"Están raspando las ollas para seguir flotando. Raspan la olla del fondo de pensiones. Raspan la olla a de las reservar bancarias. Raspan hasta las ollas ‘chiquitas’, como la del INSAFORP."
El audio: ROBO.mp3
En una ronda de amigos –todos de mente aguda- estábamos hablando de la última ley que se sacaron de la manga, sin ni siquiera decir agua va: La que bombásticamente llaman “Ley del Sistema Nacional de Integración.” Lo llaman así para que nadie se dé cuenta cuál es realmente en concreto el contenido y el efecto.
Ya desciframos que el contenido real es desaparecer el INSAFORP. Surgió la pregunta obligada: ¿Y porqué diablos quieren desaparecer una institución, que se encarga, con considerable éxito, a capacitar la fuerza laboral del país? Bueno, resulta que no es que la desaparecen, sino... y aquí comenzó la discusión; ¿Qué es lo que realmente están haciendo con INSAFORP? ¿Lo nacionalizan o lo estatizan? No, porque siempre ha sido una entidad pública. ¿Lo expropian o lo confiscan? Tal vez. Hasta que uno dijo: Dejémonos de paja, lo están robando.
¿Pero por qué hacen tales cosas? ¿Cuál es el propósito? El dinero. Con la nueva ley, las cotizaciones del sector patronal entrarían directamente al fondo general del Estado. Se convierten en un impuesto. Son 42 millones de dólares al año. Y según la nueva ley, de estas cotizaciones, Hacienda pasará sólo el 50% a la nueva Dirección de Integración. Sin embargo – estos 21 millones no irán enteros para financiar las actividades de formación laboral, sino terminan en el fondo general del Instituto, que entre otras cosas tiene que asumir las actividades de INJUVE. Solo el 40% de los 21 millones serán para seguir con la misión de capacitar la fuerza laboral del país. Unos 8.4 millones, cuando antes de esta confiscación el INSAFORP tenía más de 40 millones para capacitaciones.
Entonces, sea como sea que llamemos la toma de control, por parte del gobierno, de una entidad pública, que tuvo participación del sector privado, lo que están haciendo con las cotizaciones del sector patronal es una confiscación – un vil robo.
¿Ustedes, los empresarios y sus gremiales, se van a dejar confiscar 40 millones de dólares cada año sin denunciar el robo? ¿Sin pegar el grito? ¿Sin pelear?
Ustedes van a pagar, mes por mes, año por año, las mismas cotizaciones, ya de facto convertidas en un impuesto, el cual el gobierno puede usar para lo que quiera – y al mismo tiempo sus empresas van a recibir, con suerte, la cuarta parte de los servicios que les brindaba INSAFORP. ¿Se van a dejar? ¿Y si mañana hacen lo mismo con sus cotizaciones patronales y las de los trabajadores al Seguro Social? Para qué harían esto? Para que ustedes, con sus cotizaciones, financien el sistema de hospitales públicos.
¿Se dan cuenta del daño que están haciendo al país, pasándose encima del sistema de capacitación laboral – para robarse unos 40 millones de dólares? Es un monto ‘pinche’ dentro del desorden fiscal que tiene el gobierno, pero financiaba algo importante para el futuro productivo del país.
Están raspando las ollas para seguir flotando. Raspan la olla del fondo de pensiones. Raspan la olla de las reservar bancarias. Raspan hasta las ollas ‘chiquitas’, como la del INSAFORP.
No se hagan cómplices, señores líderes de la empresa privada y sus gremiales.
Saludos,
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