lunes, 14 de abril de 2025

Carta a Nayib Bukele: Mil veces maldito seas. De Paolo Luers (+capítulos 23 y 24 de DOBLE CARA/Libro II)

 

"Lo que vimos este lunes en transmisión en vivo desde el Oval Office es nada menos que una red internacional de secuestro en acción."  

En la voz del autor: Bukele.mp3


Publicado en MAS!  y DIARIO DE HOY, martes 15 abril 2025
 

Ciudadano Bukele:

Sentado en la Casa Blanca, ante las cámaras y los micrófonos del mundo, confesaste que por decisión tuya una persona que no tiene cargos contra él ni en El Salvador ni en Estados Unidos, sigue encarcelado. No hay manera más pública y contundente de declararse culpable de un crimen...


Lo que vimos este lunes en transmisión en vivo desde el Oval Office es nada menos que una red internacional de secuestro en acción.  

 

Trump dijo anteriormente que solo el gobierno soberano de El Salvador, o sea vos, podría sacar a Kilmar Ábrego del CECOT y que en este caso él facilitaría hasta el transporte aéreo a Estados Unidos. Ahora, en la reunión en la Casa Blanca, dijo que no lo admitiría en Estados Unidos porque es terrorista. Y vos dijiste que no podés poner en libertad a un terrorista. Entre dos presidentes condenaron a un hombre sin juicio, sin pruebas – y sin tener autoridad legal de hacerlo. 

En una exposición arrogante de poder, ambos asumen que, aunque es a todas luces ilegal, lo pueden hacer, simplemente porque se arrogan el poder total y desconocen el poder de las cortes, incluso de la Corte Suprema de Justicia de los Estados Unidos. Esto es un caso que trasciende la suerte de una sola víctima, en este caso Kilmar Ábrego, es un desafío general al Estado de Derecho, tanto en Estados Unidos como en El Salvador, incluso al derecho internacional. 

 

Vos, Bukele, te estás haciendo cómplice del intento de Trump de erradicar el control de la justicia sobre sus acciones – cosa que en El Salvador ya es pan comido. Con esto te amarraste de una vez por todas a Donald Trump. Ganás a corto plazo siendo la mascota del hombre más poderoso del mundo, pero cuando caiga Trump -y va a caer tarde o temprano- caerás con él. 

 

Mientras tanto, los secuestros al CECOT de inmigrantes salvadoreños, venezolanos o de otros países (y posiblemente pronto de ciudadanos estadounidenses) van a seguir. Las familias y las organizaciones de protección de los Derechos Humanos van a demandar a ambos gobiernos -incluso a vos personalmente- para obligar a las cortes de Estados Unidos a tomar posición. Ya ahora, luego de este descarado show de complicidad criminal en la Casa Blanca, la presión política internacional y la condena de estas prácticas van a llegar a niveles que nunca te has imaginado. Y en casa, más de la mitad de los salvadoreños ya expresa preocupación y rechazo a tus sistemáticas violaciones a los Derechos Humanos. Siga así y vas a terminar como Donald Trump, que a solo tres meses de haber asumido el poder ya tiene menos del 50% de apoyo popular.

 

La otra cosa repugnante de tu visita con tu chero Donald es que nadie habló de la suerte de los salvadoreños en Estado Unidos. Ni siquiera pediste a Trump mantener vigente el TPS para 250 mil salvadoreños. Ni un gesto hacía la diáspora que durante años te estuve apoyando. 

 

Tu capital político lo estás perdiendo con malas apuestas. Y vos sabés, mejor que otros, lo poderoso que es cuando la gente, luego de tener fe casi ciega a sus dirigentes, la pierda y se sienta defraudada. Vos sobre una ola de frustración popular surfeaste al poder. Con la siguiente ola caerás en la trompa. A Trump esto ya le está pasando, y como amarraste su suerte con la suya, te pasará igual.

 

Tuviste una salida salomónica – y no la aprovechaste. Hubieras dicho a Trump que el retorno de Ábrego, que exige la Corte Suprema de Estados Unidos, es problema de él - pero que vos tenés la papa caliento en tus menos, o sea en el CECOT, y te vas a deshacer de ella liberando al hombre, ya que no tiene cargos en el país.

 

Pero no, como Trump y Rubio y toda la banda reunida en el Oval Office lo clasificaron como terrorista peligroso, no tenías el valor de liberarlo, aunque sabés perfectamente que es inocente. Mil veces maldito seas por tratar así a un compatriota...


Sin saludos, 




* * *

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Para Raúl Mijango.

Como todo prisionero político, para sobrevivir 

pasó escribiendo, siempre y cuando no le nieguen

papel y lápiz. 

Si existiera su libro, quizás no hubiera escrito 

esta segunda parte del mío. 

Raúl murió el 28 de agosto 2023, 

luego de que durante años de encarcelamiento 

le negaron la debida atención médica.



Capítulo 23: El pleito con los compas del ERP

 

Voy a Morazán con Camilo, quien está recién liberado, con medidas cautelares. Hay una discusión que tenemos que tener con nuestros compas del ERP, la organización guerrillera, en la cual militamos Camilo, Raúl y yo durante la guerra.. Urge, antes de que se rompa algo. Es nuestra familia...

Cuando cayeron presos Raúl y Camilo, para mí era lógico llamar a nuestros ex compas del ERP para que se pronunciaran en su apoyo. No hubo mucho eco. Ahora los dos salieron libres, pero están enfrentando un juicio que les puede costar condenas de 15 a 20 años —y además están precondenados por parte de los medios, de la fiscalía y los partidos políticos. Volví a insistir. Algunos compas convocaron a una reunión en San Salvador, y fuimos Raúl, Camilo y yo. Jamás me imaginé que algo así llegaría a pasar, pero muchos de los compas se negaron a hacer declaraciones públicas de apoyo, prefirieron callarse. Algunos incluso se pusieron en contra de nosotros. “¿Quién les dijo que tenían que ponerse del lado de esos pandilleros mierda? Y hoy vienen a llorar y pedir ayuda.” Sobre todo se pusieron en contra de Raúl, a Camilo más bien lo pintaron como víctima del ‘aventurismo de Raúl y su afán de protagonismo, que todos conocemos desde mucho tiempo”... 

“Por la gran puta,” les dije, ya encachimbado y frustrado: “¿Van a hacer una sesión de crítica y autocrítica —o vamos a discutir cómo ayudamos a los compañeros?” Raúl, como siempre, es más sarcástico: “¿A partir de cuando ustedes se han vuelto tan miedosos? No me vengan con pretextos, miedo tienen ustedes...”


Raúl Mijango y Camilo (Roberto Castillo), luego de que ambos fueron puestos 
en libertad, pero Mijango nuevamente detenido con otra acusación 


Se armo una discusión fea —y sin resultado. No habrá ninguna declaración conjunta. La familia está dividida, hay resentimientos. Unos pocos, a título personal, se solidarizaron en redes sociales con Raúl y Camilo. Joaquín Villalobos nunca contestó ningún email. Ana Guadalupe expresó cariño y solidaridad en privado, pero no en público. El padre Rogelio y Sebastián, el Torogoz, expresaron su solidaridad, uno en su misa, el otro en un concierto. El resto, silencio.


Ana Guadalupe Martínez, Rogelio Ponseele y Sebastián el Torogoz


En Facebook apareció publicada una carta firmada por “los excombatientes de Morazán”, criticando la tregua y casi acusando de traidor a Raúl. Con Camilo decidimos ir a Morazán y enfrentar esta discusión. Raúl dijo: “Mejor no voy. Conmigo sería más controversial. Siempre les he caído mal a muchos de ellos. Vayan ustedes. ¡Y suerte!”

Por primera vez desde que estamos metidos en esta aventura de la tregua, vamos a Morazán. Siempre cuando fuimos a Ciudad Barrios, pasamos cerca de Morazán. Vimos el Cacahuatique del otro lado, y siempre hablamos de nuestras matadoras subidas a este cerro, pero nunca nos desviamos a Perquín, Jocoaitique o Meanguera. Tal vez hubiera sido bueno hacerlo y hablar con los compas desde el principio.

Llegamos a Perquín. Nos están esperando Nasser, Licho y Marisol. No han firmado aquella carta —bueno, nadie la ha firmado con su nombre—, pero sabemos que Licho y Nasser, dos de los principales los comandantes de campo de la guerrilla de Morazán, comparten la crítica a la tregua y a nosotros. De Marisol, que fue miembro de la dirección nacional del ERP,  no sabemos qué piensa. 


Nasser y Licho, dos de los jefes militares del ERP, oriundos de Morazán


Nos reciben como siempre, con abrazos, jodarria, cerveza, ron, anécdotas recontadas. Como queriendo reafirmarnos mutuamente: Somos compañeros, somos hermanos, compartimos tanto. “¿Se recuerdan cuando en Yoloaiquín el helicóptero agarró a Paolo con el culo al aire y casi lo mataron cagando?”, dice Licho. “Paolo, te recordás cuando a Licho lo pusimos a verga en aquel hostal El Gigante, y no podía manejar y chocó su carro contra la pared, ¿Cuándo fue esto, en 1995?”, dice Camilo. “Se recuerdan cuando Paolo se cayó en aquella quebrada botando las ollas a la Mila, y casi nos matan por el escándalo que hizo..”, etc. La jodarria de siempre.

Pero algo más está en el aire, algo que nadie quería tocar. Luego de vaciar la botella de flor de caña, Nasser dice: “Vamos a mi casa en el río. Tengo cerveza y ron ahí, y se quedan a dormir. Mañana se bañan en la cascada.”


Nasser, en frente de su cascada. San Fernando, Morazán


Vamos a San Fernando, a la cascada de Cañaverales, donde Nasser se ha construido una casa en los terrenos de su familia. A Nasser le ha ido bien después de la guerra. Estudió derecho, se graduó, trabajó de abogado, y ahora para la Corte Suprema de Justicia, en seguridad y traslados de reos. A Licho, el segundo de Jonás al mando de las fuerzas del ERP en Morazán, le ha ido no tan bien. Jonás le ha dado trabajo en Protección Civil, además ha hecho negocios, pero todos le salieron mal. Bebe demasiado.

Sentados afuera de la casa, escuchando la caída de agua en el río, abro una cerveza y digo: “Vaya, hablemos. Venimos aquí para hablar con ustedes de la tregua, de la acusación contra Camilo y Raúl, y cómo les podemos respaldar.” Quería agregar que también hablemos de los operativos de limpieza social que ha habido aquí en la zona, y del hecho que aquí no puede pasar nada de esto sin que ellos, como exjefes militares y políticos de la zona, estén metidos o por lo menos sepan lo que está pasando. No lo digo, me quedo callado.

Muy rápido, la discusión se vuelve fea. Nasser y Licho, ya algo tomados, comienzan a hablar peste de Raúl. Lo acusan de haber metido a Camilo en este lío, aprovechándose de él. Camilo, siempre tan tranquilo, se enoja: “No me insulten. A mí nadie me mete donde no quiero estar. Y dejemos clara una cosa: Raúl es mi hermano, y Paolo y yo nos metimos en esto por convicción y porque le tenemos confianza al Negro.”

Ellos mismos comienzan a hablar del problema que hubo aquí, en el Norte de Morazán. “En la Segundo Montes hubo unos cipotes que comenzaron a joder. Jalaron a unos mareros hijueputas de San Miguel. Los compas les dijeron que se calmaran, que aquí no íbamos a tolerar maras, pero al fin había que tomar medidas. ¿Ustedes creen que hicimos la guerra para que luego se nos metan locos y criminales? Aquí no. Y ustedes negociando con ellos a saber qué cosa...”

“Y yo no hice la guerra para que luego armemos escuadrones de la muerte,” dice Camilo. 

Marisol se mete para calmar el clima. “Discutamos esto políticamente,” comienza, todavía la política mesurada y analítica que conocimos durante la guerra, como miembro de la comandancia general del ERP y como responsable del trabajo político en la zona. Para mi sorpresa, Marisol hace un análisis de la tregua como necesidad y oportunidad histórica. “Nadie lo quiere escuchar, pero el país necesita unos segundos acuerdos de paz, esta vez para poner fin a una guerra social que se expresa en las maras...” Wow, no lo hubiera podido explicar mejor. “Además, les debemos solidaridad a ellos. Arriesgaron todo para resolver un problema,” concluye. Nasser y Licho no están muy convencidos, pero por lo menos Marisol los puso a pensar. 


Marisol Galindo


“Pero tengo que decir una cosa: Aquí no hubo escuadrón de la muerte, ¿cómo van a pensar? Los compas hicieron autodefensa de la comunidad, y tenían todo el derecho de hacerlo. Aquí mandamos nosotros y no unos mareros,” dice Nasser, con tono de resentido. Nos vamos a las hamacas a dormir. En la mañana nos quita el agua de la cascada la goma, no sólo del guaro, también de los encontronazos de la discusión...

En el viaje de regreso ambos estamos sin muchas ganas de hablar, algo tristes. Al fin Camilo dice: “Puta, algo se rompió, algo que yo pensaba que duraba toda la vida...” 

“Esperáte, ellos no son enemigos, Camilo. Sólo tienen experiencias y opiniones diferentes.” 

“Pero tampoco podemos contar con ellos. Ya no, y esto, para mí, es difícil de aceptar.”

A mí también me queda un mal sabor de este reencuentro. Pero por otra parte, en Morazán también están Marisol, Rogelio, Sebastián el Torogoz y muchos otros que entienden lo que estamos haciendo.



Capítulo 24:  El video del FMLN

 

El video que los pandilleros grabaron de su reunión con el FMLN


El último día de octubre de 2016, al fin sale publicado el video de la reunión de las pandillas con Benito Lara y Arístides Valencia, en la campaña presidencial del 2013/14. Ahora ambos son ministros del actual gobierno y sostenes de la guerra ‘antiterrorista’ contra las maras. Benito es ministro de Seguridad, Arístides de Gobernación. No sé cómo y de quién El Faro al fin consiguió las grabaciones que yo nunca pude conseguir en el 2014. Los periodistas no hablamos de nuestras fuentes, mucho menos en casos tan delicados. Y yo ya no tengo el tipo de contacto con los pandilleros de ‘el comité’ que me permita preguntarles este tipo de cosas. Si es que todavía funciona el tal comité. Mando un escueto “Felicidades” al WhatsApp del Diplomático. Pero esta vez, no me contesta.


Benito Lara (izq.) y Arístides Valencia, quienes se reunieron con las
pandillas para negociar apoyo al FMLN en la elección presidencial del 2014.
Luego Lara se convirtió en ministro de Seguridad y Valencia en 
ministro de Gobernación en el gobierno de Sánchez Cerén.


Esta revelación en El Faro es un bombazo para el Frente y el gobierno. No es que alguien haya dudado que negociaron un pacto electoral con las pandillas para ganar en el 2014, pero escucharlo a voz viva es otra cosa. 

Los últimos meses las cosas se han desarrollado muy rápido. En julio, en medio de un mega operativo contra la MS llamado eufóricamente ‘Jaque’, fue arrestado Piwa y presentado por la fiscalía como ‘el cerebro de finanzas y negocios de la MS13’. Con él cayeron docenas de cabecillas, pandilleros, colaboradores, casas, negocios, vehículos, hasta hoteles. 

Antes ya habían arrestado a Nalo de Las Palmas, el hombre de más jerarquía de la 18-Revolucionarios fuera de los penales. Dos bajas más de ‘el comité’, luego de que anteriormente habían muertos a balazos Donkey, el otro delegado de los Revolucionarios, y Chepe Cejas del Sur. Quedan sólo dos de los seis que tenían experiencia en estas tareas de la negociación interna, con la mediación, y con el trato con los mediadores. Y uno de los dos, Cisco, está fuera de circulación. No sabemos si está preso, muerto o escondido. Se terminó ‘el comité’.

De Nalo ya sabemos que lo han ‘volteado’ y convertido en testigo criteriado. En la acusación de la fiscalía en el ‘caso tregua’ ya aparecieron sus declaraciones como prueba principal contra Camilo y Raúl. 

Ahora comienzan a correr, al interior de las pandillas, rumores sobre Piwa. Algunos dicen que también hizo un su deal con la fiscalía para ganar inmunidad y protección. Incluso, algunos especulan que él, antes de su captura, entregó la información que llevó al operativo Jaque. ¿Quién sabe?


Piwa luego de su detención


Un mes después del operativo ‘Jaque’ y de la captura de Piwa, suena otro bombazo: El arresto del ex fiscal general Luis Martínez. Parece chiste, pero es un asunto muy serio, tanto para él como para su supuesta víctima, quien no era otro que el padre Toño. La fiscalía de Luis Martínez mandó a arrestar a Toño en julio del 2014, acusándolo de colaboración con la pandilla 18-Sur, en concreto de haberles facilitado teléfonos celulares en el penal Cojutepeque. Luis Martínez consiguió una orden judicial de intervenir la comunicación telefónica del padre, y ahí captaron conversaciones que confirmaron la sospecha que introducía teléfonos al penal. Estas eran las pruebas que la fiscalía presentó para la orden de arresto. Lo que no podía Martínez presentar al juez fueron las conversaciones que revelaban relaciones íntimas del padre con un pandillero, que también quedaron grabadas. La ley obligaba a la fiscalía no solo a no usarlas, sino a destruirlas, ya que no tenían relación con la investigación que llevó al juez a autorizar la intervención telefónica. Sin embargo, Luis Martínez no mandó a destruir estas ‘pruebas’, sino las usó para chantajear al padre a confesar su delito. 


Luis Martínez esposado


Esta extorsión, ahora que ya no es el poderoso fiscal general, lo lleva a ser arrestado. Con mediación de la Iglesia Católica, la fiscalía retiró las acusaciones contra el padre Toño, quien a su vez se comprometió a renunciar a su parroquia, salir del país y nunca más entrar en contacto con ningún pandillero. Salieron jodidos los dos, el ex fiscal y el ex cura.  “Dos enemigos menos,” dice Raúl. Yo le señalo: “Tome en cuenta que Luis Martínez siempre arremetió contra nosotros, pero en los medios. Nunca procedió y acusó a nadie en relación con la tregua. Creo que tuvo el caso en la gaveta, como palo para amenazar, pero nunca tuvo la intención de judicializar. Tuvo que llegar Douglas Meléndez, que necesitaba mostrar que no era tan inútil como parecía, para presentar el caso contra la tregua...”


Los fiscales generales: Luis Martínez y su sucesor Douglas Meléndez


Quedamos con la incertidumbre de si algún día, antes de que el ‘caso tregua’ llegara a vista pública, Douglas Meléndez iba sacar del sombrero a Piwa junto a Nalo. Porque muchas pruebas no se sostenían para condenar a Raúl, Camilo, Nelson Rauda y los demás acusados. Toda la acusación está basada en testimonios de un pandillero criteriado. O tal vez, de dos... 




Siguiente entrega,  jueves 17 de abril:

Capítulo 25: El Diplomático




Capítulo 26: El 'caso tregua'




 

sábado, 12 de abril de 2025

This Is Why Dictatorships Fail / Es por esto que fallan las dictaduras. De Ann Applebaum

 

Ann Applebaum es una historiadora estadounidense, especializada en la génesis de regímenes autocráticos. Su último libro Atocracy.Inc / Autocracia.SA ha sido en bestseller. Applebaum escribe en Atlantic y vive en Polonia con su esposo, quien es canciller de este país.

[Vea abajo la traducción al español de este artículo.]



This Is Why Dictatorships Fail

The authors of the Constitution separated powers for a reason.

By Anne Applebaum

 

APRIL 10, 2025, 11:05 AM ET / ATLANTIC


He blinked. But we don’t really know why.

Whether it was the stock market cascading downward, investors fleeing from U.S. Treasury bonds, Republican donors jamming the White House phones, or even fears for his own portfolio, President Donald Trump decided yesterday afternoon to lift, temporarily, most of his arbitrary tariffs. This was his personal decision. His “instinct,” as he put it. His whim. And his decision, instinct, or whim could bring the tariffs back again.

The Republicans who lead Congress have refused to use the power of the legislative branch to stop him or moderate him, in this or almost any other matter. The Cabinet is composed of sycophants and loyalists who are willing to defend contradictory policies, even if doing so makes them look like fools. The courts haven’t decisively intervened yet either. No one, apparently, is willing to prevent a single man from destroying the world economy, wrecking financial markets, forcing this country and other countries into recession if that’s what he feels like doing when he gets up tomorrow morning.

This is what arbitrary, absolute power looks like. And this is why the men who wrote the Constitution never wanted anyone to have it. In that famously hot, stuffy room in Philadelphia, windows closed for the sake of secrecy, they sweated and argued about how to limit the powers of the American executive. They arrived at the idea of dividing power between different branches of government. As James Madison wrote in “Federalist No. 47”: “The accumulation of all powers, legislative, executive, and judiciary in the same hands … may justly be pronounced the very definition of tyranny.

More than two centuries later, the system created by that first Constitutional Congress has comprehensively failed. The people and institutions that are supposed to check executive power are refusing to restrain this president. We now have a de facto tyrant who thinks he can bend reality to his will without taking any facts or any evidence into consideration, and without listening to any contrary views. And although the economic damage he has caused is easier to measure, he has inflicted the same level of harm to scientific research, to civil liberties, to health care, and to the civil service.

From this wasteful and destructive incident, one useful lesson can be drawn. In recent years, many people who live in democracies have become frustrated by their political systems, by the endless wrangling, the difficulty of creating compromise, the slow pace of decisions. Just as in the first half of the 20th century, would-be authoritarians have begun arguing that we would all be better off without these institutions. “The truth is that men are tired of liberty,” said Mussolini. Lenin spoke with scorn about the failings of so-called bourgeois democracy. In the United States, a brand-new school of techno-authoritarian thinkers find our political system inefficient and want to replace it with a “national CEO,” a dictator by a different name.

But in the past 48 hours, Donald Trump has just given us a pitch-perfect demonstration of why legislatures are necessary, why checks and balances are useful, and why most one-man dictatorships become poor and corrupt. If the Republican Party does not return Congress to the role it is meant to play and the courts don’t constrain the president, this cycle of destruction will continue and everyone on the planet will pay the price.

* * *



Es por esto que fracasan las dictaduras

Los autores de la Constitución separaron los poderes por una razón


Por Anne Applebaum

10 de abril de 2025, 11:05 a. m. ET / Atlantic


Parpadeó. Pero en realidad no sabemos por qué.

Ya sea por el colapso del mercado de valores, los inversionistas huyendo de los bonos del Tesoro de EE. UU., los donantes republicanos saturando las líneas telefónicas de la Casa Blanca, o incluso por miedo a su propio portafolio, el presidente Donald Trump decidió ayer por la tarde levantar, temporalmente, la mayoría de sus aranceles arbitrarios. Fue una decisión personal. Su “instinto”, como él lo expresó. Su capricho. Y su decisión, instinto o capricho podría hacer que los aranceles regresen de nuevo.


Los republicanos que lideran el Congreso se han negado a usar el poder del poder legislativo para detenerlo o moderarlo, en este o en casi cualquier otro asunto. El gabinete está compuesto por aduladores y leales dispuestos a defender políticas contradictorias, incluso si al hacerlo quedan como tontos. Los tribunales tampoco han intervenido de manera decisiva. Al parecer, nadie está dispuesto a evitar que un solo hombre destruya la economía mundial, arruine los mercados financieros, y lleve a este país y a otros a una recesión si eso es lo que decide hacer mañana por la mañana.


Así es como se ve el poder absoluto y arbitrario. Y por eso los hombres que redactaron la Constitución nunca quisieron que nadie lo tuviera. En aquella famosa sala calurosa y sofocante de Filadelfia, con las ventanas cerradas por motivos de confidencialidad, sudaron y debatieron sobre cómo limitar los poderes del poder ejecutivo estadounidense. Llegaron a la idea de dividir el poder entre distintas ramas del gobierno. Como escribió James Madison en el “Federalista N.º 47”: “La acumulación de todos los poderes, legislativo, ejecutivo y judicial, en las mismas manos… puede con razón ser considerada la definición misma de tiranía.”


Más de dos siglos después, el sistema creado por ese primer Congreso Constitucional ha fracasado de forma total. Las personas e instituciones que deberían controlar el poder ejecutivo se niegan a frenar a este presidente. Ahora tenemos un tirano de facto que cree que puede doblar la realidad a su voluntad sin tener en cuenta hechos ni evidencia alguna, y sin escuchar opiniones contrarias. Y aunque los daños económicos que ha causado son más fáciles de medir, ha infligido un nivel similar de daño a la investigación científica, las libertades civiles, el sistema de salud y el servicio público.


De este incidente tan destructivo y costoso se puede extraer una lección útil. En los últimos años, muchas personas que viven en democracias se han sentido frustradas con sus sistemas políticos, por los interminables conflictos, la dificultad de llegar a compromisos y el ritmo lento de las decisiones. Tal como ocurrió en la primera mitad del siglo XX, aspirantes a autoritarios han comenzado a argumentar que estaríamos mejor sin estas instituciones. “La verdad es que los hombres están cansados de la libertad”, dijo Mussolini. Lenin hablaba con desprecio de los fallos de la llamada democracia burguesa. En Estados Unidos, una nueva escuela de pensadores tecno-autoritarios considera ineficiente nuestro sistema político y quiere reemplazarlo con un “CEO nacional”, un dictador con otro nombre.


Pero en las últimas 48 horas, Donald Trump nos ha ofrecido una demostración perfecta de por qué los poderes legislativos son necesarios, por qué los pesos y contrapesos son útiles, y por qué la mayoría de las dictaduras unipersonales se vuelven pobres y corruptas. Si el Partido Republicano no devuelve al Congreso el rol que está destinado a desempeñar, y si los tribunales no limitan al presidente, este ciclo de destrucción continuará y todos en el planeta pagarán el precio.

miércoles, 9 de abril de 2025

Carta: Extradiciones y deportaciones - lo que está en juego para Bukele en los líos de Trump. De Paolo Luers (capítulos 21 y 22 de DOBLE CARA / LIBRO II)

 

"De la batalla legal y política que ha desatado Trump con los vuelos al CECOT y su intento de doblegar la justicia, también depende la suerte de Bukele: O gozará de impunidad bajo un Trump que nadie puede detener ni juzgar - o caerá con él."

En la voz del autor: 

Extradition-y-deportaciones.mp3



Publicado en MAS!  y DIARIO DE HOY, sábado 12 abril 2025

 

Durante años, el gobierno en Washington exigió a El Salvador la extradición de los líderes de la MS para enjuiciarlos por delitos cometidos en Estados Unidos. El gobierno de Nayib Bukele siempre se negó a hacerlo. Tenía razones: Una vez enfrentando la justicia estadounidense y las amenazas de severas condenas, estos hombres podían acceder a colaborar con los fiscales en su investigación ya avanzada del pacto negociado de Nayib Bukele con las pandillas. Pacto que aseguró a Bukele a ganar las elecciones presidenciales del 2019 y la abrumadora mayoría parlamentaria en el 2021. Pacto que le permitió bajar sustancialmente la tasa de homicidios y que concedió múltiples beneficios penitenciarias a las cúpulas de las pandillas. 


Por tanto, por más que la administración Biden presionó a Bukele a extraditar a los líderes de la MS, se negó. Su gobierno incluso llegó al colmo de ofrecer 1 millón de dólares al cartel de Sinaloa si les entregaba al Crook, uno de los dirigentes de la MS, antes de que los encontraran los investigadores del FBI. El Crook (Elmer Canales Rivera) estaba escondido en México, luego de que el gobierno de Bukele, en una fase anterior del pacto con las pandillas, lo había liberado y le había facilitado la salida del país. Al fin, el FBI lo detuvo en México y lo llevó a Estados Unidos a disposición de una corte de Nueva York. 


Todo esto cambió, cuando Trump regresó al gobierno. Ya nadie exige a Bukele a que extradite a los dirigentes de la MS que están cumpliendo sus penas en Zacatraz. Por lo contrario: la nueva cúpula que Trump instaló en el Departamento de Justicia comienza a desmantelar el juicio contra la MS en Nueva York, antes de que cause daño a Bukele. A uno de los cinco acusados en poder de las autoridades estadounidenses, el Greñas (César Humberto López Larios), en una acción nocturna secreta, lo montaron en el mismo avión con los supuestos criminales venezolanos. Junto con ellos, terminó en el CECOT. 

 

Cuando esto se hizo público, porque alguien reconoció al Greñas en el video que mostró el recibimiento de los deportados en el CECOT, cuando le pelaron el cabello, se filtró la noticia que el Departamento de Justicia había revocado la acusación contra él. Parece que sobre esto existe un pleito con el juez de Nueva York, Steven Tiscione, quién días después, el 1 de abril, confirmó que la acusación contra Greñas seguía vigente, una acusación que busca la pena de muerte.

 

Pocos días después, se retiraron los cargos contra Henry Josué Villatoro Santos, quien a finales de marzo fue detenido y acusado de ser el responsable de la MS en toda la costa este de Estados Unidos. La secretaria de Justicia, Pan Bondi; el director del FBI Cash Patel; el gobernador de Virginia, Glenn Youngkin, y otros líderes de las fuerzas del orden realizaron una conferencia de prensa para anunciar y celebrar su arresto. Pero dos semanas después, el Departamento de Justicia de Estados Unidos decidió retirar el caso penal contra el detenido, diciendo que se planea deportarlo a El Salvador en lugar de procesarlo en Estados Unidos.

 

Este insólito hecho cae precisamente en la coyuntura en la cual en Estados Unidos estalló una gran controversia legal y política sobre la deportación ilegal de venezolanos y salvadoreños a El Salvador y su encarcelamiento en el CECOT. Obviamente para los planes anti inmigrantes de Trump el deal negociado con Bukele de usar el CECOT para deshacerse de migrantes, con el pretexto de tildarlos de criminales, tiene mucho más importancia que el juicio de Nueva York contra los líderes de la MS. Sobre todo, cuando este juicio puede comprometer a Bukele, justo cuando éste se ha convertido en aliado útil para Trump.

 

Hay que entender una cosa: La política de Trump contra los migrantes nada tiene que ver con justicia, sino con la necesidad de mostrar mano dura. Cuando la justicia se convierte en obstáculo, se le corta las alas, haciendo uso del control partidario que esta Casa Blanca ejerce sobre el Departamento de Justicia que dirige a los fiscales federales. 

 

Habrá que ver si los jueces involucrados en este asunto -tanto el que preside el juicio contra la MS, como los que tratan de detener las deportaciones bajo la obscura Ley de Enemigos Extranjeros, dictada en el Siglo 18 para situaciones de guerra- se mantienen firmes y si para esto gocen de apoyo de la Corte Suprema. De esto depende tanto el Estado de Derecho en los Estados Unidos como la suerte de miles de migrantes bajo el riesgo de terminar, inocentes o no, en el CECOT, que en la prensa internacional ya es tildado “el gulag salvadoreño’, en asociación a los campos de concentración de Stalin - o, de manera más tropical, “el infierno en El Salvador”.

 

De la batalla legal y política que ha desatado Trump con los vuelos al CECOT y su intento de doblegar la justicia, también depende la suerte de Bukele: O gozará de impunidad bajo un Trump que nadie puede detener ni juzgar - o caerá con él.

 

Es en este contexto que hay situar la visita de Bukele a la Casa Blanca. 


Saludos, 





* * *

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Ahora puede leer el libro, en tres entregas cada semana, en este blog. Disfrútenlo.




Para Raúl Mijango.

Como todo prisionero político, para sobrevivir 

pasó escribiendo, siempre y cuando no le nieguen

papel y lápiz. 

Si existiera su libro, quizás no hubiera escrito 

esta segunda parte del mío. 

Raúl murió el 28 de agosto 2023, 

luego de que durante años de encarcelamiento 

le negaron la debida atención médica.



Capítulo 21: El Video


11 de marzo del 2016. Recibo una llamada del Chele Martínez del Faro: “En una hora subiremos el video de la reunión del 2014 de Ruano y Neto Muyshondt con las pandillas. Todos sabíamos que existía, y al fin lo conseguimos.” Esto va a ser un bombazo. El Frente y su gobierno van a celebrar. Ellos mostraron más capacidad para comprar el apoyo de las pandillas, e irónicamente los perdedores van a pagar la cuenta. 


Toma del video que los pandilleros tomaron de su
reunión con Ruano y Muyshondt

“¿Y el video de la reunión con nuestro distinguido ministro de Seguridad, el comandante Benito Lara?”, pregunto. 

“Me dicen que no existe, que es invento tuyo.” 

“¡Invento, my ass! Están jugando chuco, y yo sé quién es. El video te lo pasó Piwa, ¿verdad?” 

“Vos sabés que no te puedo decir quién nos lo dio. Me extraña, colega, las fuentes...”

Hablo a Raúl. Ya le avisaron también. Me dice: “Siempre el Faro con sus mierdas.”

“Calmate”, le digo, “no es culpa de ellos, es su oficio publicar este tipo de cosas. Cualquier medio lo haría. El que la cagó es Piwa. Siempre les dijimos: Si quieren soltar este vergazo, que filtren ambos videos, el del Frente y el de Arena. Así sería un golpe contra la perversión de las elecciones.” 

“A veces tenés razón. A ver si puedo armar una reunión con ellos...”

 

La reunión tiene lugar unos días después, cuando el polvo más o menos se ha asentado. Pero cada terremoto tiene su aftershock: La opinión pública se vuelve contra Arena, contra la tregua y contra nosotros. Cómo si las negociaciones con los partidos hubieran sido una consecuencia de la tregua —y no su traición. Igual que la racha de violencia: La pintan como resultado de la tregua y no como fruto de la estupidez del gobierno de Sánchez Cerén. No tengo idea si el viejo comandante realmente ha tomado decisiones, lo dudo. Son la gente de su confianza: Manuel Melgar, Eduardo Linares, Mauricio Landaverde —y Benito Lara, quien se ha unido a este grupo de la FPL, que domina la política de seguridad. Ya no sé cómo contrarrestar esta contraofensiva política y mediática.


Los 4 operadores de Seguridad del FMLN:
De izquierda a derecha, Manuel Melgar, ministro de Seguridad de Funes,
reemplazado en 2011 por el general Munguía P, regresando en el 2014 a la cúpula como secretario privado del presidente Salvador S
ánchez Cerén.
Eduardo Linares, director de Inteligencia del gobierno Funes de 2009 al 2011, pero 
es parte del círculo interno del siguiente presidente, Sánchez Cerén.
Mauricio Ramírez Landaverde, director general de la PNC de 2014 al 2016 y ministro de Seguridad de 2016 a 2019.
Benito Lara, ministro de Seguridad entre junio 2014 y enero 2016.


Entro a la reunión en el local de la colonia San Benito, con un poco de atraso, cuando la cosa ya se ha calentado.  Desde la entrada escucho las voces agitadas de Raúl y de Piwa. Me siento en una silla desocupada entre Cejas y El Diplomático. “Te la reservamos, Chele”, me susurra el último. ¿Y esto, por qué?, me pregunto. ¿Me quieren proporcionar escolta – o quieren mostrar del lado de quién están. En frente tengo a Piwa. Ya sé que esta discusión será fea.


El Piwa

Raúl me da la palabra. Suave, me digo, y comienzo así: “Bueno, Piwa, ¿cuándo vas a soltar las grabaciones con Benito Lara, quien hoy es ministro de Seguridad y el comandante en jefe de esta guerra que desataron contra ustedes, y con el ministro Arístides Valencia, a quién nombraron ministro de Gobernación? Y como me contó un pajarito, también con José Luis Merino, quien no es nada, pero ejerce el poder real? ¿Cuándo, Piwa?” 

“¿Y para qué? ¿Qué te importa?” 

“Para emparejar la cancha. Para denunciar que ambos la cagaron. Para que no se repita esta mierda. Por eso es necesario que se publiquen todos los videos. El Faro está listo para difundirlos.”

No llegamos a nada. Piwa se niega. Yo digo que así no puedo seguir trabajando con ellos. Acuso al Piwa de ser infiltrado del Frente. Se levanta y se va. Cuando los demás se han ido, el único que queda es Cejas. Me dice: “No armés este pleito con este hijueputa. El video te lo voy a dar yo. Tengo copia de la reunión con Benito Lara y Arístides. Del mentado Merino no sé nada. No lo ubico. Te la hago llegar en unos 3 o 4 días. Esté pendiente. Luego vos hacés con esta mierda lo que querrás —y se acabó la rabia.”


Chepe Cejas, vocero de los Sureños,
asesinado en marzo 2016



Tres días después me entero que a Chepe, El Cejas de Soyapango, lo han matado a tiros a media cuadra de la exembajada gringa. Nunca nadie me entregó el video. Bueno, aquí termina mi rol de mediador. Así no puedo seguir, lo siento.

 



Capítulo 22:  Capturan a Raúl y Camilo

 

Llego a la casa como a las 9 de la mañana. Este martes 3 de mayo 2016 estuve con Raúl en el programa de Pencho&Aída. Nos preguntaron por los ‘municipios santuarios’ y explicamos que este es un nombre que maliciosamente han dado en los medios a los “municipios sin violencia”, los cuales anunciaron los doce alcaldes. ‘Santuario’ suena a refugio, a inmunidad. Pencho nos preguntó si en todo este asunto tan controversial de la tregua no tenemos miedo. Raúl como siempre cuando alguien pregunta esto, se rio y dijo: “Nosotros venimos de donde asustan. Uno siempre tiene miedo, pero esto no es razón para no hacer lo necesario.” 


En Pencho y Aida. Foto: cortesía de El Diario de Hoy

Pregunté a Pencho: “¿Miedo de quién? ¿De los mareros?  ¿Del gobierno? De la policía? ¿O de la fiscalía?” 

“De todos ellos. ¿Acaso no es peligroso lo que están haciendo? ¿Por ejemplo, no corren peligro que el fiscal, que siempre dice que la tregua era ilegal, proceda contra ustedes?” Raúl y yo intercambiamos miradas. Con una su mueca me indica que conteste yo. “No creo que se atreva,” contesto. A veces hay que hacerse el valiente, por lo menos hablando en radio y en vivo... Douglas Meléndez, quien asumió como Fiscal General a principio del año, luego de que la oposición logró hacer fracasar el intento de reelección de Luis Martínez, ha asumido el mismo discurso agresivo y amenazante contra todo lo relacionado con la tregua. Pero así ha hablado Luis Martínez durante los tres años que duró, y al final nunca procedió. Y a este Douglas lo veo más débil y menos listo que el gran macho Luis Martínez. No se va a atrever a hacerle un juicio contra la tregua, o sea a una política pública de un gobierno. 

Nos despedimos en el parqueo de la Torre Futura. “Voy a ir a atender la tienda, porque la Negra tiene que salir. Nos vemos a las 4 en la Fundación,” me dice Raúl. Llego a la casa y Daniela tiene listo uno de sus deliciosos desayunos rancheros. Este día nos hemos tomado libre de La Ventana. Necesitamos un día relajado. Suena el teléfono. Es Camilo: “Andate a la mierda de tu casa, ¡pero ya! Acaban de detener a Raúl en frente de su tienda, y ya vienen por mí. Salgan de la casa, ¡pero ya! Y no se te ocurra hablarme a mi celular...” Cuelga y me deja paralizado.



Raúl Mijango detenido



Pensaba que estábamos preparados. Ya llenamos cajas con papeles que no pueden quedar en la casa. Pero uno nunca está realmente preparado para huir tan de repente, ni psicológica ni logísticamente. ¿Vienen por mí, o es paranoia? ¿Qué más tengo que llevar? ¿Si vienen a la casa y no me encuentran, van a forzar la entrada y catear la casa? Si ya detienen a Raúl y a Camilo, lo más lógico es que yo también estoy en la lista. A saber a quiénes más. ¿Tiene sentido irse o es mejor enfrentar lo que viene? Tomamos una decisión práctica: Vamos ahora a la casa de una amiga en Mejicanos, para que no nos agarren en curva. Luego vemos cómo está la situación y decidimos cómo seguir. Yo no quiero huir. Mi vida es aquí, y si hay que enfrentar un juicio, hay que hacerlo. Todavía hay justicia en el país. 

Metemos las cajas en el carro, agarramos al chucho, mi mochila con mi laptop y nuestros pasaportes —y nos vamos. Llegando a la otra casa, comienzo a hacer llamadas. Al vigilante de nuestro pasaje le pregunto algo tonto, relacionado con su familia. Si han venido por mí, me lo va a decir. Nada. Hablo a un amigo, que es oficial de la PNC y le pregunto si sabe algo de Camilo. “Ya te lo voy a averiguar,” dice. A los 5 minutos llama y dice que se lo llevaron, pero nadie sabe adónde. Que también se llevaron a Will, el otro inspector de la PNC, que ha sido nuestro enlace de inteligencia policial, y a su jefe, un comisario, que está al cargo de Inteligencia Policial. Fueron también por Nelson Rauda, el director general de Centros Penales, el inspector general de esta institución y varios directores de penales, entre ellos los de Ciudad Barrios, Quezaltepeque y Cojutepeque. Conozco a todos ellos como funcionarios corrector, que no cometieron otro pecado que hacer su trabajo en la policía y los penales de manera decente y humana – además en el marco de una política pública autorizada por el mismo presidente de la República.

Comienzan a entrarme llamadas de periodistas. Los del Faro quieren saber si estoy bien. También mis colegas del Diario de Hoy. Vuelvo a hablar al vigilante. Le parece rara tanta habladera, pero no dice nada. Qué bueno, a esta altura ya tendrían que haber llegado. Todas las detenciones parecen bien sincronizadas. Parece que no vienen por mí. En la tele ya salen informaciones de última hora. Hay imágenes de Mijango, cuando lo meten en una patrulla, enfrente de la tienda de su mujer. Cuando capturan a alguien, a quien la fiscalía realmente quiere joder, siempre llevan consigo un camarógrafo, pienso, la cosa va en serio. 

Camilo (Roberto Castillo), Nelson Rauda y Raúl Mijango, 
al ser presentado ante el juez


La fiscalía ya dio a los medios la lista de detenidos y los cargos contra ellos: “Asociación ilícita’, la acusación de hule, e ‘introducción de objetos prohibidos a los penales’. Mi nombre no sale. Mencionan a unas 20 personas, incluyendo miembros del equipo técnico y psicológico de Zacatraz, que evalúa a los internos. No los conozco. No dicen de qué los van a acusar, pero tiene que estar relacionado con el traslado de los ranfleros, de Zacatraz a otros Penales, en marzo 2012. La fiscalía va con todo. Me cuesta creer que no vienen por mi.

Decidimos pasar la noche en la casa de nuestra amiga y evaluar mañana si regresamos a la casa. Los noticieros siguen hablando del “operativo contra la tregua”. Un reportero pregunta a una fiscal: “¿Paolo Lüers está incluido en la lista de detenidos?” La mujer dice: “No puedo dar más información.” Gracias, corazón, muy amable por mantenernos en la incertidumbre.

En la mañana, hablo al otro vigilante de mi colonia, que entró a su turno en la mañana. “Estoy esperando un encargo que me van a dejar en la casa. Estamos fuera de la ciudad. ¿Vino alguien?” 

“No, nadie, don Paolo.” 

Okay, si llegan, diles que estamos afuera y no sabemos cuándo regresaremos. ¿Me puedes avisar a este teléfono?” Al no recibir ninguna llamada, decidimos dejar las cosas en Mejicanos, incluso mi computadora, e irnos a casa. Daniela propone ir ella sola para ver si no hay moros en la costa. No me gusta mandarla sola. “Vámonos los dos de un solo.”

Llegamos a la casa. Nadie ha llegado, nadie ha preguntado por mí. Seguimos ‘limpiando’ mis archivos de todo tipo de documento relacionado con la tregua. Llevo otra caja a la casa en Mejicanos. Aparecen en nuestra casa Rosa, la esposa de Camilo, y las dos hijas. Las muchachas lloran cuando me abrazan: “Tío Paolo, ¿qué vamos a hacer?” Rosi llama a la esposa de Will, el otro oficial detenido, al rato llega con su hija. Consejo de guerra. Primera cosa: reunir toda la información. Averiguamos adónde están. A Raúl lo llevaron a las bartolinas de la DAN, donde tenían preso a el expresidente Paco Flores. Huele a tratamiento especial. A Camilo y a Will los llevaron a la División Fronteras de la PNC. Un colega de ellos nos confirma que están bien ahí, que los ha visto. Segundo: Necesitamos defensores. Raúl ya tiene uno, algún chero de él de Oriente. Un sobrino de Camilo, a quien las niñas contactan, ofrece dinero para contratar a un abogado para que represente a Camilo. Las niñas lloran, tienen miedo. Son hijas de un policía, bien protegidas, y de repente se sienten desprotegidas y temen por su papá. “Tío,” me dice la menor: “¿Verdad que lo podemos sacar de ahí y que no lo van a llevar a la cárcel?” 

“No te preocupés, lo sacaremos. Sólo tiene que aguantar 72 horas y en la audiencia lo sacamos.” Ambas me abrazan. Yo pienso: Ojala no las voy a defraudar a estas niñas...



 Siguiente entrega, martes 15 abril:

Capítulo 23: El pleito con los compas del ERP

Capítulo 24: El video del FMLN