"Errado discurso del FMLN ” es el título de una reciente columna de
Claudio de la Rosa, asesor de ARENA en la Asamblea Legislativa.
Totalmente de acuerdo: El discurso del FMLN es erróneo, aunque hay que
preguntar: ¿Cuál es la novedad? Pese a que en tiempos de campaña
electoral el FMLN tiende a ocultarlo, en el fondo nunca ha renunciado a
su carácter revolucionario, sus pretensiones socialistas, su forma
partidaria leninista, y su teoría marxista. Así que la frase de Claudio
de la Rosa es correcta, pero de ninguna manera puede dar pauta a
sorpresa ni a la indignación que resulta de la sorpresa.
ARENA
tomó el contenido de los documentos aprobados por el FMLN en su
Congreso como pretexto para renunciar a la Interpartidaria. Digo
pretexto, porque entiendo que ARENA se encontraba en una situación
sumamente incómoda dentro de la tal Interpartidaria: Bajo presión de la
OEA y Naciones Unidas, ARENA había cometido el error de entrar a esta
instancia sin tener una estrategia. ARENA fue a la reunión de Ataco sin
tener claro que participar en la Interpartidaria solo tenía sentido si
se lograba convertir este foro en el mecanismo para producir los cambios
necesarios a las políticas públicas del gobierno, sobre todo en materia
de Seguridad. Entonces, el error inicial fue no insistir en que la
agenda de la Interpartidaria comenzara con un exhaustivo análisis
crítico de las políticas del gobierno.
Tal vez el FMLN, que
obviamente no está dispuesto a someter sus políticas, por más fracasadas
que sean, a un mecanismo de revisión y corrección de este tipo, se
hubiera negado. Bueno, en este caso ARENA, luego de un debate
transparente sobre este tema, habría tenido todo el derecho de decir: A
una Interpartidaria que de antemano solo sirve para avalar políticas ya
definidas no me incorporo.
Un partido de oposición tiene todo el
derecho del mundo de condicionar su entrada a un mecanismo
interpartidario de concertación. Tiene derecho de no entrar si no hay
condiciones para que la concertación sea provechosa para el país. Pero
una vez que se siente en la mesa, tiene que tener claro que levantarse y
abandonarla tiene un altísimo costo político.
Sin embargo, ARENA
no tuvo un concepto estratégico claro cuando entró a la Interpartidaria
y, por lo tanto, cayó en la emboscada de Ataco. La oposición aceptó
tácitamente el plan “El Salvador Seguro” como guión, y permitió que la
concertación no arrancara con una revisión de este plan, sino que
solamente había que buscar consenso sobre la forma más adecuada de
financiarlo. Como dicen: Solo les quedó escoger entre la forma en que
nos van a estrangular con nuevos impuestos y más endeudamiento…
Claro
que al darse cuenta de esta trampa, ARENA comenzó a sentirse sumamente
incómodo en la Interpartidaria. Y ahí cometió el segundo error: agarró
el primer pretexto para retirarse. En este sentido, los impresentables
documentos aprobados por el FMLN en su primer congreso le llegaron como
un regalo a ARENA… supuestamente.
Resulta que fue el peor
pretexto que ARENA podía escoger para corregir su error anterior de ir
a la Interpartidaria sin una estrategia clara. Lo correcto habría sido
comenzar a convertir la Interpartidaria de verdad en mesa de debate
político, pero con los puntos concretos sobre la mesa, no sobre el
carácter marxista o no democrático del FMLN . ARENA tuvo la oportunidad
de aprovechar la Interpartidaria para poner a discusión, de manera
transparente y profunda, la política de Seguridad Pública y el
equivocado uso de la fuerza represiva para confrontación letal sin
sentido estratégico; el presupuesto que no refleja prioridades ni mucho
menos focalización en el gasto público; el erróneo uso masivo de
subsidios; la falta de calidad en los sistema de educación y salud, etc.
Tal
vez esta discusión pública, aprovechando la Interpartidaria, no hubiera
llevado a acuerdos, pero sin duda, a más transparencia, a más
claridad en la sociedad civil, a mejores condiciones para construir
mayoría alrededor de propuestas claras. Y tal vez, quien sabe, en algún
momento una salida lógica y digna de la Interpartidaria, en caso de
que este mecanismo hubiera agotado su potencial.
Claro, para
sostener esta discusión, la oposición primero tiene que tener propuestas
propias claras para mejores políticas públicas - y saberlas comunicar,
con voceros creíbles y competentes. Ahí existe una deficiencia de ARENA
que explica sus errores…
Haberse salido de la Interpartidaria,
con un razonamiento que, a todas luces, es pretexto, sin ni siquiera
haber puesto a prueba este mecanismo y agotado su potencial, fue un
error más de ARENA. El tiempo para las elecciones de 2018 y 2019 corre, y
no habrá espacio para muchos errores más.