jueves, 4 de octubre de 2012

Carta a Hugo Chávez

Teniente coronel:
Estoy claro que a usted, el presidente de Venezuela, le importa un bledo la humilde opinión de un periodista de un diario insignificante en un país tan poco poderoso como El Salvador. O a saber... porque por algo su gobierno se habrá tomado la molestia de negarme la visa para evitar que cubra las elecciones del 7 de octubre, en las cuales se definirá su futuro.

Usted me va a decir lo mismo que le dijo al candidato opositor que le está retando: El león no va a discutir con una mosca. Con este argumento usted se negó a enfrentarse a su contrincante Henrique Capriles en un debate de ideas. Prefirió seguir hablando solo en las innumerables cadenas nacionales. Bueno, teniente coronel: Resulta que la mosca puede ganarle las elecciones. Por lo menos le está legando bien cerca. Tan cerca que usted ya sacó a sus milicias bolivarianas a la calle, para asustar. Tan cerca que usted en todos sus discursos grita que cuando la mosca le ganara al león, habrá guerra civil... No sé cómo piensa a hacer una guerra civil con un solo bando armado, que es el suyo. A menos que usted tema que el día que usted cometa un fraude electoral o no reconozca su derrota electoral, su propia Fuerza Armada se divida y que una parte defienda el voto popular...


Este miedo sí es real. En mis últimos viajes muchos de sus militares me han dicho que son obedientes su presidente, pero no apoyarán ninguna locura como un fraude o un golpe de estado. Aunque es inútil, le doy un consejo: Si gana las elecciones, sea prudente y generoso; reconozca que la oposición existe, y que por lo menos la mitad de los venezolanos no quiere más socialismo, más estado, más confiscaciones de empresas. No cumpla sus amenazas de radicalizar su revolución.

Y si pierde, reconózcalo y entregue el poder. Usted no querrá quedar en la historia como un militar que se robó las elecciones, sino como un revolucionario que respetó la voluntad popular. En ambos casos, si usted actúa con prudencia en la derrota o con generosidad en la victoria, su movimiento bolivariano tendrá futuro. Si no, si actúa prepotente en la victoria o tramposo en la derrota, su proyecto político se hundirá con usted.

El mundo lo está observando...
Saludos desde San Salvador, Paolo Lüers
(Más!/EDH)