El día martes 4 de diciembre, el gremio
de periodistas fue convocado al penal Mariona para recibir, directamente de la
boca de sus voceros, la respuesta de las pandillas a la exigencia de establecer
‘Municipios de Paz’, que una semana antes les habían lanzado tanto a ellos como
al gobierno monseñor Fabio Colindres y Raul Mijango, los mediadores de la
tregua. Esta propuesta fue conocida por una palabra muy mal escogida por los
mediadores: ‘municipios santuarios’. Y como era de esperar, fue rechazada por
la opinión pública, porque percibe como ilógico e inaceptable la idea de crear
zonas donde delincuentes se pueden refugiar de la justicia...
Los pandilleros pasaron más de una semana
discutiendo y analizando la propuesta, en reuniones dentro de las diferentes
cárceles y comunidades. Y en dos ocasiones en reuniones en el penal de Mariona,
donde a solicitud de los mediadores fueron concentrados por la Dirección de
Centros Penales los voceros de las ambas pandillas. Tuve la oportunidad de
presenciar una de estas reuniones, el día 4 de diciembre, la misma que al final
culminó con la mencionada conferencia de prensa. En esta reunión, uno de los
temas centrales de discusión fue el erróneo concepto de los ‘municipios
santuarios’. Y no hubo ni un solo pandillero que expresara acuerdo con este concepto.
En consecuencia, en el comunicado, que al final entregaron a la prensa, ya no
aparece el término ‘santuario’. Es más, varios de los voceros aprovecharon la
conferencia de prensa para explicar que no buscaban santuarios, ni refugios, ni
protección ante la ley, sino reinserción y reconciliación. Y que la idea de los
‘municipios de paz’ nada tenía que ver con zonas de protección de pandilleros,
sino más bien con zonas de protección garantizada para la población. Que se
trataba de zonas libres de extorsión y violencia. Y que ellos estaban claros
que cualquiera que seguía delinquiendo (o tenía orden de captura) será
perseguido por la policía y la justicia. Dentro y afuera de los lugares
declarados municipios de paz. Lo que sí plantearon: que en municipios donde las
pandillas ya no delinquen, no se les persiga por pura pertenencia a pandilla.
¿Cómo es posible que a los periodistas se
les escapara este importante giro en la discusión sobre la tregua y sobre la
propuesta de los crear municipios de paz? El Faro, supuesto medio líder en
seguimiento a asuntos pandilleros, tituló el día siguiente: “Pandillas dicen
que 900 mil salvadoreños habitan municipios propuestos como santuarios de paz”.
El titular de El Diario de Hoy: “Las pandillas quieren municipios santuarios”.
La Pagina tituló: “Pandilleros eligen municipios considerados ‘santuarios’ en
segunda fase de tregua”. El Mundo tituló correctamente “Pandillas entregarían
armas en 10 municipios”, pero comete el mismo lapso en el primer párrafo de su
nota: “Líderes de las pandillas, anunciaron que aceptaban la propuesta de la
segunda fase de la tregua, consistente en crear municipios ‘santuarios’ o zonas
libres de violencia.” La Prensa Gráfica (¿a quién le extraña?) ni siquiera se
tomó la molestia de registrar el hecho que los pandilleros se pronunciaran
sobre la propuesta que les exigía la suspensión total de extorsiones en ciertos
municipios.
Como el concepto del “santuario” fue el
más criticado dentro la propuesta original de los mediadores, como periodista
enfoqué en este tema, cuando el 4 de diciembre al fin tuve la oportunidad de
encarar a los dirigentes de las pandillas. Aquí partes de las conversaciones
con los principales voceros de ambas pandillas, reunidos el 4 de diciembre en
Mariona.
‘El Duke’ (Víctor Antonio García Cerón,
vocero de la 18-Revolucionarios, preso en Quezaltepeque): “No buscamos refugio. Buscamos un
lugar donde podamos concentrar nuestros esfuerzos para liberar la comunidad de
toda la delincuencia que nosotros como pandillas generamos. Y donde que no sólo
los pandilleros sino la policía local, los alcaldes, los lideres de las
directivas se involucran para resolver los problemas de ese municipio. No es
para que no nos persigan, sino para poder concentrarnos en crear municipios
libre de delincuencia.”
¿De Dónde
surgió esta idea?
“Los facilitadores la propusieron. Nosotros,
juntos con la letras, nos sentamos y hablamos. Si la idea es crear un municipio
libre de delincuencia, sin andar robando, ni intimidando a la gente, ni
extorsionándola, ni mucho menos asesinándola – entonces entramos. Si la idea es
que el pandillero que en realidad quiere reinsertarse y ya no seguir en lo
mismo, en estos municipios participe activamente para crear nuevas
alternativas, junto con los demás que entren en este pacto municipal: alcaldía,
empresas, comunidades – entonces, le entramos.”
‘El Viejo
Lin’ (Carlos Ernesto Mojica Lechuga, líder histórico de la 18, preso en
Cojutepeque): “No buscamos refugio ni protección ante la justicia. Buscamos una
oportunidad de poder reinsertar a nuestros compañeros, con oportunidades de
empleo y de aportar a la comunidad. Yo tengo mi propio término, yo digo:
‘popularizar este proceso’.”
¿Para
declarar un municipio como municipio libre de violencia, cuáles condiciones
ustedes ponen al gobierno?
“Ningunas. No
pedimos nada. Sencillamente es un paso más que nosotros vamos a dar. La
pandilla 18 está con la total disponibilidad a dar este paso.”
¿Qué
esperan en cambio?
“Desde
luego, sólo somos una de las partes en este proceso. Esperamos que las otras
partes implicadas pongon cada uno lo suyo y haga lo correcto. La sociedad
entera -y por supuesto, el gobierno- tienen que comprometerse a crear las
condiciones para facilitar a nuestros compañeros en las calles la inserción.”
¿Pero
ustedes se comprometen que en este municipio, una vez que lo declaran libre de
violencia, desaparece la extorsión?
“Desde luego, desaparecería de manera terminante e incondicional.”
“Desde luego, desaparecería de manera terminante e incondicional.”
Conversación
con 3 voceros de la MS:
‘El
Diablito’ (Borromeo Enrique Henríquez, preso en Ciudad Barrios): “El llamado
que han hecho los mediadores es una oportunidad para ir resolviendo
gradualmente lo que no se ha podido tratar a nivel nacional.”
‘Sniper’
(Carlos Tiberio Ramírez Valladares, preso en Ciudad Barrios): “Nos indigna que
piensen que buscamos santuarios, porque nosotros no buscamos refugio,
simplemente queremos crear lugares donde podemos demostrar que sí estamos en la
disposición de buscar una reinserción al sistema social.”
‘Speedy’
(Edson Zaachary Eufenia, preso en Gotera): “Nosotros desde el inicio del
proceso buscamos involucrar a todos nuestros compañeros que están en la calle,
para que entren un una reconciliación con la población.”
‘El Diablito’: “Esto de los Municipos de Paz es la forma de reconciliarnos con con nuestro propio barrio, con la gente que nos ha visto crecer, y que lamentablemente le hemos causado daño. El primer beneficiado va a ser la población civil, los comerciantes – y por supuesto también la gente nuestra, que deja de ejercer violencia y delincuencia y se inserta en la comunidad.
‘El Diablito’: “Esto de los Municipos de Paz es la forma de reconciliarnos con con nuestro propio barrio, con la gente que nos ha visto crecer, y que lamentablemente le hemos causado daño. El primer beneficiado va a ser la población civil, los comerciantes – y por supuesto también la gente nuestra, que deja de ejercer violencia y delincuencia y se inserta en la comunidad.
¿Es una
iniciativa de ustedes?
“No. Es una
iniciativa de los mediadores. Ellos hacen el llamado a los alcaldes, a los
empresarios, a la comunidad, a la policía, a todas las instituciones que
quieran participar en esto de la paz y la resinserción nuestra - y por supuesto
ese llamado nos abarca a nosotros. Y nosotros en nombre de la MS estamos
diciendo sí le entramos.”
El Faro
reporta la conferencia de los pandilleros ecribiendo:
“Para hacer posible la creación de los municipios santuarios, los pandilleros
reclaman la derogación de la ‘opresora’ Ley de Proscripción de Pandillas.”
Falso. Los voceros de las pandillas plantearon explícitamente que NO ponen
condiciones, que ellos están dispuestos de comprometerse con los municipios en
paz como gesto unilateral, y que esperan que luego “el gobierno haga lo
correcto” (‘Diablito’). Así lo
explica ‘El Duke’: “Dicen
que nosotros estamos poniéndole condiciones al gobierno, cuando en realidad a
nosotros se nos presentó esta propuesta de los municipios seguros y hoy estamos
respondiendo: Podemos trabajar para lograr tener un municipio seguro con las
condiciones que se necesitan para disminuir la violencia hasta el máximo, pero
sin que pongamos condiciones previas al gobierno o a la policía.”
Ocupé esta columna para corregir
percepciones erróneas creadas por la cobertura noticiosa en los medios. Y para
mejor poner a hablar a los protagonistas. Cada uno decida si creerles o no.
Pero por lo menos tenemos que saber lo que plantean.
(El Diario de Hoy)