lunes, 20 de julio de 2009

Sobre los fondos europeos y su implementación a la gestión de las Áreas Naturales Protegidos

Existen diversos fondos que la unión europea a diseñando para ayudar a los países miembros con PIB per capita inferiores a la media europea. Estos fondos en su mayoría están destinados hacia el agro, así su utilización en espacios naturales protegidos españoles se ve muy limitada. Aunque existen ciertos ejemplos en los que si se han visto vinculados. A partir de esta reflexión sobre España sería interesante analizar las politicas medioambientales salvadoreñas y ver como estas al fina de cuentas son quienes imponen las estratégias de conservación nacionales, pero primero una reflexión desde Europa y España.

Los fondos europeos están estructurados de la siguiente manera. El 50% del presupuesto es para la Política Agraria Comunitaria (PAC) estas son una sería de medidas destinadas a compensar (financiar) a agricultores en condiciones desventajosas con el del resto de Europa, esto se logra a través de una política de garantías, que incluye parte de un programa ambiental, así como un breve y pequeño apartado sobre política rural que lleva a la formación de planes de desarrollo rural que se ven alimentados por la políticas del primer pilar. Así también otros fondos que se implementan son las llamadas políticas estructurales que incluyen el 35 % del presupuesto, así se establecen políticas regionales, sociales y agrarias, dando forma a la creación de distintos fondos como el FEDER, FSE, FEOGA, Fondos de Cohesión, Iniciativas comunitarias (LEARDER+, INTERREG III, EQUAL y URBAN III).

La mayoría de estos casos se implementan en territorios pertenecientesa a la Red Natura 2000, que es una red de espacios naturales protetidos (ENP), lugares de interes comunitario (LIC) y zonas de espacial protección para las aves (ZEPA). Importante recalcar que existe una cofinanciación para los fondos destinados a la Red Natura, por lo que si no existe una voluntad expresa de los gobiernos nacionales difícilmente existirá dicha financiación, esto por su parte hace que dichas ayudas sean limitadas. Además de entrar en un claro conflicto de competencias entre la Unión Europera (EU), el estado miembro y los gobiernos locales (en el caso español más complicado debido a la existencia de las autonomías).

Existen también unos fondos destinados a iniciativas locales para el desarrollo Rural, estos fondos se conoces como LEADER, hasta este momento han comprobado ser una de las medidas mas eficaces, baratas y rentables. En estos fondos se esta examinando la vinculación de la iniciativa privada al extremo donante, lo cual en un primer grado parece deseable, en el extremo receptor se tiene que incentivar la inclusión de más participación privada para que no exista un monopolio de los gobiernos locales en cuanto a estos fondos. Otras medidas para incentivar el desarrollo local han sido los fondos LIFE; con un gran éxito también, estas medidas han resultado de las más provechosas, aunque han existido ciertas dificultades con los fondos LIFE-Naturaleza, los fondos LIFE-Medioambiente parecen estar funcionando muy bien.

El instrumento LIFE son los fondos que la UE a destinado para financiación de la Red Natura 2000, aunque estos son instrumentos de muy corta duración y ahora han sido ocupados nada más en proyectos modelo y no han sido ampliamente utilizados, si se destinaran más fondos a esta medida pues talvez pudiéramos presenciar una gran avance en la realización de la Red Natura 2000. Aunque existe la preocupación de la aplicabilidad de las fondos LIFE a LICs marinos.

Las medidas agroambientales ocupan muy poco presupuesto del asignado por la UE, para su correcta implementación deberíamos hablar de una ampliación de dichos fondos así como del establecimiento de etiquetas de calidad. Así como una disminución de los fondos del primer pilar de la PAC.

Las medidas de silvicultura, existen en algunos casos, depende si el espacio cuenta con zonas agrícolas donde la reforestación es compatible con la conservación, en el caso de pastos de dehesa o las extensiones de secano de Castilla y León, no es posible. Pero esto no es así en todas partes, así que estos fondos pueden ser aplicados a zonas forestales protegidas o manejadas, como las proximidades del Parque Natural del Moncayo en Aragón. Debería de desarrollarse más el artículo 32 que tiene una implicación más directa en la gestión y aplicación a la conservación.

Existen otras fondos de aplicación más sectorial como el FEDER, que se puede aplicar para la realización de planes de manejo y contratación de personal, el INTERREG que se aplica en los territorios fronterizos, el ISOP, FSE y los fondos I+D, los cuales se destinan a financiar proyectos de investigación y desarrollo, aunque en mi experiencia se dedican más a ciencia pura y que a ciencia aplicada.

Así caemos otra vez en la reflexión sobre la PAC. Con las nuevas medidas de desacoplamiento, no se sabe que resultados finales y como afectara a la vida rural y el medio ambiente. La modulación puede que potencie el desarrollo rural y la Ecocondicionalidad, termina siendo un manual de buenas prácticas y faltará ver la normativa vigente para ver su real aplicabilidad.

Entonces existen una serie de limitantes para la aplicación de los fondos europeos a los espacios protegidos, y es que la mayoría de ellos no esta diseñado para la conservación, aunque la tengan esta como algo tranversal y hallan una cuantas medidas diseñadas para esto, la verdad es que lo subsidios distorsionantes del mercando mundial se les ve poco sentido de conservación de la naturaleza y si acaso como medidas de mejora de la vida rural, aunque aun en este caso es difícil de ver esta aplicabilidad.

Como comentario final, los ejemplos de financiación de actividades en espacios naturales protegidos en Latinoamérica por lo menos resulto provechosa para desvelar la falta de idea que mucha cooperación tiene. Es muy difícil tratar de aplicar recetas sacadas de Europa a un contexto tan diferente como el de América Latina. Así faltaría hacer un análisis de las causas estructurales y no financiación tapadera de proyectos poco sostenibles.