Publicado en MAS! y EL DIARIO DE HOY, martes 1 de diciembre 2020
Estimado señor presidente:
El problema suyo es que es mentiroso compulsivo. O sea, no puede hablar sin mentir. El mentiroso compulsivo miente haya necesidad o no. Incluso cuando usted está haciendo o diciendo algo valioso y correcto, no puede resistir de agregarle mentiras. Es una debilidad, basada -me imagino- en inseguridad. Otros dicen que es una enfermedad...
La vacuna de AstraZeneca es la única diseñada para el Tercer Mundo, por eso la Universidad de Oxford se metió a apoyar su desarrollo. Si El Salvador quiere ofrecer a sus ciudadanos una vacuna para salir de la crisis de la epidemia que tiene paralizado nuestro sistema de Salud y nuestra economía, no hay otra alternativa. Esto es lo que usted, como presidente, hubiera tenido que comunicar al país. Nada menos y nada más. Y el en el momento adecuado, o sea cuando la vacuna estéaprobada en Estados Unidos y la Unión Europea.
Del video de la Cadena Nacional |
Tercero, para presentarse como el presidente más buzo del mundo, usted dijo en su cadena que AstraZeneca ha decidido mantener a El Salvador un precio de preferencia muy cómodo, por ser los primeros en firmar la compra masiva – y que a todos los demás les tocará pagar cinco veces más. Falso. AstraZeneca mantendrá los costos bajos a todos los países pobres, porque es parte de su compromiso por haber recibido el apoyo de Oxford y el financiamiento público de los países europeos para desarrollar esta vacuna.
A pesar de los problema temporales que ha sufrido la aprobación de la vacuna de AstraZeneca, ha sido una decisión correcta de firmar el contrato para usarla y romper la cadena de la epidemia en El Salvador. Pero por sus manejos propagandísticos irresponsables y absolutamente innecesarios, usted está poniendo en peligro la confianza que necesitamos todos tener en la vacuna.
Grow up, man. Madure. Saludos,