Alcaldes y políticos también son humanos y cometen errores. Así que te agarraron manejando borracho un domingo en la noche... para mi no es para armar un gran escándalo. Merece una multa, tal vez que te quiten la licencia un rato. Y ya. No es un asunto político.
Pero que el señor alcalde salga a chupar con el carro de la alcaldía y luego chocarlo, esto ya es otra cosa. Eso sí es un asunto político. ¿Qué estabas haciendo con el carro placas nacionales N3-633 en San Salvador el domingo en la noche? O más bien: ¿en qué misión oficial tuviste que echarte tantos tragos para montarte encima de un microbús y luego tratar de irte al carajo?
Entonces, ya son cuatro delitos: usar el carro de la alcaldía para ir de parranda; manejar ebrio; chocar con un microbús; y tratar de fugarse del lugar del accidente.
Y encima de todo esto, te bajaste para darle riata al motorista que te atravesó el carro para evitar que te fugaras. Ya son cinco delitos. Bastante, incluso para un alcalde macho.
Pero todo esto no era suficiente, don Fidel: tuviste que pedir que te comunicaran con el ministro de Seguridad para que intervenga a tu favor. No sé si Manuel Melgar no te contestó o si te dijo: Papito, en esta cagada tuya no me meto.
Resulta que los agentes de la PNC te hicieron el alcotest (con 192 miligramos de alcohol en la sangre) y te llevaron preso. ¡Felicidades a los agentes!
Saludos, Paolo Lüers
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