sábado, 20 de agosto de 2011

Carta al ministro de Obras Públicas

Estimado Gerson Martínez:
Siempre tuviste el don de las palabras. Entre los jefes guerrilleros fuiste quien se destacaba por un lenguaje casi de poeta. Todos hablaban en clave militar, marxista o de estrategas… vos en clave de literatura. Simpático.
No sé si es por esto que tu partido te encargó la redacción de su programa de gobierno para ‘el cambio’, el cual sorprendió a muchos por su lenguaje un poco romántico, tan lejos de la jerga revolucionaria que durante años ha cultivado el Frente. A algunos confundiste con este lenguaje floreado, a otros tal vez les quitaste el miedo al Frente.
Pero ahora te mandaste: “La Diego de Holguín se hace o se hace”, dicho en el momento que estabas sentado en conferencia de prensa para presentar a las empresas licitantes para terminar la autopista Diego Holgien. Sólo que no hubo a qué ni a quién presentar. Nadie solicitó. Las 22 empresas que habían adquirido las bases, las estudiaron y dijeron: Ni loco me meto ahí…
Algo está mal en el estado. Hablé con los representantes de una de las constructoras interesadas y me dijeron: Así como el MOP hizo las bases, es imposible concursar. No cuadran ni los plazos ni los montos. Mal hecho.
¿Y que vas a hacer, Gerson? Este huevo no se resuelve con el don del discurso, hace falta criterio técnico y administrativo. Es la segunda vez que tuviste que declarar desierta la licitación. La tercera es la vencida…
“La Diego de Holguín se hace o se hace” - ¿la cuestión es cómo y cuándo? Algo anda mal en el MOP. Y no sólo en el MOP, para ser justo contigo.
“Una economía fuerte y vigorosa necesita también un gobierno proactivo y efectivo”, escribiste en el programa de gobierno. Bien dicho. Pero que tienes este don de hablar bonito ya lo sabíamos…
Saludos, Paolo Lüers
(Más!)