Estaba decidido de no dedicarte carta. No escribo a animales. Además, tu caso ya está en la boca de todos. De repente, en un país plagado de violencia, surge como símbolo de todas la víctimas… ¡un hipopótamo! Sólo faltaba especular si te asesinó la MS o la 18 u otro sospechoso de. ¿Para qué opinar de esto, si ya toda pendejada estaba dicha?
Pero de repente, poco a poco, detrás de tantas cortinas de humo, aparece otra imagen diferente al Gustavito como símbolo de la violencia: vos como símbolo de un Estado fallido. Bueno, más bien de un sistema de gobierno fallido por absurdo. Nunca vamos a conocer la causa concreta de tu muerte, ya que la Secretaría de Cultura de la Presidencia, en una ataque inusual de diligencia, se deshizo de tu cuerpo maltratado (el famoso corpus delicti), antes de que se pudiera determinar lo que te había pasado. Muy conveniente. Nunca conoceremos la acumulación de negligencia e incompetencia está detrás de tu miserable vida y muerte – sea cual sea la causa forense de tu fallecimiento: enfermedad fatal, descuido, falta de atención adecuada, depresión o vandalismo asesino.
Es absurdo confiar que sepa manejar un zoológico una Secretaría de Cultura que depende de la presidencia (o sea de una entidad política y no técnica), y que como tal ni siquiera es capaz de lidiar con los asuntos de cultura y arte. Si la alcaldía de San Salvador sería más idónea para asumir y transformar el zoológico, no sé. Pero tiene razón Bukele en decir: Así como están el zoológico y la Secretaría de Cultura, amarrados a los diseños políticos de la Presidencia, no debemos permitir que continúen.
Quizás no queda otra que cerrar el zoológico. ¿Tienen nuestros niños el derecho de tener un lugar para ver a animales exóticos? No. Hay miles de otras formas, en películas y videos y en Internet, para enseñarles como realmente viven estos animales.
Hay que cerrar la Secretaría de Cultura de la Presidencia. Fue idea loca de Funes y Vanda la creación de este monstruo, en vez de una entidad autónoma, profesional y apolítica. Y al llegar Sánchez Cerén, le pareció conveniente tener esta Secretaría al servicio de su propia locura del “buen vivir”.
Pero todo esto ya te vale, Gustavito. Saludos,
Posdata: El rediseño de MAS! me plantea el reto de regresar al formato original, con el cual las Cartas de Paolo nacieron, por cierto en MAS! Acepto con ganas el reto de plasmar el mensaje de mis cartas en 420 palabras. Menos paja, más al grano. Menos análisis, más lenguaje directo. Más disciplina, menos retórica.
(MAS!/El Diario de Hoy)