le tocó el ataque a Gotera, y luego se quedó en los campamentos. De miliciano pudo seguir viviendo con su familia y trabajar su tierra, y sólo de vez en cuando participaba en acciones militares. Ahora se convirtió en combatiente a tiempo completo, viviendo en los campamentos, moviéndose adónde le mandan. Me cuenta que esto es lo que produjo la ofensiva en cientos de campesinos. Se hicieron combatientes, no por decisión propia, tampoco por órdenes de la comandancia, sino por la represión. Pasada la ofensiva, en Rio Seco han venido a matar: a los miembros de las comunidades cristianas de base, a los jóvenes que encontraron, “y si no los encontraron, a algún familiar.” 


Otra vez se ordena silencio total. Pasamos cerca de unas casas de ‘contrarios’. Una media hora después, podemos descansar. Falta bastante, pero hemos pasado la parte crítica. Duermo inmediatamente, en el lugar donde me siento a la orilla del camino. Ni siento las piedras. Ni los pies.


Más adelante entramos a una casa. “Son colaboradores nuestros. Sus hijos están en la Guacamaya.” Nos están esperando con tortillas, queso, y el café más delicioso del mundo. 

 

Cuando al fin llegamos al campamento, ya es de día. “Bienvenidos a Morazán”, dice la cocinera y nos da café caliente. Luego de dormir unas horas, escucho a Jimmy: “Compa, en el puesto de mando quieren hablar con vos.”


No puedo caminar. Las piernas no me responden. Me echo unas aspirinas y me obligo a caminar. Llegamos a la casa del mando. Roger ya está ahí. 

 

Suena un radio con la noticia sobre el cura desaparecido. El gobierno desmiente que esté en manos de ellos. La Iglesia habla de secuestro. La orden Maryknoll, famosa en El Salvador por el asesinato de sus monjas en el 1980, pide su libertad. La embajada dice que está investigando. 


El jefe del campamento dice que no sabe qué hacer. Coincide conmigo que es una locura alargar esta farsa. Decide pedir instrucciones a la comandancia. Mandamos a llamar a Roy y Harry. El padre insiste en ir a la Venceremos para emitir un mensaje al país y al mundo, y que luego irá a San Salvador para aclarar todo. Yo sostengo que es una locura que él aparezca en la radio...


Estamos esperando instrucciones. Hasta ahorita me doy cuenta que estoy en un lugar de increíble belleza. Una vista sobre buena parte del Oriente, con el volcán de San Miguel enfrente. Hacia el otro lado la cadena montañosa de Morazán y Honduras. Jimmy me explica que para llegar a La Guacamaya será otra noche completa y parte del día: bajar hacía Osicala, rodear el pueblo, cruzar el rio Torola, subir a La Guacamaya. Todo este trayecto, hasta cruzar el río, habrá que hacerlo antes de que amanezca, porque en Osicala, en la Calle Negra y cerca del Torola siempre hay presencia militar. Una vez pasado el Torola la cosa será más ‘al suave’…

 

Quiere decir, si llevamos a Roy, significa una noche y un día de marcha, un día para estar, un día para volver a cruzar el Torola y subir al Cacahuatique, y otro día para salir a la Ruta Militar, donde tendría que agarrar un bus para San Miguel y luego a San Salvador. Si todo va bien, Bourgeois se tardaría por lo menos 6 días para volver a aparecer en la capital. Una locura. Harry se ofrece regresar esta misma noche con Roy y ayudarle a vender en San Salvador la historia que anduvo con periodistas, pero no con la guerrilla. Y luego él lo sacaría del país. “Si lo encuentran solo, lo matan.”

 





miércoles, 31 de marzo de 2021

Carta a los inocentes. De Paolo Luers


Publicado en MAS! y EL DIARIO DE HOY, jueves 1 abril 2021

Amigos:

Hay que criticar lo que está mal. Pero también hay que celebrar lo bueno. El presidente de la República, Nayib Bukele, anunció anoche cambios masivos en su gabinete de gobierno. Enhorabuena. Los que hemos criticado la corrupción y los abusos de poder en el gobierno tenemos que reconocer que al final el presidente hizo lo correcto. Digo esto, aunque todavía no sabemos a quiénes va a nombrar para sustituir a los funcionarios purgados – con la única excepción del ministerio de Justicia y Seguridad, donde Gustavo Vilanova ya asumió el mando.

También hay que tomar en cuenta que obviamente fuentes en el Congreso de Estados Unidos han filtrado información sobre los funcionarios salvadoreños que serán incluidos en la famosa Lista Engels que saldrá a finales de mayo. Indudablemente, para el país es mejor que el presidente se adelante y limpie su gabinete antes de que Washington lo obligue.

Luego de la remoción de Rogelio Rivas, parece lógico que Bukele haya tomado la decisión de cambiar casi todo el gabinete de Seguridad. Osiris Luna tuvo que ir, no necesariamente por el manejo que hizo de los fondos de las tiendas penitenciarios, tampoco por que hasta ahora no supo revelar quién le pagó el viaje en jet privado, sino por algo mucho más delicado para el presidente: las evidencias de que el director general de centros penales estaba negociando con las pandillas. Para echarle la culpa a Osiris Luna y lavarse la manos, primero el presidente tuvo que despedirlo.

Tampoco era sostenible mantener a Mauricio Arriaza a la cabeza de la PNC y como viceministro de Seguridad. No tanto por las acusaciones de la Asamblea Legislativa, tampoco por su papel en el 9 de febrero 2020, sino por algo mucho más grave: la falta de confianza que goza este señor dentro de las filas de la PNC. 

Lo que sí sorprende es que también quitaron a Peter Dumas de la OIE, a pesar de su relación tan cercana con el presidente.

La sustitución del contralmirante René Francis Merino Monroy era de esperarse, porque su remoción fue condición no negociable para poder retomar la ayuda militar. 

Remover al ministro de Salud en medio de la epidemia a muchos parece una medida muy atrevida, pero los más entendidos la ven como necesaria para poder salir bien de la campaña de vacunación. Además necesitan un chivo expiatorio para explicar el desastre del proyecto Hospital El Salvador. En este contexto parece lógico que también el ministro de Obras Públicas se tuvo que ir.

Al que todo el mundo espera ver en la Lista Engels es el pobre primo Anliker, el Pablo de Agricultura. Hasta mucho se tardó el presidente de sustituirlo. 

Los que han esperado que la purga también alcance a una funcionaria como Alexandra Hill Tinoco, sólo por que no tiene el carácter para dirigir la política exterior del país, resultan ingenuos. En esta reconstrucción del gabinete no se trata de quitar a todos los incapaces, sino de deshacerse de los que se han convertido en problema para el presidente por sus actos de corrupción y abuso de poder. 

Como dicen en Alemania en esta fecha: April, April! En Estados Unidos sería: April fools! O en salvadoreño: ¡Caíste! No coman cuentos…

Saludos, 






lunes, 29 de marzo de 2021

Carta al Team Focos: Tómenlo como certificado de calidad. De Paolo Luers


Publicado en MAS! y EL DIARIO DE HOY, martes 30 marzo 2021

Estimados colegas:

Todo el mundo les manda condolencias, porque echaron su programa FocosTV del canal 33. Yo les mando felicitaciones. Pasaron una prueba de fuego. Mostraron principios y el valor de defenderlos. Si ustedes no se hubieran negado a adaptarse a una línea editorial más cobarde y menos incómoda para los gobernantes, no los hubieran purgado. Tómenlo como certificado de calidad…

Además, hay vida más allá de un canal de televisión cuyos dueños piensan que tienen que cerrar espacios de periodismo independiente y crítico. De todos modos, donde no hay vida para el periodismo profesional es en un medio que se avergüenza de sus mejores programas, sólo porque reciben llamadas del ‘Brozo’ Sanabria o del mero presidente.

Hay que felicitar en especial a Saúl Hernández, quien no dudó en inmediatamente renunciar como director del canal 33 e irse con FocosTv a un futuro incierto, en vez de mantener su cargo pero a costa de perder su integridad ética como periodista. En tiempos como los actuales, cuando la presión del gobierno sobre los medios de comunicación independientes es permanente y creciente, necesitaremos más ejecutivos como Saúl Hernández. 

La pregunta del millón es: ¿Qué va a pasar con el proyecto FocosTV? Parece que ustedes ya tienen planes adelantados, porque seguramente ya sentían que su tiempo en el canal 33 no iba a ser eterno. Con el récord de periodismo de calidad que han construido en cuatro años al aire, deberían haber mostrado a la sociedad salvadoreña que este tipo de periodismo es necesario y útil. Habrá que ver hasta qué grado esto se traducirá en apoyos que daría sostenibilidad al proyecto.

Cuando en 1996 tomamos la triste decisión de cerrar, luego de un año de batallar, el periódico Primera Plana, el primer proyecto de renovación periodística, yo escribí en el editorial de despedida que no podíamos seguir haciendo un periódico de calidad para el cual obviamente no existía suficiente demanda en la sociedad salvadoreña. No podíamos mantener un periódico con fondos de cooperación y con sacrificios no remunerados cuando la sociedad no estaba dispuesta a sostenerlo con inversiones, con anuncios y con suscripciones. 

Estoy convencido de que 25 años más tarde existe esta demanda. El Salvador ahora necesita con urgencia más periodismo valiente, profesional, investigativo, crítico e independiente. Es el único antídoto a la inundación permanente con desinformación y a una política gubernamental de crear realidades paralelas. 

Sin embargo, esta demanda no se traduce en audiencias (y por tanto en incentivos de mantener un medio alternativo con suscripciones, inversiones y anuncios) sólo porque es valiente y crítico. Además de esto, tiene que ser interesante, a veces incluso divertido. Tiene que abstenerse de sermonear y de asumir actitudes prepotentes frente a sus audiencias… No siempre he visto en nuestros medios investigativos y alternativos estas capacidades. Yo a veces he apagado el televisor, porque me aburrí de recibir lecciones sobre qué es políticamente correcto y qué no. Pero ustedes, amigos, igual que todos nosotros que tratamos de hacer periodismo de calidad, caemos muchas veces en el pecado de sermonear y aburrir. 

Espero que ustedes, luego de 4 años, y ahora sin tener que rendir cuentas a gente que no comparte sus principios éticos y profesionales, tengan la frescura, la irreverencia y el valor de combinar la capacidad de investigación y análisis con la creatividad de entretener.

Si en algo les podemos ser útil en esta aventura los que trabajamos en medios comerciales, cuenten con nosotros. 

Saludos,