miércoles, 20 de noviembre de 2024

Parecen consejos amigables, pero son trampas. Columna Transversal de Paolo Luers

 

"El gran desafío es: encontrar soluciones democráticas a los problemas que los populistas explotan. Se necesitan conceptos que vuelvan la migración en una palanca del crecimiento económico. Todos estos países necesitan mano de obra, no sólo altamente calificada, igualmente para oficios manuales, logísticos y en la industria gastronómica y turística. Se necesitan maneras de combatir la delincuencia que no sean disruptivas para la democracia y los derechos humanos. Se necesitan políticas de paz que generen suficiente presión a Putin a retirarse de Ucrania, y a Israel y los Palestinos para al fin realizar el único concepto que promete paz y desarrollo para ambos: establecer dos estados autónomos que convivan y cooperen en el mismo territorio.


         Publicado en EL DIARIO DE HOY, miércoles 20 noviembre 2024

Los demócratas, de derecha e izquierda, que tratan de oponerse al avance de las fuerzas populistas y autoritarias en todo el mundo, reciben un consejo que parece amigable y atractivo, pero resulta fatal: asumir parte de los discursos y las propuestas de las derechas extremas. Mucho cuidado.

 

El argumento va así: Los extremistas como Trump en Estados Unidos, VOX en España, Bolsonaro en Brasil, Bukele en El Salvador, Milei en Argentina, las señoras Meloni en Italia y Le Pen en Francia, la AfD en Alemania, Orban en Hungría (para solamente nombrar los más conocidos y empoderados) han detectado y explotado las debilidades y errores de las democracias liberales. Han sabido leer de dónde vienen las frustraciones y resentimientos de la gente. Los demócratas -centro derecho y centroizquierda- no pueden seguir negando los vacíos que han dejado sus gobiernos; no pueden dejar a los ultras las banderas que retoman las frustraciones de la gente. Tienen que retomar buena parte de los discursos de los ultras, sobre todo en temas como la migración, la seguridad, tal vez incluso en asuntos como el aborto, el matrimonio tradicional, la inclusión social, la protección de minorías culturales, raciales y sexuales. Estos son los consejos tramposos.

 

No caen en saco roto. La centroderecha ya se está moviendo en esta dirección. En Italia, la derecha completa ha hecho alianza con los postfascistas de Meloni; en Estados Unidos, el Partido Republicano en su totalidad se ha rendido a Trump y su filosofía MEGA. El Alemania, la Democracia Cristiana y los Liberales tratan de quitarle a la nueva derecha autoritaria la bandera de la lucha contra la migración ‘ilegal’. Igual que ellos exigen el cierre de fronteras y la expulsión de los migrantes que no logran conseguir asilo. Que nadie de Irak, Siria o Afganistán sea aceptado en Alemania, como si estos países hayan resuelto sus problemas de conflictos internos y represión masiva. ¿Y los resultados? La ultraderecha sigue creciendo.  Reafirmada en sus exigencias comienza a verse ya no como paria y ultras, sino como parte del centro político.

 

Incluso los partidos de centroizquierda se ven bajo la misma presión – y tentación. En el debate en Estados Unidos de cómo el Partido Demócrata puede recuperar el apoyo mayoritario entre trabajadores, sindicatos, latinos y negros para hacer oposición a Trump, la mayoría de los consejos que reciben van así: aprender de Trump, quitarle las banderas populistas, dejar de oponerse a la guerra contra la migración ‘ilegal’, el cierre de la frontera Sur y la deportación masiva; dejar de hablar tanto del aborto y de los derechos de las minorías sexuales. En resumidas cuentas: No tratar lo imposible de detener un tsunami populista. Abandonar las causas liberales que obviamente ya no tienen mayoría...

 

El Partido Socialdemócrata y los Verdes, que luego del rompimiento de su coalición con los Liberales enfrentan elecciones anticipadas en febrero 2025, se topan con la misma tentación de adaptarse a la ola populista que no pueden detener. Discuten también deportaciones masivas, cierre de las fronteras, reducir el gasto social para la inclusión de migrantes. Entre los socialdemócratas crece incluso la disposición de adaptarse al discurso fraudulento de paz, que con éxito usan la AfD, de corte neofascista, y el nuevo partido BSW, formado por excomunistas que tratan de llevar las bases de la izquierda hacía la derecha para cosechar votos en la cloaca de admiradores de Putin y sectores resentidos que no quieren seguir el canto de sirena de la ultraderecha. Resurge entre la socialdemocracia el anhelo de quedar bien con Putin, que medio perdió su atractivo y su credibilidad cuando Rusia invadió Ucrania. Ahora que no se ve como Ucrania puede ganar la guerra, pero pide ayuda militar y financiera para parar el avance de los rusos, crece otros el discurso que exige una paz a cualquier costo, sobre todo a costa de Ucrania. Y con el retorno de Trump al poder, surgen las voces que dicen: Hay que ser realistas, Ucrania está perdida, busquemos entendimientos con el ganador: Putin.

 

Si el centro democrático -en Europa, en Estados Unidos y en el mundo- cede a la tentación del appeasement, el apaciguamiento frente a los Trump del mundo -y en última instancia frente a Putin-, ellos ganan, los Trump sobre la democracia liberal, Putin sobre Ucrania y posiblemente sobre partes de Europa Oriental. 

 

Ojo: Todo esto no significa que las fuerzas democráticas no tengan que buscar soluciones a los problemas de las guerras, inseguridad, la migración incontrolada y los costos de estado del bienestar. Pero no pueden pedir prestado las recetas de los enemigos de la democracia. Su gran desafío es: encontrar soluciones democráticas a estos problemas. Se necesitan conceptos que vuelvan la migración en una palanca del crecimiento económico. Todos estos países necesitan mano de obra, no sólo altamente calificada, igualmente para oficios manuales, logísticos y en la industria gastronómica y turística. Se necesitan maneras de combatir la delincuencia que no sean disruptivas para la democracia y los derechos humanos. Se necesitan políticas de paz que generen suficiente presión a Putin a retirarse de Ucrania, y a Israel y los Palestinos para al fin realizar el único concepto que promete paz y desarrollo para ambos: establecer dos estados autónomos que convivan y cooperen en el mismo territorio. 

 

Sólo con estas políticas nuevas se puede enfrentar -y al fin parar- la ola autoritaria. Repitiendo los discursos populistas consigue lo contrario. 






martes, 19 de noviembre de 2024

Audiencia en caso Jesuitas termina plagada de irregularidades. Observador Político, Paolo Luers

 

"No es viable inventar delitos de lesa humanidad y por tanto imprescriptibles, salvo violando la piedra angular del Derecho Penal: Nulla Poena sine Lege. Sin ley, no hay pena."


    Publicado en EL DIARIO DE HOY, miércoles 20 noviembre 2024

Este lunes concluyó la audiencia en el caso Jesuitas. El Juez Segundo de Instrucción, Harold Iván Córdova Solís, resolvió a mandar a todos los acusados a juicio, con todos las acusaciones de la Fiscalía en pie. Además decretó detención y difusión roja para dos de los militares, que hoy no se presentaron al juzgado: Juan Rafael Bustillo y Juan Orlando Zepeda. (1)

El abogado Carlos Miranda, defensor del Dr. Rodolfo Parker, proporcionó a El Diario de Hoy algunos detalles e irregularidades del desarrollo de la audiencia.

El Juez Segundo de Instrucción resolvió admitir toda la prueba presentada, tanto por Fiscalía, como de la querella y los defensores, aunque estas son contradictorias entre ellas. Declaró sin lugar las solicitudes presentadas por la defensa sobre nulidad y prescripción de algunos de los delitos acusados, sin fundamentar suficientemente su resolución, a lo que bajo pena de nulidad le obliga el art.130 del Código Procesal Penal. Una reforma de 2022 para poder procesar a ausentes no es aplicable, porque no se permite irretroactividad. Según el defensor, esto provoca la nulidad absoluta de la Audiencia Preliminar, según lo previsto en el Art. 224 numeral 6 del Código Procesal Penal.

En el caso de Parker, la defensa destacó que la acusación de haber alterado declaraciones para suprimir la presunta referencia de testigos a órdenes superiores para el operativo en la UCA, son hechos imposibles, puesto que quedó probado que la Comisión de Honor, incluido Rodolfo Parker, solo recibieron declaraciones verbales. Las declaraciones escritas fueron tomadas exclusivamente por la Comisión de Investigación de Hechos Delictivos. Además, no hubo referencia a órdenes superiores. El único que pudo haber hablado sobre ellas era el Coronel Benavides, y tanto en su entrevista verbal ante la Comisión de Honor como en su declaración escrita ante la Comisión de Investigación de Hechos Delictivos, Benavides guardó absoluto silencio. Queda comprobado que Rodolfo Parker no tuvo acceso a las declaraciones escritas; y además, no contenían referencias a órdenes superiores. Es decir, no se podía alterar un documento al que no se tuvo acceso, y además sobre supuestas referencias a órdenes superiores que nunca se conocieron.

Además, explaya la defensa, Parker está acusado por delitos que, además no cometidos ni comprobados, en todo caso estarían prescritos. Esto último, dado que se trata de delitos que por definición de derecho internacional no son de lesa humanidad, como también está plasmado en la sentencia del 2016 de inconstitucionalidad de la amnistía, que expresamente destaca que los hechos imprescriptibles únicamente son los contenidos en el Protocolo II de los Convenios de Ginebra, entre los cuales no están ni el Encubrimiento ni el Fraude Procesal.

La misma Fiscalía los presentó como “delitos autónomos”, es decir, ni anteriores ni durante el operativo militaren la UCA, sino posteriores, no guardando ninguna relación de causalidad. En cuanto al Estatuto de Roma, este tipo de delito de encubrimientos es aplicable sólo a partir del año 2015, sin que se pueda aplicar retroactivamente. Este estatuto, aunque no aplicable por razón de la prescripción, de todos modos sólo persigue la modalidad del encubrimiento cuando es anterior o concomitante con el delito de lesa humanidad, no cuando es posterior.

No es viable inventar delitos de lesa humanidad y por tanto imprescriptibles, salvo violando la piedra angular del Derecho Penal: Nulla Poena sine Lege. Sin ley, no hay pena.

Destaca el defensor de Parker que la Comisión de Honor, incluido Rodolfo Parker, funcionó para apoyar administrativamente, sin funciones jurisdiccionales ni acceso a las diligencias de investigación. La comisión de Honor cumplió con su cometido al determinar en sus 7 días de trabajo que no era el FMLN el responsable de los hechos en la UCA, como hasta en esa fecha se venía sosteniendo, sino miembros de la Fuerza Armada, impulsando así confesiones y el conocimiento de la verdad, y asegurando la continuidad de las investigaciones por parte de las autoridades legalmente responsables de ello.

(1) En otras notas periodísticas y en una publicación de la Fiscalía General de la República se maneja que el Juez del Juzgado Segundo de Instrucción, Harold Iván Córdova Solís (sin mencionar su nombre, como lastimosamente se ha vuelto costumbre) decretó orden de captura  también a los acusados Alfredo Cristiani y Rodolfo Parker. Esto es falso. Los dos ya tenían orden de detención, y en su resolución el juez de Instrucción debería haber revocado o ratificado esta orden. No hizo ni una ni la otra cosa. Otro grave error del juzgador. Teóricamente, al no haber ratificado la orden, ya no existe.









lunes, 18 de noviembre de 2024

Carta sobre el Circo TRUMP con animales salvajes fuera de control. De Paolo Luers (+ capítulo 11 del libro 'Doble Cara')

 

"Rubio ha sido un fiel amigo de Bukele y le dará mano libro para atornillarse en el poder." 

"Pero el personaje más peligroso en la administración Trump será Elon Musk. La sólo idea de un matrimonio entre el inmenso poder de la Casa Blanca con el poder económico y mediático del hombre más rico del mundo, es una pesadilla."

El audio en la voz del autor: EL CIRCO TRUMP.mp3   


Publicado en MAS!  EL DIARIO DE HOY, martes 19 noviembre 2024

Entre todos los nombramientos que Donald Trump ya hizo para su gabinete, destacan dos, que son los más peligrosos. Elon Musk y Marco Rubio. Elon Musk, para Estados Unidos y el mundo. Marco Rubio, para América Latina y en particular para nosotros en El Salvador.

Marco Rubio no es un loco como Robert J. Kennedy Jr., la vergüenza de la familia de Robert y Jack Kennedy, que va a poner el sistema de Salud en función de sus fantasías anticientíficas y su fobia a las vacunas. O como Tulsi Gebbard, que va a usar su cargo de Directora Nacional de Inteligencia para promover su posición pro Putin y que enfocará todos sus recursos contra China. Tampoco como el moderador de Fox News, Pete Hegseth, el nuevo secretario de Dfensa, quien va a garantizar que desde el mundo de los militares no habrá resistencia contra ninguna de las aventuras de Donald Trump, como afortunadamente hubo en su primer período.

 



Rubio va a abrir las puertas en Washington para dirigentes latinoamericanos como Javier Milei y Nayib Bukele. Ya está hablando de una Alianza de Gobiernos de extrema derecha, a la cual quiere presionar que se suman países como Ecuador, Paraguay, República Dominicana y Costa Rica. Bajo el mando de Rubio, el State Departement y la AID van a abandonar todas sus políticas de protección de los Derechos Humanos y las instituciones democráticas y regresar a la práctica histórica: trabajar con “gobernantes hijueputas, con tal que sean nuestros hijueputas.” Rubio ha sido un fiel amigo de Bukele y le dará mano libro para atornillarse en el poder y ampliarlo en Centroamérica..

 

Pero el personaje más peligroso en la administración Trump será Elon Musk. La sólo idea de un matrimonio entre el inmenso poder de la Casa Blanca con el poder económico y mediático del hombre más rico del mundo, es una pesadilla. Está surgiendo en Estados Unidos una oligarquía diferente a la de los barones de la industria de los siglos pasados y los titanes de Wall Street del presente, una oligarquía al estilo ruso que se vuelve socio indispensable del poder político. Poner al exponente de esta nueva oligarquía nacida de las revolución digital a cargo de remodelar el gobierno federal a su gusto, su conveniencia y los intereses comunes de él y Trump, es lo más peligroso que un presidente puede hacer, no tomando en cuenta el riesgo de una guerra nuclear...

Poner a un hombre tan poderoso, tan egocéntrico y tan ansioso de poder y control como Elon Musk a cargo de remodelar el gobierno federal, no significaría, como dicen, más eficiencia. Significa limpiar todo el aparato del gobierno federal, incluyendo los servicios públicos, de las huellas de políticas de inclusión social y bienestar para todos. Ya hablan de deshacerse del Departamento de Educación; el de Salud lo va a joder Kennedy; el de Medio Ambiente estaría bajo el mando de personas que niegan los riesgos del cambio climático; el de Energía estaría en manos de una magnate de petróleo y gas natural. El camino está trazado y Elon Musk será el ejecutor. Le une con Trump la filosofía del “¡you are fired!”

 

El tercer brazo demoledor del nuevo gobierno en Washington será la mafia antinmigrante, que se instalará en todas las instituciones relacionadas con la migración. Otra figura de la derecha tropical de Florida, Matt Gaetz, fundador en el Congreso de un núcleo de apoyo incondicional para Bukele, llamado Caucus El Salvador, será el nuevo fiscal general y secretario de Justicia. Una agitadora racista como Kristi Noem tomará control del Department of Homeland Security. Ella ya dijo que todas las agencias bajo su mando estarán al servicio de cerrar la frontera y ejecutar la expulsión de los 15 millones de migrantes indocumentados que viven, trabajan, estudian y han creado familias en Estados Unidos. Un ex agente de seguridad fronteriza, Tom Homan, con antecedentes de abusos de poder coordinaría todo esto como “Zar de la Frontera”.

 

A Trump le han hecho la broma, diciendo que “Si eligen a un payaso, tendrán un circo”. Es cierto, cuando se ve el tipo de personajes exóticos que asumirán el poder, parece circo. Pero no será un circo gracioso, sino uno rabioso, en el cual los animales salvajes estarán fuera de control.

 

Amárrense los pantalones, salvadoreños en Estados Unidos como en casa, vienen tiempos peligrosos que requieren resistencia inteligente.

 

Saludos,  



* * *

El libro Doble Cara ahora está agotado en las librerías de la  UCA, en el campus y en Cascadas/Soho. Pero será disponible en breve. También lo pueden pedir Amazon.com, o desde México en amazon.com.mx

Ahora puede leer el libro, en tres entregas cada semana, en este blog. Disfrútenlo.




Capítulo 11: La toma de Yoloaiquín 

(1982)


Mi bautismo de fuego me toca poco después, cuando la comandancia decide que es tiempo de mostrar a los militares que la guerrilla de Morazán está lista para atacarlos en sus guarniciones, que todavía mantienen en los pueblos. Fuera de estos pueblos ya han perdido el control, no sólo político, sino también militar. Además los compas quieren mostrar que pueden operar fuera de su retaguardia al norte del Torola. Entonces, vamos a tomarnos Yoloaiquín, uno de los pueblos entre Osicala y Gotera. Digo ‘vamos’, porque le he pedido a Jonás que me deje acompañar a la fuerza combativa para registrar con fotos la toma del pueblo. “Está bien. Pero te voy a dar un compa de seguridad, para que no te pase nada a vos, pero también para que no estorbés. Siempre es un problema que a un combate vaya gente que no es combatiente...” 

Maravilla me explica: “Si cubrís el combate con la cámara, no puedes ver nada que no está en tu encuadre. No vez nada que se mueve a tu lado. El compa será tus ojos, y si él dice que te parés, te agachés, te tirés al suelo o que te corrás, eso lo hacés, sin pensarlo...”


Paolo grabando video, Santa Ana

Subimos al cerro Cacahuatique, que reina encima de Yoloaiquín, y esperamos por unos días la orden de bajar al pueblo. Cuando llega, comenzamos a bajar tipo medianoche. Llevo mi M2. Me hacen bromas: “Llevás la carabina del Che, ya no nos puede fallar el ataque.” Yo sólo espero no tener que usarlo...


Ernesto Che Guevara con un M2

Llegamos al cementerio de Yoloaiquín que está encima de la ciudad. Poco antes de amanecer, la columna comienza a bajar al pueblo, en total silencio. Yo con mi guardaespaldas casi al final de la columna. Llegamos a la orilla del pueblo, y los compas comienzan a tomar sus posiciones. El objetivo es una casona de dos pisos en el centro, el cuartel de la Guardia. Algunos compas se han acercado al centro, otros quedamos atrás en la orilla. Ya está aclarando, y tomo fotos de los compas atrincherados.

Se rompe el fuego. Es una acción absolutamente sincronizada. La casa recibe disparos de tres direcciones, dando cobertura a los combatientes que tienen que acercarse a la casa a una distancia que les permita lanzar granadas. También se escuchan disparos del otro lado del pueblo, por la carretera, donde otro pelotón ataca la casa cuartel de la Policía Nacional. Estoy impresionado de la manera como todo es orquestado y sincronizado. Los guardias responden el fuego y el avance del equipo de asalto se demora. Pero cuando caen las primeras granadas al interior de la casa cuartel de la Guardia, comienzan a rendirse, uno por uno salen con las manos sobre la cabeza y sin fusiles. Menos uno, que se ha parapetado en el techo y no deja que nadie se acerque a la casa. Es un buen francotirador. El tipo ha detectado a uno de los compas del equipo de asalto y lo obliga a buscar cobertura detrás de una piedra. Durante un buen tiempo, que me parece una eternidad, el compa no se puede mover. De donde estoy, lo puedo ver y tomarle fotos de como se hace chiquito y mete la cabeza en el polvo. Estamos detrás de un muro y solamente levanto la cabeza y la cámara cuando mi guardaespaldas me indica. Nos silban varios disparos muy cerca.


La pesadilla termina cuando otro compa logra acercarse a la casa del otro lado, se sube a otro techo, y le pega un tiro al francotirador. Cesa el fuego. El compa detrás de la piedra no se levanta. Varios corren para auxiliarle, pero no está herido, está en shock y paralizado. Habla incongruencias. Los compas lo levantan y quieren quitarle el arma. No se deja, grita. Al fin logran desarmarlo y lo llevan al cementerio donde hay unos compas asegurando la retirada.

El pueblo está tomado. Ya no hay resistencia. Algunos guardias se retiraron, otros murieron, varios se rindieron. Los efectivos de la PN se retiraron sin ofrecer combate. Por primera vez, Yoloaiquín amanece tomado por la guerrilla.

Con otros compas me meto en una de las casas grandes del centro. Tiene un patio interno con huertas de guineo. Una vez que baja la tensión, siento una necesidad irresistible de cagar. En el patio hay una letrina, pero está ocupada. Me meto debajo de una huerta y me dedico a mi negocio. De repente se escucha un helicóptero. Todo el mundo corre para cubrirse debajo de algún techo. No sé qué hacer. El helicóptero se instala encima de la casa. No sé si desde arriba me pueden ver. El compa que está en la letrina me hace señas de agacharme y quedarme quieto. Okay, mejor no moverse, ni siquiera para subirse el pantalón. Tengo visiones de que ya me van a ver, me van a disparar con su ametralladora que veo en la puerta del aparato —y yo me voy a morir con el culo pelado...




Nada pasa. El helicóptero, como no ve nada, se va a otro lado. Deja ir una ráfaga a saber adónde y desaparece. Damos una vuelta por el pueblo, yo con mi seguridad, tomo fotos. No tenemos bajas, más que el compa que se enloqueció. Estoy aliviado de haber vivido el primer combate sin tener que disparar otra cosa que mi cámara. Al rato nos retiramos, todos se concentran en el cementerio, y la columna comienza a subir al Cacahuatique, con bastante armas, municiones, uniformes y medicinas recuperados.


 

En la siguiente entrega, sábado 16 de noviembre:

Capítulo 12: El sabor de la derrota 

(1982)



viernes, 15 de noviembre de 2024

Carta a quienes quieren huir de X: No se rindan tan rápido. De Paolo Luers (+ capítulo 10 del libro 'Doble Cara')

 

"X sigue siendo el espacio, el único. A pesar de Elon Musk y su acercamiento a Trump, en cuyo gobierno tendrá un papel central y tóxico. A pesar de la presencia, posiblemente favorecida por el algoritmo modificado desde que Musk tomócontrol de Twitter, de tantos contenidos de desinformación. Elon Musk no ha podido destruir Twitter. Lo ha modificado, pero no ha podido erradicar lo que era la esencia de Twitter: el intercambio ágil de noticias y opiniones; las ganas de debatir y polemizar; el sentido del humor."

El audio en la voz del autor: X.mp3


    Publicado en MAS!  EL DIARIO DE HOY, sábado 16 noviembre 2024

Varias personas y empresas, incluso medios de comunicación, que durante años publicaron en Twitter y lo convirtieron en el espacio de intercambio de noticias y opiniones principal del mundo, están huyendo de X - y de Elon Musk. El prestigioso periódico británico The Guardian publicó su carta de despedida a la plataforma, y explicó el porqué: “X es una plataforma mediática tóxica y su dueño, Elon Musk, está usando su influencia para manipular el discurso político.” Por esto, el Guardian se retira de X.


Es un error. Muestra ‘corrección política’, pero es una política equivocada. 

 

Luego de la campaña electoral en Estados Unidos, en la cual Musk jugó un papel primordial en apoyo a Donald Trump, sus peores teorías de conspiración y sus discursos más divisivos, no hay duda que esta afirmación del Guardian es cierta. Musk es tóxico y contamina a la plataforma X. La que no creo cierta es la otra afirmación del periódico: “Los beneficios de estar en X ahora se encuentran sobrepasados por los efectos negativos y nuestro periodismo puede promocionarse mejor en otros espacios.”  

 

Lo dudo. ¿En qué espacios? A veces, viendo la basura flotando en X, también tengo ganas de salirme. No lo hago, porque no hay una alternativa real. 

 

Se ofrecen varias plataformas alternativas: Threads -parte del imperio Meta-Facebook de Mark Zuckerberg- es la más grande, con 275 millones de usuarios. No parece tan enano en comparación a los 611 millones de X. Pero es enano en cuanto al su poder de comunicación. Threads es un chiste, un enano sin dientes. Es cierto, en esta plataforma uno encuentra notablemente menos basura, menos ataques personales, menos mensajes de amenaza que en X – pero también mucho menos información, menos opiniones relevantes, menos debate. Es aburrido. No es una alternativa para informarse, ni mucho menos para ser partícipe de debates. Además, ¿por qué huir de Elon Musk para quedarse con otro oligarca de Silicon Valley, Zuckerberg? Este hombre ha creado Facebook e Instagram, dos plataformas ahora inundadas de publicidad y convertidas en minas de información – pero para la industria publicitaria, no para los usuarios. Yo tengo una cuenta en Threads, publico en ella desde hace un año, pero sin encontrar eco, sin lograr abrir debates. No es una alternativa a Twitter/X. Nadie puede meterse en Threads y esperar informarse de lo que está pasando en el mundo – o esperar abrir un intercambio de ideas.


ELON MUSK en la carrera final de la campaña de Trump

X sigue siendo el espacio, el único. A pesar de Elon Musk y su acercamiento a Trump, en cuyo gobierno tendrá un papel central y tóxico. A pesar de la presencia, posiblemente favorecida por el algoritmo modificado desde que Musk tomócontrol de Twitter, de tantos contenidos de desinformación. Elon Musk no ha podido destruir Twitter. Lo ha modificado, pero no ha podido erradicar lo que era la esencia de Twitter: el intercambio ágil de noticias y opiniones; las ganas de debatir y polemizar; el sentido del humor. Hay mucha desinformación, pero ¿adónde no la hay en este tiempo de la postverdad? Y todavía hay en X mucho más información que desinformación. Hay insulto, pero también hay debate, humor, prosa creativa. Más que en cualquier otra red social. 

 

No me digan que TikTok se una alternativa. Si en X flota basura, en TikTok es un océano de basura, no sólo de desinformación, sino sobre todo de tonterías. En este mar de pendejadas y exhibicionismo cualquier mensaje serio se pierde.

 

Me quedo en X. Tampoco me salgo de mi súper, sólo porque vende cosa que me dan asco. Tampoco retiro mi libro de Amazon, sólo porque ahí también publican libros asquerosos. Así es en cualquier librería. Me niego a dejarme quitar espacios que durante años han sido míos. Que coma chucho Elon Musk, me quedo y sigo jodiendo en lo que él piensa que es su jardín. No lo es. Es nuestro. De todos.

Háganlo igual, amigos. No se corran de la cocina sólo porque hay humo. Saludos, 



* * *

El libro Doble Cara ahora está agotado en las librerías de la  UCA, en el campus y en Cascadas/Soho. Pero será disponible en breve. También lo pueden pedir Amazon.com, o desde México en amazon.com.mx

Ahora puede leer el libro, en tres entregas cada semana, en este blog. Disfrútenlo.




Capítulo 10: Lucas 

(1982)


Estoy otra vez en Morazán, esta vez no para una visita tan rápida como el viaje a El Mozote, luego de la masacre de diciembre 1981. Mucho ha cambiado. Hay más campamentos en toda la zona al norte del Torola, la escuela militar está llena de nuevos combatientes, los compas ahora andan bien armados y tienen uniformes.

Regreso a El Mozote. Sigue siendo un lugar desolado, sin gente. Al pueblo de Arambala comienzan a regresar alguna gente, pero El Mozote sigue siendo un cementerio. Ahora hay un campamento en las afueras de El Mozote, cosa que nunca existió antes de la masacre. En este campamento me encuentro con Lucas, el combatiente gringo. Ya lo había visto en viajes anteriores, pero es hasta ahora que, por primera vez, hablamos y nos hacemos amigos. Lucas tiene como dos años más que yo, lo que nos convierte en los viejos entre tantos muchachos. Me cuenta que su nombre es Joe Sanderson y que es de un pueblo en Illinois. Pasamos horas sentados debajo de un palo, fumando, tomando café y contándonos nuestras vidas. Él ha viajado por todo el mundo, incluyendo Vietnam, y en este peregrinaje llegó a El Salvador, en 1979, sólo para verse en medio de un desmadre de manifestaciones, primeras acciones de guerrilla urbana, conspiraciones en la UES... El globetrotter hippie se vio arrastrado por una corriente de insurrección y aquí está, en Morazán, convertido en guerrillero, francotirador, instructor de tiro, fotógrafo. Pero encima de todo esto, Lucas es —o se siente— escritor. Pasa horas llenando cuaderno tras cuaderno con a saber qué. Salió de su casa en Illinois para andar por Asia, África y América Latina para en algún momento sentarse a escribir su novela. Me imagino que sueña con una versión nueva de “On the Road” de Jack Kerouac. Hablamos de este libro un montón. A mí me marcó igual que a él. Entiendo su concepto de vivir intensamente para poder escribir, yo salí de la Universidad con la misma idea, aunque luego, en el trabajo en la fábrica, en el sindicato y luego en El Salvador la cosa cambió: Me veo metido en un proceso político y escribo para promoverlo...



Los papeles de 'Lucas', Juoe Sanderson, que luego de la guerra
hicimos llegar a su familia en Illinois.
Su historia de vida está contada
en "Entry into the soul of a wanderer", de 
Hector Tobar,
reproducida en Siguiente Pagina

'Lucas', Joe Sanderson. 
Campamento en las afueras de El Mozote.
Foto: Paolo Luers, 1982


Lucas es un fumador que no puede vivir sin cigarros. Peor que yo. Un día nos quedamos los dos sin cigarros. Estamos en un campamento cerca de Joateca. Lucas dice que conoce una casa cercana, donde a veces venden cigarros. No tenemos permiso de salir del campamento, pero como según Lucas queda cerca, nos aventuramos. No tienen cigarros. Lucas se niega a regresar con las manos vacías. Vamos en dirección de Joateca. “Lucas, esta es una locura. No podemos ir a Joateca...” 

“No hay soldados ni guardias en Joateca. No te preocupés.” 

“Pero está lleno de adversarios y orejas.” 

“No vamos hasta Joateca, aquí no más hay un lugar que se llama Mazala, donde hay una tienda. Hasta Coca podemos tomar ahí. Son colaboradores nuestros.” 

Lucas ya habla como los campesinos de Morazán: “Aquí nomasito...”, aun cuando a veces faltan horas de camino...

Llegamos a Mazala, un caserío sobre la carretera Arambala-Joateca. Entramos a la tienda, compramos cigarros, y nos invitan a tomar café. Mientras estamos tirados en las hamacas fumando y tomando café, llega un niño y dice: “¡Vienen los cuilios!” La muchacha de la tienda nos mete detrás de una cortina en un rincón, que es el dormitorio de la familia. “Quietos, si los detectan, nos matan a todos...”

Al fin no pasa nada. Los soldados se van. “Se fueron dirección Joateca. Ya pueden salir.” Esperamos un rato y agarramos camino. Cuando llegamos al campamento, nadie se había dado cuenta que estuvimos ausentes por 3 horas. Pensaron que fuimos a bañarnos en una quebrada cercana. 

“A nosotros nos ven como locos, no les importa,” dice Lucas. 

 

Luego, ya de regreso en el campamento de la radio, Jonás da órdenes de darme un arma. Me toca una carabina M2. “Pero que Lucas te enseñe como limpiar, armar y dispararlo.” Yo, al salir del bachillerato, decidí hacer uso del derecho constitucional que permite a los alemanes rechazar por razones de conciencia el servicio militar. Y aquí estoy, en El Salvador, recibiendo entrenamiento militar en una zona de guerra... 

 

Cuatro meses más tarde, recibo la noticia de la muerte de Lucas, en un combate en Poza Honda. Un compa me cuenta: “Si sólo hubiera actuado de francotirador, nada le hubiera pasado al gringo loco. Pero se le ocurrió querer hacer fotos. Al medio pararse para enfocar su cámara, le cae un balazo en la cabeza.” Me doy por advertido...

Enterraron a Lucas ahí mismo donde murió, en Pozo Honda, muy cerca de donde en diciembre habían enterrado a docenas de niños y mujeres, víctimas de la masacre en la zona de El Mozote.



En la siguiente entrega, sábado 16 de noviembre:

Capítulo 11: Capítulo 11: La toma de Yoloaiquín (1982)